- *mirada pícara* Je... Je... Je. Así que por fin mi amiga ha encontrado su amor predestinado? #Xuie
- *sonrojada* N-no lo llames predestinado... Pero... Aceptó mis sentimientos y él me mostró los suyos. #Kayla
- Pues no parece que los muestre a otras personas. Recuerdas cuando apareció de la nada mientras éramos esclavos? #Xuie
- Sí. Al principio fue algo confuso. Pero luego sentí esperanzas de ser liberada otra vez. #Kayla
- *nostálgica* Sí, has pasado por tanto, Kay... #Xuie
- ... Dejemos el pasado a un lado. Qué es lo que piensas hacer ahora? #Kayla
- Hmmmhh... Kijiji. Es que acaso no te das cuenta? Veamos si hay algo en el mercado. Con el apuro del grupo no nos dio tiempo para divertirnos un rato. Has visto algo interesante? #Xuie
- He visto una sastrería donde venden vestidos preciosos. #Kayla
- Pues echemos un vistazo. Tal vez compremos algo para nuestro prometido. #Xuie
- *sonriendo* Dijiste algo? #Kayla
- Dónde queda la tienda? #Xuie
- No seas tan impaciente. Es por aquí. #Kayla
Kayla y Xuie fueron juntas por un camino hasta llegar al lugar. Era una casa de tres pisos, donde en el primero habían ventanas de cristal que mostraban en su interior vestidos de diferentes tonos y formas. Xuie miraba asombrada esos vestidos, al igual que Kayla por segunda vez. Entran animadas a la tienda.
...
Orel y los tres lizards iban a la pequeña mansión de Lieb, el hombre que les encargó la misión. Esta estaba apartada de las demás casas. Presentaba un color carmelitoso en su estructura, con árboles en los alrededores para embellecer el paisaje desde lejos. El señor, que miraba por una de las ventanas la llegada de los cuatro aventureros, quedó algo sorprendido, confuso y luego sonriente. Una sirvienta abre las puertas de la gran casa y deja pasar a los cuatro hombres. A los pocos minutos, el Señor Lieb les da la bienvenida.
Lieb era un hombre un tanto corpulento, de tez rígida y bronceada. No tenía casi cabello, y los que tenía estaban canosos. Sus manos mostraban cicatrices que se escondían en el traje amarillo que llevaba puesto. Se notaba que era alguien que pasó por peligros, o tal vez aventuras.
- De todas las personas que han ido en estos últimos meses, ustedes han sido los únicos que regresaron en una sola pieza. Vayamos a mi despacho. Quiero que me digan los detalles de qué fue lo que vieron... No había alguien más con ustedes? #Lieb
- Sí, fue a divertirse en el pueblo con una amiga nuestra. #Orel
- De verdad...? #Lieb
Ya en el despacho, Lieb tomó asiento en la silla detrás de la mesa e invitó a los cuatro a sentarse también. Estos rechazan la oferta, quedándose parados con Orel al frente.
- Y bien? Qué me dicen de aquel lugar? Encontraron el motivo de la huida de los monstruos y criaturas en esa zona? #Lieb
- (Por dónde debería empezar...? Decir que en verdad hay una secta que podía acabar con todos? Hablar sobre las criaturas oscuras que nos encontramos? Todo lo que diga irá en dirección de ese chico Ekret.) Pues verá-... #Orel
- Un momento... Qué no iba con ustedes alguien más? Un chico de cabello gris y ojos rojos? #Lieb
- ... Sí. Ese chico... #Orel
La puerta sonaba por el toque de la sirvienta.
- Señor Lieb, otro invitado del grupo de aventureros está aquí. #Sirvienta
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El Guardián de Las Tinieblas
FantasyGilberto es un estudiante de programación que le gusta mucho los RPG. Pero sufre de un problema grave. Él no habla con nadie, es un completo antisocial. Sus estudios los realiza en la PC portátil que tiene. La mayoría de las veces está encerrado en...