16. Una decisión dirige el destino

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Me sentía culpable de decir algo sobre Harry Potter, en verdad, que no sabía nada de él. Había usado mi punto de vista influenciado por los Malfoy. Especialmente, mi padre, que hablaba completamente confiado de esas personas que le tenía poca estima. Estaba por cumplir la mayoría de edad como para seguir oyendo otras ideas, que no eran propias. Charlie había hecho que reaccionará a esto. Estaba equivocada en creer en los comentarios sin fundamentos de mis allegados. Me quedé sentada en la misma banca, en el lugar de él. Seguía en la plaza principal de Hogsmeade, esperando que mis amigas me encontraran.

Me sentía apenada, quería llorar de impotencia, estaba harta de todo. No quería continuar en la mansión Malfoy, necesitaba formar un futuro sin interrupciones de mis padres, de esas personas que confiaban en promesas falsas del Ministerio de Magia.

-¿Ernestine?¿Estás bien?-me preguntó Sophia, encontrándome fácilmente en el área circular de la plaza. Estaba sola.- ¿Estás llorando?

-Es que, me pelee con Charlie.-le contesté, limpiando algunas lágrimas. Ella comprendió, que necesitaba hablarlo.- Hablamos sobre Potter. Creo que todos subestimamos mucho a ese chico.

-¿Quién no lo haría?-concordó mi amiga, sentándose a mi lado. Tomó mi mano con cariño, no me di cuenta que estaba temblando.- Al menos, sabe defenderse más que otros. Y, comprender las situaciones que se enfrenta, y a quienes.

-¿Lo defiendes? Creía que lo odiábamos como todos.

-Odiar es una palabra peligrosa, Ernestine. Solo, pienso neutralmente.- me aclaró con una sonrisa honesta.- Dime, que te dijo Charlie para ponerte tan sensible.

Trague saliva para volver al tema de las diferencias que él y yo teníamos acerca de las creencias políticas, la popularidad y diferencias de nuestras familias, la rivalidad y la ignorancia. También, le destaque que el Ministerio de Magia, estaba escondiendo más información que cualquiera de otros años. No quería romper, ni arruinar esta reciente relación con Charlie Weasley. Miré a Sophia, esperando una respuesta que me ayudará a pensar. Movió su cabeza hacia la entrada de la plaza, pensativa casi perdida en ella misma.

-¿Quieres dejar de pensar en la mierda de Sid, Sophia?- le regañe impaciente, dándome cuenta de que se trataba tanto silencio viniendo de ella.- Por favor, amiga. Decime que puedo hacer por Charlie, y no lo compares con Sid. Son polos opuestos, y lo sabes.

-Lo siento, pero no estaba pensando en él.- dijo ella, asentí. No estaba segura de sus pensamientos en estos momentos.- Estaba pensando sobre lo qué paso con tu pelirrojo, tu chico raro. Y, mi pregunta es; ¿Quieres ser su amiga, o su novia? Porque, las cosas serán diferentes a pesar de las desigualdades de sus familias. Ambos, rompen el molde, ahora mismo. ¿Entiendes?

-Sí, comprendo.- le correspondí. Era obvio, pensar esas relaciones iniciaban por la palabra amor, cualquier persona sabía las diferencias.- La verdad, es que Charlie me gusta. Es tan hermoso, testarudo y a la vez, actúa raro como si nada le importara sobre sus creencias, sus talentos.

-¿Entonces, qué te impide estar con él? Potter no tiene nada que ver en esto.-terció ella. Me hundí de hombros, sin decirle algo respecto a esta relación.

Mi amiga había dicho dos cosas interesantes; noviazgo, o amistad. Había sentimientos de mi parte, no conocía lo que Charlie sentía al vernos cada tanto, era mejor aclarar esta relación antes que vuelva a Rumania.

Las últimas horas de la mañana, estaban acabando, teníamos poco tiempo para pasear, tomar cerveza de mantequilla y comer pay de calabaza. Me puse de pie, más tranquila de haber conversado del tema con mi amiga. Le hice una seña para ir a Cabeza de Puerco, seguramente Anka estaría allí con Marcus.

Enciende el fuego en mi 1#EnLlamas /Charlie WeasleyxocDonde viven las historias. Descúbrelo ahora