Vuelta a la vida

Capítulo 8 (Betty)

Esa noche, nos sentamos con Archie en el porche de mi casa con unos helados de Pops a charlar.

-Así que dime, Betty - comenzó Archie tragando un gran poco de su helado - ¿cómo te fue con Jughead hoy ? Parece un buen chico.

Seguramente no pensaría lo mismo si supiera lo del Beso. Por primera vez, me guarde algo para mí y no le conté nada a Archie de lo sucedido. Quería que sea mi secreto, mi tesoro. Así se sentía ese beso robado.

-Oh, todo normal - repliqué restando importancia al asunto- le mostré toda la escuela y le fui explicando lo más importante de cada cosa. En ese momento aproveché que estábamos hablando del tema para preguntar: - ¿cómo es que conociste o sabías de Jughead ?.

- El preceptor el otro día me dijo que como embajador del equipo, tenía que ser amable y recibir a algunos de los nuevos que pudieran ir llegando - ya casi estaba terminando su helado - así que le dio mi dirección a Jughead para que viniera a hablar conmigo antes de ir a la escuela para que por lo menos tenga una cara conocida para ver cuando llegase.

Le contesté que me parecía bien que el preceptor hiciera eso, así los nuevos no se sentían tan solos al llegar.

Luego se hizo un silencio incómodo, yo ya había terminado mi helado y no teníamos ningún tema de qué hablar al parecer. Es que a decir verdad, todo se había vuelto raro después del verano, cuando el me confesó que sentía cosas por mi. Ese día me sentía sola y vulnerable, así que nos besamos pero no llegamos a mayores. Para mí ese beso no significó nada, pero para él era la confirmación de que quizás yo sentía algo.

En otra oportunidad él quiso volver a avanzar y le dije como eran las cosas, lo que sentía. A lo que él contestó que no había problema, que le encantaban los retos y que me conquistaría.

Últimamente estaba pensando que quizás estaba logrando su cometido de conquista, pero todo lo que pasó hoy con mi chico misterioso y sus ojos como tormenta de verano, no quedaba dudas que Archie no me movía un pelo. Jughead con sólo una sonrisa lograba que las mariposas que habitan mi estómago, se volvieran locas...

El problema sería decirle eso sin dañar sus sentimientos. En eso me encontraba pensando cuando me dijo: -Ey tierra llamando a Bets- y chasqueo los dedos delante de mi cara- ¿en que te quedaste pensando?.

-Oh, lo siento mucho Arch. Tengo muchas cosas que hacer en casa con mamá y me abrume de sólo pensarlo- dije como para salir del paso.

Me puse de pie y Archie también. -creo que ya es hora de entrar -  y le di un beso en la mejilla- hasta mañana Arch.

-Adiós Bets - lo noté medio turbado por lo rápido que había terminado nuestro encuentro.

Dió media vuelta y cruzó la vereda hacia su casa.