Vuelta a la vida

Capítulo 78 (Betty)

Me estremecí al verlo aparecer con el labio partido, y un par de moratones en su cara y brazos.

Quería abrazarlo y gritarle al mismo tiempo. Hice lo segundo.

-¿Qué mierda es esto Jughead?- señale todo el lugar con los brazos- ¿ibas a decirme alguna vez de esto?.

-Déjame explicarte ángel- hizo unos pasos para acercarse pero me hice para atrás. Pensándolo bien no quería que me tocase.

Vi dolor en su rostro, pero retrocedió.

-Explicarme qué, que eres una especie Rambo que peleas aquí y ganas el dinero de las apuestas. - Oh espera- seguía atando cabos sueltos- ¿El dinero para ir a LA salió de aquí verdad?.

El no me respondió, sólo me miró con dolor a los ojos.

-¡¡Lo que faltaba. Me mentiste en todo. EN TODO!! - grité mientras iba y venía en mi lugar como posesa.

-Tengo una explicación ángel, escuchame- salvó la distancia entre nosotros y me tocó el rostro. Mis terminaciones nerviosas reaccionaron ante su tacto, pero estaba tan enojada...

-¡¡ No me toques Jughead !!- le retiré la mano- ¡¡no puedo creer que nos peleamos tiempo atrás porque no te dije la verdad y ahora me vengo a enterar por Archie, ARCHIE- recalqué-  esto que haces!!- estaba sacada, fuera de mi misma y seguía gritando.

- Sólo te oculte un par de cosas por tu bien ángel, tienes que escucharme- me decía él con la voz quebrada, herida.

-Deja de llamarme ángel, ¡¡no soy tu ángel!!- me hice un poco más atrás y lo mire a los ojos- no se quién eres, ya no se quién eres.

- Soy yo, el que prometió amarte por siempre- me dijo casi en un susurro.

Eso me rasgó el corazón pero hizo que me enojaran aún más sus mentiras.

-Te dije toda mi verdad, me entregue a ti en cuerpo y alma, deposite en ti mis sueños, mis anhelos, mi confianza, todo te lo di, hasta quedarme sin nada... - las lágrimas caían por mi rostro, ya no podía parar no me podía contener.

- Yo también te he entregado todo, por eso te pido que me escuches- a él también le cayeron unas lágrimas- sólo te pido que me escuches, por favor. No es lo que piensas.

- ¡¡¿Y que mierda fue lo que vi ahí dentro?!!. Eres como una cuchilla afilada, eres preciso, ágil. Es como si estuvieses preparado para hacer esto.

Yo seguía gritándole, algunas personas trataban de ignorarnos, y otros se habían quedado escuchando. Kevin estaba cerca tratando de no escuchar, pero de seguro lo estaba haciendo.

No me importaba, ya no importaba.

Jughead quiso volver a hablar pero le dije con la mayor frialdad que pude reunir:- no te gastes en decir nada, ya no confío en ti.

- ¡¡¡Escucha lo que tengo para decirte Elizabeth!!! - me gritó Jughead y agarró unas piedras y las tiró contra unas ventanas de un edificio abandonado a nuestro costado.

-¡No me dejas hablar, maldita sea!, ¡déjame que te explique!

Se puso como loco y empezó a golpear con sus puños la pared que teníamos en frente.

Y luego vino hasta donde estaba yo y su voz grave resonó en la noche: - estás cometiendo un grave error.

En eso apareció Kevin y empujó a Jughead para que se alejara.

- Ya no se quien eres Jughead, te juro que no lo sé. Te has convertido en un monstruo.

Jughead que en ese momento estaba mirando el suelo, levantó la vista para mirarme, y lo que vi me destrozó por dentro. Había ido muy lejos con esa afirmación, había pasado el punto del retorno.

Se miró las manos ensangrentadas y dijo después de un momento: - Perdóname Elizabeth- levantó la vista y me asusté, ahí no había nada, ni luz, ni oscuridad, no había nada- y tranquila, ya no volverás a ver mi despreciable rostro.

Se dió la vuelta, y andando despacio se perdió en la noche.