El Guardián de Las Tinieblas

Treinta y nueve: Vayamos por partes... 1ro: EMPEZANDO POR TU CABEZA 😌🙂!!!

Ekret miraba con ojos homicidas al nakropheropt (joder, qué nombre más raro le he puesto!!). Este también observaba con sus ojos brillantes detrás de las cuencas de su casco huesudo. Los demás quedaron estupefactos al ver al chico salir de donde se encontraban. Comienza a moverse hacia la derecha, despacio, con el mandoble al hombro derecho, sonriendo macabramente (←no sé si eso exista). El wyvern se queda mirándolo, analizando cada uno de los movimientos lentos de él. Los otros aventureros mantuvieron silencio total mientras tomaban distancia de lo que iba a ocurrir. Sani estaba dispuesto a ayudar a Ekret, pero Kayla se lo impidió. Ella sabía muy bien de lo que él era capaz de hacer. El nakropheropt mira rápidamente a los otros lejanos, notando rápidamente la situación.

Ekret deja caer el mandoble al suelo y lo arrastra en su camino, haciendo ruido mientras la hoja dejaba una línea algo profunda en la tierra. El wyvern lo sigue con la cabeza. Sus pupilas blancas se dilataban mucho más, fijando solo al joven. Cerca del río no había tanto bosque, pero igual se presenciaba. Cada uno estaba a unos cuantos metros de distancia. El nakropheropt levanta su cuello y chilla secamente. La batalla estaba por empezar.

El primer movimiento fue del monstruo. Salta directamente a Ekret con intenciones de atravesarlo con el pico huesudo. El ataque falla, Ekret retrocedió velozmente. El pico se entierra en el suelo, pero es retirado en el momento. El nakropheropt vuelve a intentar picotear al chico, fallando de nuevo, otra vez por su retroceso. Deteniéndose en seco y dejando que el espadón cromado oscilara hacia atrás, el chico toma impulso y con fuerza lo vuelve a mover,esta vez oscilando hacia el frente. El filo de la hoja hace un corte desde la derecha y cayendo diagonalmente a la izquierda. El wyvern emplumado retira su cabeza, evitando el ataque. Ekret no se detiene. Con el mismo brazo derecho levanta el espadón, el cual aún estaba en movimiento, haciendo que este se posicionara en la parte superior izquierda. Rápidamente salta y vuelve a atacar en diagonal. El nakropheropt salta hacia atrás, esquivando el segundo ataque.

Ya en el suelo, se levanta en dos patas y extiende sus alas, llevándolas hacia atrás, como si fuera a emprender el vuelo. Se podían ver las diferentes plumas tomar un brillo diferente cuando los pocos rayos de sol se reflejaban en estos. Iba a utilizar [Quills blades]. Con bastante fuerza el nakropheropt retrocede unos pocos metros a causa de su habilidad, la cual había lanzado plumas metalizadas en dirección a Ekret, quien no paraba de sonreír. Estas lo traspasan, mostrando cómo él se volvía humo negro en segundos. El wyvern queda confundido por unos rápidos momentos, reaccionando a tiempo a las cuatro serpientes oscuras que emergían de su propia sombra por el frente, por lo que salta hacia su derecha. Acto seguido se voltea y levanta su garra derecha, bloqueando el espadón plateado de Ekret. Este no paraba de mostrar una macabra sonrisa hacia su enemigo. El nakropheropt, en dos patas, vuelve filosa todas las plumas de su ala izquierda y realiza un corte horizontal con esta, dejando al chico en dos mitades. Otra vez se vuelve humo negro.

Comenzó a buscarlo con la mirada, moviendo frenéticamente sus pupilas blancas hasta captarlo adelante, a unos cuantos metros, bastante lejos de ambos. Ekret dejaba caer el arma en su hombro derecho. Miraba al wyvern de forma desafiante y divertida. Sentía que su cuerpo estaba en un estado eufórico.

- Jeje... Jejejeje... Jajaja... Ajajajaj... JAJAJAJA!!! (JODER!!! NO QUIERO PARAR DE ATACARLO!!! ES TAN DIVERTIDO!!!) ESTO SÍ ES UN VERDADERO JUEGO!!! JAJAJAJAJAJA!!! #Ekret

Sus palabras descontroladas fueron dichas mientras se abalanzaba hacia el nakropheropt, dejando desprendido el espadón plateado en su mano derecha. Este hace lo mismo y se lanza en carrera de forma cuadrúpeda. A unos metros de ambos salta, y en el aire prepara sus garras filosas mientras estiraba un poco sus alas descoloridas. Iba a atrapar a Ekret, como si fuera un ratón a punto de ser capturado por un halcón, pero no fue así. El chico salta hacia la derecha, evitando las filosas uñas del wyvern pájaro. Rueda dos veces y luego se recompone rápidamente mientras el espadón, por inercia se movía hacia atrás, acto que aprovecha y con fuerza lo lleva al frente, con la intención de cortar las patas de forma horizontal.