5. "Dominado"

2K 169 22
                                    

No hace mucho desde que Javier se fue, aún seguía en su casa algo dormida. Tendría que irme pronto, al menos antes de que su familia llegue o quien sea esa mujer que vive con él.

Me levante para ir a refrescarme un poco, no quería salir hecha un desastre. Cuando me asegure de tener todas mis cosas en orden me salí, no tenía sentido quedarme por más tiempo o desayunar ahí mismo; de seguro es que no tenga nada.

Al llegar a casa no encontré la gran cosa, estaba ¿vacía? Mis hermanos para esta hora deben de estar en la escuela, mientras que Martha y Mauricio deben de estar metidos en sus asuntos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al llegar a casa no encontré la gran cosa, estaba ¿vacía? Mis hermanos para esta hora deben de estar en la escuela, mientras que Martha y Mauricio deben de estar metidos en sus asuntos. Era mejor aprovechar esta paz en lugar de pensar en esos dos.

Me adentre a mi habitación, seguramente se percataron de que no llegue ayer, aunque realmente no era sorpresa para nadie. Me daría una ducha fría, me pondré cómoda y disfrutaré que no hay nadie molestando.

Tras salir me vestí con una ropa holgada, no tenía planes para hoy. Justamente antes de poder vestirme por completo, la puerta de mi cuarto se abrió con fuerza, era el estúpido de Mauricio.

Mauricio: Pero mira quien recordó que tiene casa, se puede saber ¿Dónde estuviste anoche zorrita? — comenzó a reprender desde el marco.

Enserió cuanto odio a este tipo.

Tú: Lárgate de mi habitación, no tienes lugar para entrar y gritarme de esa forma ¡Que te valga madre con quién o dónde pase la noche! — grite empujándolo fuera de mi alcoba.

Mauricio: ¡Maldita puta! — reprocho antes de empujarme, él era más fuerte así que fácilmente me estrelle contra el suelo — en esta casa se hace lo que yo diga, tú y tu madre están para servir a los hombres. Reconoce tu puto lugar bastarda — un rápido tirón en mi cabello y se largo.

Tú: ¡Muérete! ¡Ojalá y te mueras maldito! — grite mies tras que golpeaba el suelo por la frustración que sentía.

Estoy harta de ese hombre. Me terminé de vestir y tomé mis cosas, dije que no tenía planeado salir, pero realmente necesitaba alejarme de esta gente.

Con mi habitación bajo seguro, sali por la ventana hacia cualquier lado.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El Yandere De La Chica Rebelde ▌ᴱᴰᴵᵀᴬᴺᴰᴼ ▌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora