El Guardián de Las Tinieblas

Diez: Cosas por hacer... Tengo hambre 😓...

- Crees poder hacerlo? #???

- ... Hmm~... Lo pensaré. Te aviso si algo. #Ekret

- Muchas gracias! *pose japonesa de agradecimiento*. Con su permiso. *se va*. #???

Ekret hablaba con una de las meseras de la posada, una humana. En cuanto se fue Kayla y Sakino se acercan a él. Ekret vestía la ropa que había recibido de la esposa del herrero menos los guantes que estaban a su izquierda en la mesa. Si no fuera porque él tuviera la cara de aburrimiento y sueño podría ser una persona bien aparentada de la nobleza. Estaba sentado en una de las mesas apartadas desayunando una comida ligera, posiblemente le daría hambre después. Ve a las dos compañeras acercarse y las saluda haciendo un gesto con mucha vagancia. Ellas se sientan enfrente de Ekret.

- Buenos días *desayunando mirando su plato sin levantar la vista*. Veo que se levantaron temprano. Planean hacer algo? #Ekret

- *molesta* Deberías de tener buenos modales Ekret... #Kayla

- *molesta* Tiene razón. Si actúas como quieras te puedes buscar problemas. #Sakino

- (Desde cuándo me habla con tanta confianza?... Espera! Desde cuándo Kayla habla conmigo con tanta confianza!?...) *bebe un vaso con leche*... No puedo hacer nada. Soy así por instinto, *mirada seria* y nadie me hará cambiar. #Ekret

- *suda frió* S-solo te estamos advirtiendo. *decidida* Te puedes meter en problemas si no te comportas como es debido frente a las demás personas, y eso nos preocupa mucho! #Kayla

- ............ *rostro de aburrimiento y sueño* Seguirán o podemos cambiar de tema? #Ekret

- No, Ekret, tienes que-... #Kayla

- Oh, parece que llegó sus desayunos... *se levanta tomando los guantes y se dirige rápidamente a la salida* Nos vemos después *de espaldas las despide con la mano derecha*. #Ekret

- M-me... ignoró... *baja la cabeza decepcionada de sí misma*... *voz baja* Por qué es así conmigo? #Kayla

- ...Y luego me dices que es buena persona... *decepción* Creo que cometí el error de volverme su amiga... #Sakino

Ekret caminaba tranquilamente por las calles hechas de piedras mal puestas observando las tiendas con aburrimiento, aunque parecía estar buscando algo. Eran las 10:26 a.m. . Se detenía raramente en las joyerías... Seguía caminando...de manera incómoda ya que sentía que era observado todo el tiempo. Luego de unos minutos no le dio mucha importancia y sigue con lo que estaba haciendo. No paró de caminar observando las tiendas que se encontraban a los lados de la calle. Algunas vendían telas de buena calidad. Otras, frutas que Ekret ni siquiera había visto en Internet. Por ejemplo, manzanas con el doble de tamaño y de color amarillo claro, racimos de uvas azuladas con pintas carmesí o fresas largas como zanahorias de color blanco. En otras tiendas más vendían objetos decorativos para el hogar... A Ekret le importaba un comino las demás tiendas, él solo veía las tiendas dónde vendían collares, anillos, pendientes y otros objetos relacionados con mujeres. Uno de los tantos lugares le llama la atención, por lo que decide acercarse. Era una casa de dos pisos bastante pequeña y limpia. Tenía encima de la puerta un cartel que decía "Seerafin, joyas de la felicidad". Observa por el cristal que había al lado una estantería con collares, pulseras y pendientes, todos diversos y brillantes. Ekret entra convencido...

Por otra parte... Sakino y Kayla estaban observando de lejos a Ekret entrar a la joyería. Lo habían seguido desde que salió de la posada... El desayuno que Ekret había pedido para ellas, en cuanto él se retirara, fue devorado en segundos, a pesar de que fue un desayuno del triple  de fuerte que el que comió él. Estaban escondidas detrás de una carreta con bultos mirando por la derecha. Se veía en sus caras un color rojizo en las mejillas...