I Promise (Zoro x Sanji)

Capitulo 39: Lo más importante

"La distancia es al amor lo que el viento al fuego:

apaga al pequeño, pero aviva el grande

Chufo Lloréns

24 de diciembre (Domingo)

—¡Chicos, por aquí! —llamó Usopp en la distancia a Sanji, Luffy y Zoro, que miraban de un lado a otro en el centro comercial tratando de ubicarlos.

—¡Hola chicos! ¿Están listos para la fiesta? —preguntó Luffy emocionado, enseñando la bolsa de regalo que traía consigo.

—No del todo. Ace y su amigo aun no llegan —comentó Nami, mirando su reloj—. Si no se da prisa perderemos la reserva.

—Ah, Ace me dijo que se había ocupado y llegaría después —explicó Sanji, caminando hacia la chica—. Podemos adelantarnos, Nami-san.

—Ok. El karaoke esta por aquí, vamos.

El numeroso grupo se movía entre la multitud de personas que iban y venían recorriendo el lugar o que entraban y salían de las tiendas de ropa y juguetes. Siendo víspera de navidad, el lugar estaba abarrotado, y lleno de un aire alegre y festivo que emocionaba a todos. En especial a los niños.

Llegaron al local y entraron a la sala que habían reservado. Chillaron emocionados cuando una amplia y colorida sala, llena de adornos navideños y luces los saludó. Diversas fuentes con deliciosa comida, se repartía a lo largo de la amplia mesa, haciéndoles inhalar el delicioso aroma y abriendo su apetito. Las imágenes y letras en el televisor pantalla plana del fondo, les dio la bienvenida. Nami había acertado con el lugar.

Con un brindis y micrófono en mano, iniciaron la celebración. Entre charlas, ensordecedores y dulces cantos, comida y risas transcurrieron las horas hasta que un par de golpes en la puerta interrumpieron, revelando a un sonriente Ace.

—¡Ace, por fin! —saludó Luffy feliz, corriendo hasta su hermano—. Pensamos que ya no vendrías.

—Lo siento, es que me entretuve con algo. Espero que hayas dejado algo de comida, ¡estoy hambriento!

—Eso es imposible con Luffy aquí —Se burló Sanji, levantando el teléfono del local—. Pediré más, espera un momento.

—Claro, gracias. Por cierto, no vine solo —comentó con una enorme sonrisa, haciéndose a un lado para que el chico tras él pasara. Los ojos de todos se posaron en el alto rubio de mirada cansada, que los observaba con una leve sonrisa.

«Una piña» Pensaron todos, antes de devolverle la sonrisa.

—Oh, así que trajiste al amigo que mencionaste —habló Franky, mirando al nuevo visitante.

—Sí, su nombre es...

—¡Marco! —chilló Luffy, saltando a saludar al joven, que solo revolvió su cabello divertido.

—Tiempo sin verte, Luffy. ¿Sigues causando problemas-yoi?

—Solo los necesarios —contestó divertido, causándole gracia.

—Mucho gusto, soy Marco Newgate —saludó con una leve reverencia que los Mugiwaras imitaron de inmediato—. Gracias por la invitación-yoi.

—En absoluto. Qué bueno que pudieras acompañarnos —habló Nami, quien se encargó a presentar a los demás. Luego de esto, Ace lo jaló del brazo para sentarlo en uno de los sofás junto a Sanji y Usopp. El pecoso parecía más que feliz de tener al rubio ahí; al menos eso les pareció a todos.