Capitulo 20 "Ganador"

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Estaba sonriendo sarcástico y coqueto como siempre, eso me hacía pensar en que ya no estaba molesto conmigo, pero tenía el temor de que cualquier cosa que dijera lo hiciera explotar de nuevo.

-Nos evitaste- dijo usando un par de letras para escribir "gota".

Era una palabra mediocre para este punto de la partida, pero no me importó. Estaba comenzando a sentir punzadas en el pecho por sus palabras de nuevo.

-Yo no...- levantó una ceja, - de acuerdo, lo hice. Pero es que no podía estar cerca de ustedes.

Use mis letras para poner: Sol.

Los universitarios estaban sorprendidos por mi palabra tan corta. Esperaban mas tensión en este punto del juego.

-Los chicos...

-No quiero hablar de eso. Por favor, Kas.

-Ellos me enviaron a hablar contigo.

Levante la vista y me encontré con su mirada clavada en mi. Inmediatamente traté de ver a otro punto.

-Si no me quieres en el club, ¿por qué vienes a decirme esto?.

-No te quiero en el club, pero les agradas y no querían que te fueras así. Aterrada...

-Te dije muchas veces que no me asustas.

-Entonces explícame porque no me miras a los ojos.

Tenía razón. No había otra explicasion, pero no le temía porque pensara que me haría daño. Le temía porque con él nada era seguro, e incluso era difícil de comprender.
Simplemente le temía a su personalidad y caracter impredecible.

-Hope, una tarjeta de regalo te espera...- dijo el chico con el puntaje.

-A ti te espera otra cosa si no guardas silencio, chico hipster- lo interrumpió Kas. Puso otra palabra corta en su tablero y después siguió mirándome.

-Las peleas no me gustan, eso es todo- dije. -Verlos golpeándose en el suelo y a los River's tratando de separarlos fue devastador para mi. No quería causar todo eso.

Guardó silencio durante un rato mas y escribimos más palabras cortas sin hacer esfuerzo mínimo por discurrir.

-Así son las cosas siempre con nosotros, bombón. Si no era por ti iba a ser por cualquier otra situación que se presentara. Hurley y yo...

-Difieren en muchas cosas. Deben pelear seguido.

-Si...somos muy diferentes.

Miré mis letras y me di cuenta de que había malgastado todas en alargar la charla con Kas.
Ya no tenía absolutamente nada.

-¿Será posible...?- escuché a muchos decir.

-Voy más alta en el puntaje. No puede ganarme- trate de sonar segura.

Kas miró sus letras y sonrió malicioso.
Acomodó las letras rápidamente en el tablero usando las casillas que multiplicaban sus puntos. T, V, N, A, E, N, R, E y E eran sus letras.

No.
Puede.
Ser.

-Usando todas sus letras y subiendo considerablemente en la tabla de posiciones, el chico desconocido gana con la palabra: Enervante.

Di un golpe en la mesa y me cubrí la cara mientras Kas soltaba una carcajada.

-¿Quién diría que tus insultos me servirían para algo, bombón?.

Me sorprendió el hecho de que aún recordara que lo había llamado así, pero me sorprendía más aún que tuviera la suerte de tener todas las letras.

-¡Eres un oportunista!- le dije. -¡Me mantuviste desconcentrada y luego usaste mis palabras contra mi, tramposo mangante!.

Mi tarjeta de quinientos dolares fue entregada a Kas.

No sabía bien si me estaba riendo por la furia contenida o por que de verdad me causaba risa.

¡Me había derrotado!.

-Quiero que quede constancia de que no me hubieras ganado de no ser porque esa chica jugó la mitad de la partida contra mí- le dije cuando caminamos tranquilos lejos de las mesas de Scrabble.

-Si eso te hace estar más tranquila- sonrió.

Entonces recorde la razón por la que había venido y las imágenes violentas regresaron a mi cabeza. También volvieron sus palabras duras y francas.

-Mierda, ¿de nuevo?- soltó. -¿Tengo que volver a vencerte en el juego para que te quedes tranquila?.

Estaba dolida aún, pero era imposible no reirme cada vez que abría la boca para hablar.

-No entiendo qué quieres que haga, es todo- levanté la cabeza. -Vienes a buscarme, pero si no quieres que regrese al club, cosa que ya quedó muy clara, no se que quieres.

Tomó aire.

-No me hagas preguntas dificiles- se pasó una mano por el cabello pareciendo realmente atractivo. -Solo sentía que estaba mal que te fueras así y tenía que buscarte. Los chicos pensaron lo mismo, y Hurley...

-No puede ser, tienes razón- me cubrí la cara con ambas manos. -Hurley. Le dije que no me iba a alejar y después lo evité.

-Si, parece una niña pequeña lamentandose por eso pero aunque a veces me duele un poco verlo así, no te mentiré, me importa un carajo. No es por eso por lo que te vine a buscar.

-¿Entonces?.

-Ya te lo dije. No tengo la menor idea...- en ese momento sonó su celular. Lo sacó del bolsillo.

El nombre de "Sophie" apareció en la pantalla junto con una foto de la rubia alcohólica.

-Es tu barbie- dije.

-¿Sophie?...Estoy fuera, ¿Por qué?...Oh, ¿De verdad?- sonrió pícaro.

-Creo que voy a expeler mi desayuno- fingí tener arcadas.

Me miró divertido.

-Te veo esta noche entonces.

Era un total asco tratar de imaginar lo que la rubia le estaba proponiendo a Kas.

Colgó la llamada y guardó el celular en su bolsillo.

-¿Por qué te dan arcadas con mis llamadas?- preguntó riendo.

-La decencia y el decoro de tu novia es cusestionable- dije. -Estoy casi segura de que tiene que ver con copular...

-¡Eso no es verdad...!- me cruce de brazos. -Bueno, no lo dijo exactamente. Lo que pase después no es culpa mía.

-Qué desagradable eres.

-Si lo fuera no me hubiera llamado, ¿no lo crees?- se rio.

No pude argumentar nada contra su lógica.

Caminamos un tramo más y después volvió a hablar.

-En realidad me dijo que avisara a los River's. Hay arrancones esta noche.

Llamenme loca, pero despues hoy cuando llegue y mi nombre estaba escrito en la pizarra de participantes, me molestó el hecho de que todo lo que hacía era predecible y que mis desiciones no tenían ni una chispa de la curiosidad y atrevimiento que la profesora había visto en mi y que causó todo este embrollo.

Me acomodé bien la falda y enderece mi postura para parecer más segura aún mas de lo que ya estaba.
Lo miré de nuevo a los ojos y lo dije:

-¿A qué hora? Yo voy.

¿Soy mala ahora?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora