09. Primero, valores

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Alastor Moody. El nuevo profesor de Defensa contra las Artes Oscuras, era intimidante y su rengueo lo convertía en un hombre fuerte de carácter. Había algo que no encajaba con él, porque en breves minutos bebía de una petaca como si fuera una medicina, según él. Sus cicatrices de experiencia como auror, se marcaban ante sus expresiones rígidas. Su ojo sano se concentraba en el pergamino delante de él. Su ojo mágico vigilaba la clase. Algunos chicos evitaban mirarlo, en especial aquel ojo mecánico, y pocos le parecía lo más interesante de anteriores profesores .

Sophia estaba sentada a mi derecha, no tenía miedo de mirarlo ni siquiera de alzar la mano para sacarse alguna duda de los hechizos que teníamos que redactar soluciones en situaciones de batalla. Alastor era duro, seco y una expresión de seriedad, que obligaba a tragar saliva y, si eras capaz de sostener la mirada, serías un héroe en la clase. Así era como Sophia actuaba con él. Pero, el profesor Moody me utilizaba como si fuera un conejillo de indias, me exponía frente a todos mis compañeros de Slytherin y Gryfflindor.

-Explique la función de Bombarda, señorita Malfoy. Si es que aún tiene algo de cerebro para recordarlo.- hablo a través el silencio que impuso con esa grave y demandante voz.

Obedecí con las manos sudadas y sintiéndome atrapada en las miradas compungidas de todos. Empecé a hablar con seguridad, explicando lo más comprensible posible. Alastor me regañaba, me obligaba a cambiar la tesis, y las risas de burla me ponían más nerviosa.

Cuando la clase termino, al igual que mi humillación. No era nada mala en esta asignatura, pero cada profesor tenían una personalidad diferente, y eso confundía el aprendizaje. No sabía cómo saldrían mis calificaciones este año, teniendo a Alastor Moody como el nuevo profesor. Era un tipo raro, sinceramente.

-¡Vaya!-exclamó Sophia mientras nos dirigíamos al baño del primer piso.

-¿Qué?- dije acomodando mis libros en mi mochila.-Es la segunda vez que paso al frente de la clase.- le mencione con una mueca de disgusto.- Si tanto te agrada, pasa vos. Después de todo, serás auror.

-Cierto.

Pasamos al interior del baño, un grupo de chicas de Ravenclaw estaban hablando que se callaron al vernos. Imagine que estaban chismeando acerca del duelo con mi hermano. No me molesto que hablaran sobre mi familia, y de mi. No iba a poner atención a las miradas de sorpresa, intrigas y preguntas que no tardarían en mencionarme. Sophia me dejo su mochila y su túnica para entrar a un cubículo. Entre las jóvenes, estaba Cho Chang que me observaba sin reparo, le sonreí y ella tomo la oportunidad de acercase.

-¿Es verdad que te enfrentaste a tu hermano?-me pregunto sin miramientos. Asentí.- La gente respeta a los Malfoy. Son unidos y poderosos, ¿Por qué luchar contra tu propia familia? Eso es traición.

-En cada familia, hay una persona que no encaja con el lazo familiar. Sé rebela. Sé libera de las reglas, los estereotipos. Soy la oveja negra de los Malfoy, Cho.-le contesté sin avergonzarme. Eso era la verdad.- No es la primera vez que me enfrente a Draco. Es normal. Lo entenderías si tuvieras hermanos, Ravenclaw.

Sophia salió, miro con frialdad a la chica de dieciséis años que se sonrojo. Mi amiga se acerco más a ella. Cho estaba vacilando, se disculpo por su atrevimiento y salió del baño con sus amigas.

-¡Águila, ingenua! ¿acaso cree que es la reina de Hogwarts?-expreso Sophia su desagrado, me hundí de hombros.- ¿Por qué hablaste con ella? ¿Esperas la aceptación de alguien aquí, o de afuera?

-Tal vez.-le dije con un suspiro. Sophia se acerco a los lavabos, limpio sus manos.

-Vamos , Ernestine.-me llamo la atención, se peino su cabello rubio y me observo por el reflejo.- Eres tu quien debe aceptarse. Así como eres. Nadie tiene que juzgarte, ni decirte como o porque hacer las cosas.

-Lo dices porque sos mi amiga, Sophia. Los otros creen otra cosa, y están equivocados.-le dije, me cruce de brazos.- El chico pelirrojo es un Weasley. Él también cree eso. No dejaré que me vean de esa forma.

-Como sea.- dijo Sophia, tomo sus cosas.- Como dije, encuéntrate a ti misma.

Ella tenía razón. Dentro de mí, había perdido mis valores, y mis sueños. Estaba destruyéndome, sin darme cuenta, lo estaba haciendo.

Enciende el fuego en mi 1#EnLlamas /Charlie WeasleyxocDonde viven las historias. Descúbrelo ahora