El Guardián de Las Tinieblas

Once: ... La salvé... Pero tengo hambre 😫!!!

El primer cadáver no paraba de brotar sangre desde las rejillas del casco. El silencio se prolongó por solo unos segundos. Ekret empieza a quitarse los guantes sin ganas.

- Seamos sinceros *se quita el guante derecho*... Ni siquiera sé si mentiste o no. Pero una cosa es cierta *se quita el guante izquierdo*, y es que te atreviste a maltratar a una niña sin posibilidades para defenderse... Tal vez si no hubiera escuchado el grito podría haber dejado pasar esto... Pero gritó por que quiere vivir y no sufrir más. *voz media*... Y yo que creí que todos aquí estaban podridos de mente
Bueno, supongo que hay casos que solo se dan una vez en la vida. #Ekret

- (E-ese cuchillo... Casi no logré verlo! Esa precisión es solo de alguien con experiencia en combate larga distancia! Pero la velocidad y fuerza que ejerció para que atravesara todo el cráneo...! Un héroe mestizo!? Maldición!! La situación se me ha salido de las manos!!) *sudando mucho* T-tranquilo! *suelta el pelo de la niña* No queremos problemas. Si quieres dejaremos a la niña aquí y nos iremos. Q-qué te parece? #M

- ... Hmm~... *mira hacía arriba* Mmmmmhhhhh... *mira a la derecha* Mmmhhh~... Mm?... *mira abajo* Hmmmm~... *mira al frente con sonrisa degenerada y mirada homicida* Tres segundos. Si están aún aquí después de tres segundos los decapitaré... *apunta a la mujer* Entendido? #Ekret

- *asustada*... #M

- Tres... *gesto de tres dedos en la mano derecha*... *la mujer y los hombres que la acompañan corren hacia la salida del callejón desesperadamente* Dos *gesto de dos dedos*... *los atemorizados están por la mitad del camino golpeándose entre sí para poder huir*... Je, uno... *con el dedo índice apunta a la dirección de la salida y murmura* [Dim ink]. #Ekret

Dichas las últimas palabras de Ekret, en un segundo parecía que las sombras presentes reflejadas por el sol, que no iluminaba mucho, se empezaron a mover en dirección a la salida del callejón por donde huían los cobardes. Ya ellos estaban llegando, llenos de moretones dos que no llevaban casco por la pelea de quién escaparía primera. La última era la mujer, que fue la que más golpes en la cara tenía. Corriendo, aún con todas sus fuerzas, se sentía agotada por la paliza que recibió. En un intento de acelerar su paso no se percata de que una de las losas del suelo estaba un poco más levantada que las demás y tropieza con esta (que casualidad 😏). Desplomada en el suelo siente odio e ira hacia aquellos hombres que le habían jurado protegerla a cambio de un buen pago. Las lágrimas y los mocos no paraban de salir mientras ella les gritaba obscenidades.

Uno de los hombres estaba saliendo, si no fuera porque de los muros, que se cubrieron de completa oscuridad, salieron dos serpientes negras de ojos rojos y grandes que desde lados diferentes se llevaron miembro superior e inferior de una sola mordida de sus mandíbulas llenas de dientes puntiagudos y desordenados que solo se notaban con la poca claridad que daba el sol. Entrando y saliendo de los muros oscuros como si del agua se tratase se fueron a por la siguiente víctima. El siguiente era un hombre que aunque tuvo tiempo de reaccionar para dar media vuelta terminó de la misma forma. El tercero no sabía que hacer. El suelo se torna como los muros y las serpientes se entierran a la vez. El hombre no paraba de temblar, incluso con la espada que tenía desenvainada las manos no podían sostenerla bien. Desde el suelo oscuro una inmensa anaconda se eleva a pocas alturas y desplegando sus fauces engulle por completo al hombre que ni tuvo tiempo para terminar su desgarrador grito.

La mujer no creía lo que sus ojos presenciaron. La serpiente se metió al suelo a la vez que engulló al hombre. Estaba paralizada. Ni siquiera podía organizar sus pensamientos. Entonces de los muros y el suelo estelas oscuras comenzaron a salir dando pequeñas vueltas y entrelazándose entre sí para dar forma a algo con forma humana. Pero lo único que no era humano era su sonrisa parecida a la de Ekret y sus ojos completamente rojos y brillantes.