(Asakar)(AU) Omegaverse.

14.2

-Bien, ¿ahora por donde vamos?

-¿Que tal si vamos por un café?

-Me parece bien.- Si, mientras no me vean tomar mis supresores estoy tranquilo.

-Vayamos a una florería. Mi madre me pidió ideas para el white day, y como ya se acerca. ¿Vamos?

-Me parece bien, luego iremos a desayunar.

-Ok, entonces sigamos a Rio.

Emmmm, creo que Gakushuu me mencionó algo que iba a hacer el white day. Bueno, lo dejare para después, solo tenemos que entrar a una florería muy cercana a la estación, que por favor no sea la misma. Gakushuu no para de sacarme fotos.

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Pero..... Solo diré. ¡¿Porque mierdas tenia que ser esa florería la que ya se esta preparando para el white day?!

-¡Bienvenidos!.- Escuchamos que dijeron a la vez entrábamos.- Oh, ustedes de nuevo.

-....- No, todo menos esta señorita, aunque las demás y los demás también nos conocen.

-¿Van a arreglar una cena romántica?

-¿Que? Oh no, venimos a ver los adornos para el white day.

-Esta bien, vengan, les enseñaré los adornos.- Nos dice, mandando nos un guiño a nosotros. Y enseguida sentí la mano de Gakushuu sujetar la mía, volteando a otro lado diferente para que nuestros compañeros no vean mi sonrojo.

Tiene que ser tan posesivo.

Nos quedamos atrás para poder, al menos, darnos algunos besos y seguir agarrados de la mano. Aunque debo admitir que conseguimos nuestro grupo de fans, al parecer no es normal que un omega avergüence a su alfa con tanta facilidad, y luego se estén besando como si nada.

Pero vamos, le eh estado avergonzando desde que tengo memoria, y la verdad, me encanta verlo con un ligero rubor, tanto que le tome una foto y por suerte, no la ha borrado.

-¿Ustedes no se animan?- Nos preguntan a lo que nos giramos.- ¿No llevaran unas flores como las otras veces?

-Lo haríamos con gusto. Pero-

-¿Van a contarles sobre su relación?- Esta vez nos pregunta bajo a lo que nos miramos antes de asentir. Creó que seria lo mejor sabiendo que estamos actuando a escondidas.- Ya veo, mucha suerte.- Nos dice antes de irse, y solo asentimos en respuesta. Después de esto comenzaremos a eliminarlos, ya estoy cansado de que nos estén estorbando.

-Gracias, volveremos después por las flores.- Escuchamos que dice Rio, antes de que se volteen y salgamos de la florería.

-¿Vamos a buscar un lugar donde pasar la noche?

-Si, me estoy cansando de llevar mis cosas.

-Conozco un buen lugar.- Dije, lo bueno es que la recepcionista nos conoce y nos pondrá en habitaciones juntas.

-Entonces vamos.- Escucho que dice Sugino, aunque muy poco me importa si les gusta o no a los compañeros de Gakushuu.

Sobre todo ese Sakakibara, no ha dejado de mirarme, pero si piensa que con una cara molesta logrará intimidarme, esta muy equivocado. Por favor, le eh golpeado mas de cuatro veces, y en todas eh salido vencedor. Y eso que los omegas tienen la desdicha de no tener tanto musculo.

-Nosotros no-

-Iremos con ellos, Teppie.- Y Gakushuu es muy sobre posesivo sobre dejarme solo cuando hoy seria nuestro día de salir y estar aquí sin aparentar nada.

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-Bienvenidos, ¿cuartos individuales o compartidos?

-Individuales.

-¿Pagaran con tarjeta de crédito o efectivo?

-Efectivo.- Que suerte tenemos de estar al ultimo.

-Muy bien, aquí están sus llaves.- Les dice, a lo que ellos se dirigen al ascensor mientras nos atiende.- Ah, ustedes de nuevo. ¿Lo mismo de siempre?

-Si.- Respondimos ambos, sonriéndonos mientras anotamos nuestros datos.

-¿Que le paso a tu aroma?

-¿Eh?.

-No hueles a rosas y miel.- Menciona, ante de que le observe agudizar su sentido del olfato, sintiendo enseguida el aroma de Gakushuu rodearme.- Jajajaja, perdona por provocar a tu novio. ¿Volverán para el white day?

-No lo se.

-Si, prefiero que nos aparte la habitación mas lejana a las otras.

-Entiendo, lo anotare enseguida.- Ambos nos alejamos observando el ascensor, donde estaban nuestros compañeros, irse. Entrando en el de a lado vacío.

-¿Habitación mas lejana?

-Ya te dije que no me gusta compartir.- Me responde, antes de que nos veamos y nos acerquemos, sintiendo su lengua abrirse camino en mi boca apenas me besa, al igual que sus piernas al ponerse entre las mías, jadeando al sentir como baja a mi cuello.- Y menos que busquen tu aroma.

-Callate, tu aroma siempre esta al alcance de todos.

-Pero sabes que te pertenece. Y ahora mismo estas pidiendo con la mirada que te toque mas.

-Aun me pregunto porque no lo has hecho.- Le digo, observándole antes de que comience de nuevo a besarme. Dejándole explorar mi boca y que toque mis puntos sensibles. Sintiendo como los muerde, dejando salir mi aroma al sentir su cuerpo muy junto al mío, acariciando su cabello mientras el lame y muerde mis pezones, gimiendo de vez en cuando. Separándonos al escuchar las puertas abrirse, observando a otras personas subir mientras nosotros bajamos del ascensor. Sonriéndonos y aguantando cualquier risa por la "travesía" que hicimos.

Y bueno, creo que no tengo que contar que sucedió al llegar al cuarto, solo diré que sirve de mucho la recomendación de Michaellis.

Tanto que comenzare a usarla de ahora en adelante.

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-¡Hasta que al fin aparecen! ¿Donde estaban?.- Nos preguntan apenas nos ven.

Y si, podría decir que estuve teniendo una sobre carga de Gakushuu para aguantar que ustedes casi no nos dejan, ni tocarnos.

-Sucedió que nos toco la habitación más lejana de ese piso. Y acomodamos nuestras cosas.

-¿Pues que tanto traen como para tardarse dos horas?- De cosas, pues no mucho pero de otra cosa si traemos muchas ganas. Y en realidad no las sentiríamos tanto si no estuvieran aquí.

Se dice que la desesperación se quita con una ronda de sexo, pero maldición, nunca me puedo resistir a sus toques. Sabe donde dar, donde tocar, donde morder, lamer y besar, no puedo resistirme, se ha convertido en lo que más deseo, y terriblemente lo hace mas que bien.

-Bueno, busquemos un lugar donde comer. Tengo hambre.- Te juro que no mas que nosotros al hacer descarga de proteínas.

-¿Podemos ir al restaurante que pasamos hace rato? Esta cerca.

-Nagisa, que gran idea. Vamos todos.- Bueno, al menos al restaurante completo no tendremos que darle explicaciones y excusas tontas.- Vamos allá.- Le escuchamos decir ante de emprender camino junto con los demás, y antes de que pudieran los demás hablar con Gakushuu, enseguida me tomo de la mano y me saco del edificio.

Claro que no tarde en darme cuenta y salir corriendo, aun si intentaron separarnos, no evitaran que nos escapemos de sus vistas. Además que ni siquiera saben a donde fuimos ni cual es nuestra habitación como para amenazarnos en regresar.

Y la verdad, me estoy hartando de fingir.