¿Soy mala ahora?

Capítulo 55 "Raite"

—Bombón, no me asustes. No tenemos otro ataúd.

Abrí poco a poco los ojos de nuevo.
Kas estaba frente a mí poniendo un algodón con alcohol en mi nariz mientras los demás nos observan atentos.

Me había desmayado y me pusieron en una silla. ¿Por qué me había desmayado?.

Levanté la vista buscándolo, hubo algo al entrar que me hizo perder la conciencia...el ataúd, Fred..., los chicos.

—Kas— pronuncié su nombre buscándolo. Lo necesito, necesito tenerlo cerca.

—Ey— susurró con una mano en mi cabello y entonces recordé que estaba arrodillado frente a mi. —Tranquila, estoy aquí.

Parpadee un par de veces más. De verdad estaba frente a mí, lo necesitaba y lo tenía frente a mí.
Me abrace a su cuello fuertemente y comencé a llorar desconsolada y sin temer que me escuchara alguien. Desde su lugar todos se quedaron perplejos, muchos lloraron conmigo pero yo me refugié en ese abrazo.

—No puede ser que se haya ido— dije entre lágrimas. —Apenas hace un día él estaba corriendo en su moto y ahora se ha ido.

Kas me pasaba la mano por la columna suavemente mientras me hacía sonidos al oído de arrullo para calmarme, pero por la inconsistencia de estos me di cuenta de que estaba llorando también.

—Lo sé, Hope. Todos lo extrañamos— me dijo. —Tranquila, preciosa, estoy aquí contigo...no me voy a mover.

Me estaba dando apoyo, lo que necesitaba que hiciera desde un principio.
Me abrace más fuertemente a su cuello y escondí mi rostro, muchos de los chicos habían comenzado a llorar por mi culpa y no quería que siguieran viéndome mal.

—Lo siento, no puedo evitarlo, chicos— dije entre mi llanto.

—No te preocupes— susurró Tanner. —Vamos todos, un abrazo grupal. Animemos un poco el ambiente, ¿quieren?.

Nos obligó a Kas y a mi a ponernos de pie y tiro del brazo de varios más para atraerlos hasta que por sus propios méritos todos se comenzaron a acercar.
Hombro con hombro, los River's se abrazaron poniéndome a mí como uno de los eslabones de esa fuerte y unida cadena que representaba el club. Una familia de hombres que no tenían ningún lazo de sangre pero que se llamaban entre ellos como si las moléculas de su cuerpo quisieran estar juntas para completar un todo.

Después de un rato en ese círculo con ellos, tomé el valor para hablar y lo que dije fue algo que Fred hizo que se grabará en mi memoria.

—Ponemos nuestras vidas sobre dos ruedas y nunca podemos saber que es lo que nos va a pasar esta noche, mañana ni nunca, pero no por eso dejaremos de hacer lo que nos llena— todos me miraron y sonrieron. —Les deseo a todos que el tiempo que tengamos en este mundo lo pasemos plenamente y sobre todo...que estemos juntos.

Asintieron y varios de ellos se soltaron para tomarme del hombro y sacudirme en un gesto de aprobación y apoyo.

—Muchachos— dijo Hurley. —Tenemos que ver un asunto importante...

—Nada de la administración ahora, ¿si?. No es momento— Kas negó.

—Lo es, estamos todos juntos. Además es importante que ella lo sepa para que decida qué quiere hacer— todos lo miramos y Kas entendió menos que antes.

—¿De qué hablas?— pregunté.

Se quedó un momento pensando nervioso mientras jugaba con sus dedos. Después de un momento fue a recoger algo de una de las sillas de madera del fondo. Era un papel de color negro con letras doradas y el logo de los River's arriba. Me lo entregó y lo leí.
Era un reconocimiento como los que tenían algunos de los chicos en sus casas y les daban a los miembros importantes de los clubes.

—Rivers Biker's club entrega el presente reconocimiento a Esperanza Julian, por su excelente participación y entrega a el estilo de vida que compartimos, así como la solidaridad con la que llegó a nuestro club y el apoyo incondicional que muestra con sus integrantes. Seguimos aplaudiendo su conducta y la invitamos a seguir iluminando nuestras vidas como lo ha hecho desde que entró a nuestras instalaciones— leí sonriendo. —Firma Alfredo River como visepresidente y...¿no era él el presidente?.

Miré a Hurley, ¿de qué se trataba todo esto?.

—Él quería dejar que alguien más coordinará lo referente al club. Estábamos por comenzar de nuevo a ir al orfanato del que somos padrinos y quería alguien que pudiera ayudar a seguir poniendo al club como un grupo de Biker's que hacía voluntariados— sonrió. —Habló conmigo y me dijo que te daría la presidencia pero no sabía cómo ibas a tomartelo ni si Kas se pondría como loco. Aún así lo hizo. Cuando me lo informó una noche en casa ya tenía todos los papeles listos y firmados.

—No entiendo nada— dije.

Kas suspiró.

—Te regaló el River's Bar...ahora el club es tuyo también.

Me cubrí la boca sorprendida.
Tanner y los demás se rieron de mi reacción, seguramente ellos estaban enterados de que algo como esto rondaba la cabeza de Fred.

—Nos dijo que había mandado a hacer una chaqueta del club para ti y que te nombraría una River oficial hace unos días— dijo Tanner riendo. —No pensamos que te fuera a nombrar presidenta.

Mi cabeza volvía a dar vueltas.

—Tienes que pensar en muchas cosas— Bob ayudó a mi pánico. —La administración de un club no es fácil y menos en uno con nosotros...

Di un paso atrás y me caí sentada en la silla en la que estaba cuando me desmayé.

—Tranquilos, no puede con tanto— Kas los hizo retroceder. —Hope, puedes decidir no tomar el mando. No es tu obligación...

—Fred quiso que así fuera— susurré. —Preparo con tiempo todo esto. No es algo que simplemente se le ocurrió decirme en su lecho de muerte.

—Pues en eso tienes razón— se cruzó de brazos. —No puedo creer que no me lo dijera antes...

Me levanté de un salto y caminé afuera.

—Necesito pensar en todo esto.

—Pero necesitamos que estés aquí...

—Volvere. Luego.

En realidad no estaba segura de eso, pero de otra forma no iban a dejar que me fuera. Varios de ellos trataron de ir detras e mi, pero Kas les negó el paso.
Le agradecí mentalmente por eso, cualquier pregunta que fuera a ser formulada en estos momentos por un River yo no podría responderla.

Cuando bajaba por las escaleras hacia el primer piso escuché el motor de una moto seguido por el de muchas más. Me quedé un momento en mi lugar para tratar de darle un significado, aún era demasiado temprano para que todos se fueran.
Cuando llegue a la entrada de la funeraria me di cuenta de lo que estaban haciendo todos.

Los clubes estaban agrupados, todos en fila frente a la funeraria como si formaran con las motos una cerca, todos tenían el motor encendido y la brisa del día hacía de las cintas negras atadas a los tanques y sus manillares se movieran.

Era hermoso de ver, mucho más porque sabía que lo que estaban haciendo era por Fred.

—Hacen un raite— me dijo Kas al oído. —Todos van en caravana simplemente conduciendo a un lugar específico y luego vuelven. Es para estar juntos solamente.

Un raite en honor a Fred.
Sonreí. Todo esto es por ti, amigo. Ve lo importante que eres para todas estas personas, seguro que ni siquiera tú lo hubieras pensado.

Las motos arrancaron y acallaron el sonido de mi corazón que latía fuertemente. Si hubiera sabido lo que el sonido de los motores me hacía sentir antes, ya tendría años con una familia como los River's.