CAPITULO 22

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"LA MENTIRA MEJOR OCULTA SIEMPRE SERA LA VERDAD MÁS DOLOROSA"

Mi mayor temor era enfrentar algún día a Thomas cuando quisiera reclamar cualquier derecho sobre nuestros hijos, era todo más fácil cuando pensaba que no los deseaba, que le hice un favor cuando lo deje irse, cuando me divorcie ahora aquí estamos, en mi casa, mi cocina a un paso de nuestros hijos sin saber que decirle.

- Thomas, yo...ay no se ni como empezar.

- Como empezar?, no se; tal vez diciendome como demonios tienes dos hijos que se supone que perdistes!.?.- Thomas alza la voz y sus ojos son dos llamas de fuego.

- Yo...

- tu, si tu!. Como un demonio  Valería, explicarme porque aun pienso que estoy en una pesadilla.

- Piensas que es una pesadilla tener hijos?, te molesta?. - Me ve a los ojos y se que no debi decir eso.

- No!, no vengas a cambiar todo a tu favor, por supuesto que estoy molesto. Valería ayer era un hombre que había perdido a su esposa e hijo y que trataba de recuperar algo de eso y hoy resulta que tengo no uno si no dos hijos, hijos que se supone que no existian, que habías perdido por mi culpa, como se supone que debo sentirme?. Porque no me lo dijiste?, porque me hicisteis creer que lo habías perdido? Que diablos pensabas?!..

- Baja la voz, los niños te van escuchar y se van asustar.

- Maldita sea- dice para el mismo, esta furioso, frustrado conozco esa actitud.- hablame porque estoy a punto de perder la poca paciencia que me queda.

- Creí que era lo mejor, en verdad no fue algo que haya planeado solo se dio y después solo pensé que era lo mejor.

- Pensaste, pensaste que era mejor decirme que perdiste al bebe, apartarme de mis hijos, Mentirme, donde debo ver lo bueno de esto ha?! Habla!.

- Bien, pero no grites por dios los niños.- Thomas camina de un lado al otro de la cocina- se como debes sentirte.- me vuelve a mirar furioso.

- Lo sabes, enserio?, sabes que es despertar en la casa de tu mujer prepararle el desayuno y de repente te volteas y veas una cara de un niño molesto, preguntando quien eres y que haces en la casa y con su mamá y no solo eso, si no después aparezca una niña preguntando lo mismo? Que tu cerebro vaya tan rápido para darte cuenta que esos niños son tuyos, unos niños que llevas años llorando, añorando, lo sabes!??

No por supuesto que no lo sabia, yo los tenia, los vi caminar, vi sus primeros pasos, sus primeras palabras, su primer día de clase, Thomas se había perdido todo eso.

- No, pero tuvimos esa pelea dijiste que preferias estar en cualquier lado menos conmigo, te largaste, después tu hermana, el accidente, la sangre yo creí que lo había perdido y se lo dije a mis padres, ellos fueron quien se lo dijeron a tus padres, Thomas yo estaba muy mal, triste tu padre llego un día después minutos antes que entrara el medico dandome los papeles del divorcio, que tu...

- Que yo que?!, continúa

- Que tu te habías ido de viaje, que haber pedido el niño fue lo mejor para los dos, tu no querías este niño no querías ser padre y cuando vi que habías firmado los papeles sin ni siquiera verme o importarte que haya perdido el niño...- lloraba, sentía como las lágrimas brotaban recordando ese día, lo que sentía - que se supone que debía hacer?, así que te di lo que querías firme y tus padres se fueron con esa cara de victoria. Me sentía horrible, utilizada luego cuando entro el médico a revisarme a ver si quedaba resto para ser un legrado, me hizo un eco y vio que aun estaba embarazada que no era 1 sino 2 pero que por el golpe y la perdida de sangre corría el riesgo de perderlos, que debía quedarme en reposo. Intente llamarte y decirte pero me conteste tu amiga y me dijo que ya no te molestara al fin al cabo tu casamiento conmigo era un bebe que ya no existía lo ultimo que supe es que dos horas después estabas en un avión.

- Por dios!... Cuando firme esos papeles tu y los habías firmado- no es cierto, era su firma - tu fuiste quien no quiso verme, quien se alejo quien me mintió!.

-No!, vi tu firma, dije que había perdido el bebé porque era lo que habían dicho cuando ingrese al hospital no lo planee, después que me entere que mis hijos estaban ahí, que eran dos y tu te habías ido solo decidí no decir nada,que siguieras tu vida.

- Mi vida, así de fácil no?!- Thomas irradiaba fuego por cada poro - supongamos que lo que dices es cierto, porque cuando nos volvimos a ver no me lo dijiste?, te hable, te explique lo que significo para mi perder esos niños y tu me mentiste , me dejaste pensar que seguían muertos, porque?!.

- Yo, lo intente pero...al principio no sabia que creer, luego...bueno estamos viéndonos y yo no sabia que decir, como reaccionarias y los niños...solo estaba asustada, estoy asustada.

- Que hago con eso?, maldita sea Valería, son mis hijos debiste decirme han pasado tres años, Tres todo lo que me he perdido, si no hubiera venido cuando me lo ibas a decir?, que me ibas inventar?...como un demonios!. Dime!..

- No lo se!..

En eso entra Edwin y detrás de el Mía con sus caritas, Mía asustada y Edwin su cara de molesto y manos cruzadas igual a Thomas cuando se molesta.

- Oye porque le gritas a mi mamá!? - le dice Ed, - y la haces llorar - Thomas solo me ve y los ve a ellos sin saber que decir, solo se pasa su mano por la cabeza, Ed se acerca y le da una patada en la pierna y no es por nada pero pega duro.

-Aush!!!, oye -dice Thomas

- A mi mamá nadie la hace llorar, no eres bienvenido vete de mi casa!.- le dice Ed.

- Ya no eres mi amigo, no me gustas - le dice Mía. Y veo la cara de Thomas contrariada sin saber que hacer.

- Niños, vengan acá- les digo - yo estoy bien, lo que pasa es que estábamos hablando y tuvimos un pequeño desacuerdo como cuando no te pones de acuerdo entre ustedes y se molestan.

- Pero estas llorando, un hombre no debe hacer llorar nunca a una mujer eso dice mi abuelo.

- Es cierto, - Dice Thomas - yo me exalte un poco niños y su mamá no tiene un carácter fácil así que no pusimos un poco molestos, pero yo no quise que su madre llorara.

- A ver, además es una conversación de adultos así que vayan a lavarse los dientes y bañarse para ir a donde la abuela.- les dije y los niños salieron de la cocina un poco molestos.

-Que bien ahora mis hijos no me quieren ver por que hice llorar a su madre...

- Son niños, se les pasa al salir del baño creeme

- Ese no es el punto, soy un extraño para ellos y no debería ser así, debo irme, pensar en lo que sea mejor para ellos- se dirige a la puerta

- Thomas...- voltea pensativo - se que debes estar molesto pero no creo que salir en esas fachas sea producente.- Thomas estaba en unos pantalones de pijama que le daban a la cintura y una franelilla que debió traer de su casa se veía sexy y descalzo, se vio y volvió a maldecir.

Se dirigió a mi habitación y quede como estatua, el tenía razón en muchas cosas, yo en las mías y teníamos dos niños en medio de todo este lío.

De nuevo en sus brazos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora