El único paraíso que busco lo escondes tú, juegas con el a escondidas, lo amas, te sonrojas al encontrarlo pero esperas que lo busquen otros. El único paraíso que busco te pertenece, forma parte de ti, envejece contigo y madura; vive y da la vida, es el único paraíso que por placer concede el aire, el que hace arder el agua y la transforma, el que por amar y ser amado alegra a la tierra. El único paraíso que busco está en ti, evitas mostrarlo, lo disfrutas, buscas desesperadamente quien abra sus puertas. El único paraíso que busco se esconde entre tus piernas.
