Golpes y golpes. Agho y Batriarca no se detenían en una ráfaga de puños. La ventaja la llevaba la mujer, la sangre que tenía le daba el suficiente Hp que necesitase. En las afueras de la mansión, cráteres, rocas grandes y otras rotas, suelo chamuscado y algún que otro pedazo de cristal rojo conformaban el escenario. El ser oscuro bloqueaba las estacas, espadas, lanzas, todo tipo de armas conformadas por sangre cristalizada con solo sus brazos, además de los latigazos constantes de Batriarca. Pero él no se quedaba quieto. Entre bloqueo y esquive, Agho asestaba con sus puños a la cara y torso de la mujer endemoniada. Luego de unos minutos de golpes entre sí, se detienen. Agho parecía estar agotado, su Hp disminuía tanto por su habilidad como por el daño recibido.
- *sonrisa soberbia* Jo~, parece que alguien va a caer pronto. #Batriarca
- (Esto no está bien. En cualquier momento pereceré. Tengo que acabar con ella ya. Qué haría mi comandante...? No, atacar al frente no es la opción. Entonces, ¿qué haría el Maestro Ekret...? Ugh, es una opción horrible. No soy de ese tipo de personas, aún tengo que mantener mi orgullo. . . Menuda mierda acabo de decir!! Perdí mi orgullo cuando acepté ser esto!) Ja! No estés tan segura, bruja. #Agho
- ... Cómo me llamaste? #Batriarca
- Oh~, parece que he dado en un punto crítico sin moverme. (Eso es, una estrategia sucia pero riesgosa. Si ella cae...) Es que no te has visto en un espejo? Tienes arrugas por sonreír tanto, bruja idiota. #Agho
- *molesta* Vaya, parece que quieres morir. No que ibas a hacerme pedazos? #Batriarca
- Mmmhh... Lo he pensado bastante mientras peleábamos y he llegado a una conclusión: no me sirves para nada. Estoy seguro de que hay otros con más conocimientos que la misma propietaria de esta pocilga. #Agho
- *rostro sombrío y sonrisa forzada* Jaja, conque "pocilga"... #Batriarca
Batriarca estaba enojada, toda la sangre del lugar empezó a moverse en círculos a su alrededor. Esta empezó a tomar forma de jabalinas y lanzas. El arma que ella sostenía con su derecha se volvía larga, desapareciendo los segmentos que lo hacían látigo. Tres espadones carmesí encima de Batriarca, gigantes y formados por la sangre, apuntaban a Agho. Toda la sangre brillaba intensamente.
- Tus últimas palabras antes de ser ofrecido por mis Dioses? #Batriarca
- Es tu poder para controlar la sangre es magia? #Agho
- Claro. Algo más? #Batriarca
- Sí, vete a la mierda. #Agho
- ... Desaparece. #Batriarca
Todas las armas, a excepción de los espadones, fueron expulsados velozmente hacia Agho. Estas chocaban y rebotaban contra el cuerpo del ser oscuro, pero algunas conseguían atravesar su rocosa y dura piel. Agho mantuvo su posición sin retroceder ante la ráfaga sangrienta. Las espadas grandes fueron las últimas en atravesar el cuerpo del ser. Agho no se movía ni hacía ruido alguno.
- Jmjm... Serás una excelente ofrenda para mis Dioses. Cuánta calidad tendrá tu alma...? Hmm? *sorprendida* Aún sigues vivo? #Batriarca
- ... <[Dark-Mirror-Ceaceless-Abyss]>. #Agho
Una onda oscura sale rápidamente expulsada de Agho y desaparece al instante. Batriarca quedó sorprendida al ver aquel movimiento, pero no había pasado nada. Siente entonces algo en su cuerpo y extremidades. Lanzas y jabalinas de sangre la atravesaban, incluyendo las espadas. No comprendía que estaba pasando, hasta que nota algo que le daba la explicación que buscaba. Las armas tenían detalles negros en todo su interior, emitiendo un aura oscura.
- *adolorida* R-reflejaste mi ataque, ¿no es así? #Batriarca
El cuerpo de Agho tomaba su forma normal de aspecto flaco. Él empieza a caminar hacia ella, quien caía de espaldas al suelo.
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El Guardián de Las Tinieblas
FantasyGilberto es un estudiante de programación que le gusta mucho los RPG. Pero sufre de un problema grave. Él no habla con nadie, es un completo antisocial. Sus estudios los realiza en la PC portátil que tiene. La mayoría de las veces está encerrado en...