Tres días han pasado tres días y no he sabido nada de Thomas, las veces que ido a la oficina esta en en juzgado o en reunión, se que me esta evitando y no lo culpo si fuera alrevez estaría furiosa, un día eres un hombre soltero disfrutando de mujeres, dinero, pasatiempos y reviviendo el fuego con tu ex-esposa aquella que perdio a tu bebe y en el otro momento descubres que eres padre y no de uno si no de dos niños que no te conocen, que no sabes nada de ellos, ni sus gusto y que tu ex te ha mentido.
- Que estúpida debí decirle...- me digo a mi misma.
Escucho sonar la puerta de mi despacho y ve Ana asomándose.
- Que pasa Ana?, porque entras como si te fueran atacar? Siempre entras como Pedro por tu casa.
- Bueno si pero en estos días has estado de un humor no muy agradable.
- Lo siento so no he sido agradable solo que no he tenido unos días muy buenos que digamos.
- No eres la única por que tu socio el Sr Thomas tampoco anda con buen humor...
- Lo has visto?, ultimamente parece fastasma.
- Si, no se le puede ni hablar, parece que algo le preocupa, aveces esta muy pensativo, otros parece que te va saltar encima.
- Sabes siesta ahora en su oficina?.
- Si de hecho acaba de llegar, estaba hablando por teléfono y por su tono no quisiera ser la persona del otro lado.- esta molesto, tenia y sigue teniendo la mala costumbre de pagar su mal humor con las personas que lo rodean.
- Deseabas algo Ana?.
- A si, resulta que llego una notificación del juzgado por lo del caso Rocket, piden que te presentes mañana con tu cliente para declarar ya que el médico le va de alta mañana, no quieren postergar mas el asunto.
- Perfecto, eso significa que hay que doblegar la seguridad ya intentaron matarlo un vez y a mi así que si me notificaron a ellos también y van hacer lo imposible para que no llegue.
- Tu crees?.-me lo dice mirando un gran ramo de rosas que esta en el otro extremo de mi despacho. Volteo los ojos por solo verlo - no me mires así, al parecer le gustas es el quinto ramo de rosas que te manda y no es un hombre al que se le pueda decir que no.
- Cierto, pero resulta que aunque sea un hombre guapo no le quita el hecho de que es un delincuente que intento matar a mi cliente que era su trabajador y me amenazó. Prefiero ir con cuidado;a que hora debo estar en el juzgado?
-A las 10:00Am.
- Esta bien, voy hacer unas llamadas a la central de policía para doblegar seguridad y luego a mi cliente, gracias. Algo más?.
-No eso era todo por los momentos.
- Pues ya te puedes ir entonces, es tarde.
- Si ya un bombón viene por mi y el tuyo se queda gritando en su despacho.
Ana sale de la oficia, hago mi llamada a la central y gracias a dios el capitán acepta doblar la seguridad hasta mañana en el juzgado incluso se ofrecieron a escoltarnos, luego llamo a mi cliente, sonaba mas calmado pero aun así su miedo se transmitía no lo culpo. Quedamos en que pasaría por el para ir al juzgado.
Después de colgar detallo algunas notas del caso para mañana ir con el juez, tiro las flores nuevamente y cuando salgo de mi oficina aun veo la luz del despacho de Thomas encendida, se que esta ahí y aunque no se que decirle me dirijo hasta ahí, entró sin modificar, ni avisar debo decir que la mirada que medio no fue nada sexy, placentera o agradable si no todo lo contrario. Peleaba con alguien por teléfono, dijo algunas palabras mas y colgó; nos miramos por largo tiempo esperando que dijera algo cuando me doy cuenta que no lo va ser, habló.
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De nuevo en sus brazos.
Roman d'amourValeria Dunner es una excelente abogada que se ha forjado su camino con determinación, astucia y esfuerzo, con una gran convicción de que el amor es un obstáculo en sus planes. Tiene toda su vida bien organizada entre las responsabilidades del bufet...