Capítulo 30.

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Mi corazón palpitaba fuertemente. El temor se apoderó de mí, al escuchar sus palabras.

-Di...Dime, ¿Sucede algo?.-le pregunté hecha un mar de nervios.

-Si, sucede algo. Algo delicado que tenemos que platicar.

Oh Dios, mis nervios están a flor de punta.

-Esta bien, dime de qué se trata.-le contesté con mi pecho subiendo de arriba a abajo.

-Bien, tendremos una vídeo llamada dentro de... Más o menos una hora. ¿Estamos?.-Me dijo algo dudoso con la hora.

-Si, si.-Ladeo mi cabeza, algo estúpido ya que él no me mira.-Me parece perfecto.

-Esta bien, cuídate.

Y colgó.

¿Y si ya sabe?

No quería que fuera asi, no quería que se entera de otra lengua, quería que fuera de la mía.

Ay Dios mío y todos los santos. En qué jodidos me he metido.

-¡Ronnie!

Alguien grito a mis espaldas.

-Justin dice que podem... ¿Ronnie, Bae. Estás bien?

Pregunto Michael mirando mi cara.

-Si, si. Solo me quede algo despistada. ¿Qué pasó con Justin?

-Pues, dice que podemos irnos, que nuestro trabajo terminó, el hará el resto. Alex y Jou nos invitaron a comer.

-No puedo ir, no hoy. Dentro de una hora tengo una llamada importante.-Le explique.-Lo siento mucho, espero y me entiendan.

Michael me miró, y sabiendo que él no se tragó lo que le dije, asintió con su cabeza.

-Esta bien, pues ni modo. ¿Segura que estás bien, Verónica ?

-¡Joder, He dicho que Si, Michael.!

Michael abrió sus ojos como plato, y se que hice un grave error en hablarle en ese tono.

-Maldición.-Maldije para mi mismo.-Lo siento, ¿Si?. Sólo que los nervios me atacan y no se como controlarlos. Lo siento Michael, pero de verdad me tengo que ir.

Me fui sin ningún más preámbulo. Y si, si pareció de lo más mierda con Michael. Pero tengo miedo a lo que Zabdiel me vaya a decir.

;*

Conducir  treinta minutos, pareció hacerlo algunas veinte horas. Llegue al hotel, y salí disparada a mi pieza.

Al llegar quite mi ropa, todo y me puse un buso y una blusa de tirantes. Limpie mi cara con mis palmas bañadas en agua, me mire al espejo y tenía un pequeño rasguño en el cuello. El tono de vídeo llamada de Whatsapp de mi celular me saco de mi trance.

Es Zabdiel y los nervios me pegaron más.

-Hola, mamita.-Hablo a través de la pantalla. Una sonrisa se formó en su rostro.

Yo sonreí al verlo.-Hey Zabdaddy.-Le sonreí igual.

El apretó sus labios y conozco bien éso. Ese gesto lo hace cuando está incómodo o hay algo que le molesta.

-Ronnie, te voy a decir y explicar unas cosas. Te seré directo.

Me ha lo seriamente. Mi corazón palpitaba full.

|Fast & Furious| •Zabdiel de Jesús•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora