The Sadistic Mind 2... [Terminada]

CAPITULO 28 HOT

~NARRA ALICE~

No demore demasiado en notar el evidente estado distante y preocupado del chico castaño que permaneció en silencio a mi lado sin decir palabra durante nuestro recorrido de vuelta a casa y ciertamente sabia lo que él pensaba. No era necesario que lo dijese, con solo mirarlo discretamente desde mi correspondiente lugar en mi asiento en su perfumado vehículo, supe que algo malo había ocurrido, y me arriesgué a pensar que todo se trataba de mi.
Claro. Muy posiblemente Harry pensaba en lo mismikque había pensado al inicio deeste casi, y yo sabia que élcomenzaba a preguntarse a su mismo si debía de mandarme de vuelta a Cheshire.

Temí por eso. No quería dejarlo, ni quería irme, pero mas que nada no deseaba que el resto de la cuadrilla me viese como la chica débil que tuvo que volver a casa por que el trabajo fue demasiado para ella.

Opte entonces por mantenerme en calma e idear un plan para evitar que Harry hablara sobre aquel tema que a mi me frustraba , y yo sospechaba que él se preguntaba a si mismo cual seria la forma mas sutil de pedirme que me marchase cuanto antes.

Bien, necesitaba demostrarle que yo era capas de hacer las cosas bien y para eso, necesitaba primero demostrarle que no estaba asustada, a pesar de que el pánico estuviera consumiéndome lentamente con el transcurrir de los días. Sin embargo, no podía permitir que él supiese eso, por lo que decidí romper el hielo cuando él se detuvo momentáneamente en un semáforo en rojo y con solo volver la mirada por un segundo a él pude apreciar su perfil nervioso.
Harry se mordía las uñas de una mano, justo como acostumbraba hacer cuando estaba nervioso.
¡Mierda! Y eso me hizo sentir instantáneamente culpable, sabiendo que yo era la única culpable de ello.

-¿Tienes habre, mi amor? Ordenare pizza en cuanto lleguemos a casa - bromee en un intento por relajar las cosas, tomando su mano delicadamente para apartarla de su boca y entrelazar firmemente nuestros dedos.
Me repose en su hombro ligeramente y saboree la victoria cuando lo escuche resoplar una corta risita.

-Gracias princesa - respondió sin adentrarse a extensas polémicas para aclararme que en relidad él estaba preocadon por
mi - Te amo - agrego y luego llevo mi mano a sus labios, para entregar un dulce beso.

-Yo igual - bese su mejilla y nuevamente me deje reposar en su hombro, sin dejar ir su mano que aun sujetaba la mía con fuerza mientras él ponía en marcha una vez mas el vehículo para permanecer en silencio, durante el transcurso a casa.

Entonces opte por cerrar la boca, y no decir nada mas hasta que Harry lo requiriese. Pero supuse que eso demoraría y al parecer seria realmente difícil convencerlo esta vez, ya que él en verdad parecía estar pensando las cosas con demasiada detención y eso me atemorizaba, porque yo sabia que aun no estaba lista para dejarlo ir.

Al llegar a casa, cumplí con mi palabra sin preguntarle nada en absoluto a Harry y ordene una pizza para intentar hallar la manera de enfrentarlo durante la cena, pero no había tenido la oportunidad de hacerlo y amhos nos habíamos limitado a comer en silencio durante un lapso de gran incomodidad.
Y finalemnete decidí olvidarlo. Supuse que si Harry necesitaría decirme algo lo haría cuando estuviera listo, pero algo me decía que él inútil castaño intentaba retener la situación. Y su silencio comenzaba a frustrarme demasiado mientras él deambulaba por la habitación después de nuestra incomoda cena y él parecía seguir tan distraído como antes.
Revolotee entre las cajoneras en busca de una pijama y estúpidamente  decidí cambiarme de atuendo justo al frente de él en un notable esfuerzo por cinseguir su atención que aun parecía distante.

-Mi amor - hable con voz temerosa, pero él no respondió y lo escuche soltar un amplio suspiro al sentarse a la orilla de la cama y su vista se encontraba clavada al suelo mientras se aflojaba a tirones la corbata - ¡Harry! - hable con mas fuerza y finalmente él me mito sin demostrar ningún interés profundo en mirarme de la forma dulce y amorosa en que acostumbraba hecerlo, lo cual me hizo sentir realmente mal - Dime por favor que no estas pensando en mandarme a casa ahora - murmure afligida sin poder evitar que las lágrimas se asomaran levemente en mis ojos. Por eso en realidad pareció surtir efecto y Harry destenso el rostro de inmediato.