(Asakar)(AU) Omegaverse.

10.4

Llegue al edificio secundario, no creí que me hiciera caso, bueno... ¿Que se le va a hacer? Karma aveces sigue demasiado las instrucciones.

—

-¿Puedo ir a matarla?

-No veo la hora de que lo hagas.

-Tal vez empiece a destruir su mente.

-Me gustaría ver eso.

-Por favor evita mi expulsión.

-Con gusto.- Digo, antes de sentir como besa mis labios, correspondiendo, Karma me comprendía mejor que nadie.

—

Claro, después de todo, se trataba de Karma.

Abrí la puerta.

-Akabane Karma, el director quiere verte.- Dije, observando como se para, pasando a mi lado sonriéndome lo cual correspondo. Siguiéndole, cuando salimos del edificio y se que nadie nos escucha o puede vernos, aprovechó, besando sus labios.- Seras un delincuente y todo eso, pero te amo tal y como eres.- Le digo, notando como sonríe.

-Te lo dije antes, ¿no? Odio ver tu rostro de esa forma.

-Estuviste a punto de suicidarte por eso.

-¿Ah, si? Ni me acuerdo.

-Tu madre se puso muy histérica y lograste que sonriera.

-Entonces no fue mi imaginación que lo logre.

-Va a ser duro no tenerte aquí.

-Bueno, es seguro que mis padres comenzaran a venir y me interrogarán. Aun así, perdón por tus fotos.

-No fue tu culpa.- Digo, observándole antes de abrazarlo.

-Veré si encuentro una forma de recuperarlas.

-No lo creo, no podría pedirte aquello.

-¿Porque?- Me pregunta, a lo que le sonrió, besando su frente.

-Solo deja de mencionarlo, ¿si?- Le digo, notando como asiente.

Tomo su mano, antes de comenzar a bajar ambos, la segunda jugada me toca a mi.

Claro que es seguro que veré a Karma en su casa. Ambos escuchábamos lo que decía el director. Aburriendo nos que hasta nos mirábamos de reojo, ¿como si no fuera la primera vez? Por favor.

-¿Estas escuchando, Akabane?

-No, estaba pensando en lo bien que se ve su hijo.

Y creo que solo quiere verme sonreír como para decir aquello. Reprimo la sonrisa a pesar de que ve al director con la lengua fuera.

-No estoy para bromas.

-¿Cual?

-Akabane.

-Yo no dije ninguna broma.

-Akabane.

-¿Tu escuchaste algo Gakushuu?- Le miro, sonriendo mentalmente.

-No, ninguna broma.

-Asano-kun.

-¿Ya puedo ir a mi casa?

-No tienes remedio, ve. Asano-kun.

-¿Y su hijo me puede acompañar para que no haga nada malo?

-Denegado.

-Llorón.- Escuchó que dice, observándole antes de que le vea pararse.