Erik entrecerró sus ojos, Mara estaba ahí con el cabello revuelto y la respiración agitada.
–¿Qué pasa?
Mara se mordió el pulgar nerviosa, no sabía ni cómo enfrentarlo.
– Sé que sabes lo que pasó ayer
–¿Y?
Erik no sabía a qué venía esa supuesta confesión. Mara se acercó con una sonrisa y lo miró con cierta complicidad.
– Escapemos.
A Erik soltó una risa, Mara estaba ahí toda agitada, ella se preocupaba por aclarar las cosas y ahora le estaba diciendo que se escaparan. Tal vez y sabía sobre la atracción de Erik con ella, se sintió un poco tonto al respecto ¿era tan obvio?
– Vamos Erik, escapemos solo esta noche, deja esa mierda.
– Estoy ocupado Mara, otro día será.
Erik volvió la mirada a la computadora y siguió tecleando. Mara lo tomó del rostro haciendo que sus ojos avellana la miraran.
– Aprovechemos esta noche Erik, por favor – Hizo un puchero que lo hizo reír – Solo será esta noche.
– De acuerdo. – Contestó rendido – ¿A dónde iremos?
– Eso es una sorpresa, puedes irte así, solo busca una chaqueta.
– James saldré un rato. – Erik se asomó a la habitacion de su amigo mientras se ponía la chaqueta.
James asintió sin prestarle mucha atención, Erik negó divertido.
– ¿Estás listo para pasar una de tus noches más locas con Mara Mosen?
– La verdad es que no sé por eso me asusta un poco – Mara sonrió felizmente, lo tomó de la mano, algo que a los dos les sorprendió.
Mentiría si dijera que ninguno de los dos sintió nada, un pequeño cosquilleo en sus dedos.
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Mara #1
PoetryEra bella, elástica, con una piel tierna del color del pan y los ojos de almendras verdes, y tenía el cabello liso y negro y largo hasta la espalda y un aura de antigüedad que lo mismo podía ser de Indonesia que de los Andes. - Gabriel García Márquez