How to save a life -(Ventino) [Makia]

Capítulo 1 - Si saltas también lo voy a hacer yo.

*Cuatro años y unos meses antes*

Makis Prov:
- Por favor, no me vuelvas a pegar - le digo a uno de mis compañeros, se supone que es un chico que me conoce desde que éramos niños, se llama Jaime y se supone éramos amigos, hasta que él me dijo que se había enamorado de mí y que quería una cita, la cual decliné, todo por una simple razón, me gustan las chicas, eso pasó hace aproximadamente un año y desde ese entonces él y su grupo de amigos me hacen bromas pesadas o de lleno me golpean.

- ¿Dime que se siente que la persona con la que te ilusionaste juegue contigo? - me dice antes de soltarme otro golpe en el estómago, me quita de cuajo la respiración de los pulmones y me deja arrodillada jadeante, no puedo creer que nuevamente la vida me jodiera de esta manera, como si ya no estuviera lo suficientemente jodida.

-Yo no jugué contigo Jaime, siempre te dije que eras mi amigo, yo no quise que esto pasara - le digo entre dolorosos jadeos, es la golpiza más fuerte que me han dado este año, lo peor es que mi más grande enamoramiento en mis cortos 17 años está viendo todo con una sonrisa socarrona en los labios, al final sus hermosos ojos verdes se transformaron en mi peor pesadilla.

-Me humillaste y yo ahora te humillé a ti - me dice antes de soltarme una última patada que me deja tendida en el suelo, sé que nadie me ayudará, porque nunca me han ayudado, así que solo me dejo estar doblada en la miseria de vida que tengo ahora, todo siendo masificado por un diagnóstico del que jamás me podré liberar.

-Lo siento linda, no es nada personal, pero ellos me pagaron bien por esta jugarreta, creo que te metiste con quien no debías - dice palmeándome la mejilla, siempre soñé con que ese contacto físico sería diferente, que quizás podría ser con algo de cariño, pero me equivoque, simplemente fui un juego más, como todas las cosas en mi vida, los veo irse satisfechos, mientras que yo me levanto a duras penas para salir del establecimiento, ni siquiera me tome la molestia de recoger mis cosas porque ya estaba cansa, cansada de tantos abusos y de tantos malos tratos, estaba cansada de las malas jugadas que me hacia la vida y estaba cansada de no poder desprenderme de esa angustia.

¿Qué es lo que se puede lamentar una chica de 17 años se preguntaran muchos? Pues en mi caso hay bastante que lamentar, sin duda rememorar estos años fue la peor decisión que pude tomar en ese momento, todo partió a los 11 años, las burlas en el colegio por ser bajita me afectaban de sobre manera , habían veces que ni mis padres ni mis hermanos entendían los prolongados ataques de llanto que sufría después de una jornada en el colegio, todos se pusieron en alerta un día en el que entre en una especie de trance, apretando con fuerza un chuchillo en mi mano sin darme cuenta hasta que este me hizo daño, ese día acudieron desesperados a hablar con una psicóloga, después de examinarme, hacerme unos test y hablar largo y tendido conmigo sobre sentimientos dijo algo que no entendí "Su hija es depresiva endógena", tiempo después supe que tenía factores genéticos que me predisponían a la depresión y eso era algo con lo que tenía que aprender a vivir, intentando mantener un entorno seguro y que me tendrían que controlar con medicamentos, los cuales lo único que hicieron fue adormecerme y callar mis emociones.

Al poco tiempo de ese diagnóstico mi abuela falleció, un ser tan importante para mí se fue dejándome un gran vacío, el único que estuvo para mí fue Jaime, él era mi único amigo dentro y fuera del colegio, yo era demasiado tímida y el me conocía desde antes, entonces con el correr de tiempo nos hicimos inseparables, pero eso no detenía las constantes burlas en el colegio por ser chiquita y tímida, eso era el pan de cada día, cuando mi papa pedio su trabajo y mis hermanos tuvieron que salir de la casa para poder trabajar todo empeoro, eran constantes peleas porque él llegaba borracho, muchas veces se puso violento con mama, incluso una vez intento golpearme a mí, mi madre por hacer las cosas más llevaderas me incluyo a las clases de teatro musical, pero no participaba mucho y me quedaba alejada del resto, cuando me di cuenta que me gustaban las chicas empeore todo con mi familia, en especial con mi papa, lo último que le escuche decirle a mi mama fue "Esa tortillera de mierda no es mi hija", salió borracho con la intención de comprar más licor y jamás volvió, al tiempo después encontramos una carta, mi padre estaba planeando suicidarse, solo que el destino dijo otra cosa, con mi madre decidimos mantener en silencio todo hasta que las cosas se calmaran, eso fue hace no más de un año y medio, hasta que llegamos al ahora, donde el único amigo que alguna vez tuve me odia por ser lesbiana, desde entonces me propina golpizas brutales de las cuales jamás he hablado para no darle más preocupaciones a mi mama, pero lo más bajo que pudo hacer fue usar a la persona de la que yo estaba enamorada, Lauren, una chica alta de lindos ojos verdes, ella se robó mi corazón desde el primer momento y resulta que hace unos 4 meses se acercó a mi diciendo que le gustaba, salió conmigo y me seguí enamorando como una idiota, pero resulto ser toda una patraña de Jaime en la que ella formo parte, coronándola con una brutal golpiza de mi ex mejor amigo, dejándome sola nuevamente en un mar de desespero.