CAPÍTULO 2

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— CAPÍTULO 2: REDES SOCIALES. —

Katie se había levantado ese día con un extraño presentimiento. Apenas llegó a casa la noche anterior, se dispuso a estudiar un poco el libreto, pues con eso de la salida por la llegada de la moscovita le pareció una distracción que le robó bastante tiempo. No negaba pasar un buen rato con ellas, después de que Odette dijo adiós a la serie, no sabía muy bien con quien salir, había muchos descartados y muy pocos que apenas lograban no salir del país para ver a sus familias en vacaciones o, en una semana de descanso.

Muy pocas veces lograba levantarse con un presentimiento de que algo va a suceder ese día, no tenía ni idea de qué, pero sucedería.

Tomó el desayuno junto a su perro intentando leer un poco más del libreto teniendo el cuidado de no mancharlo con café como otras veces. Aun seguía asimilando que Melissa y ella se besarían tantas veces en escenas que no podía siquiera creerlo. No se quejaba en absoluto de como besa, los besos de la noche anterior fueron muy explícitos, al menos para ella. Le pareció muy sexi que quisiera enamorarla, si no fuera por lo despistada que suele ser se daría cuenta que ya está enamorada de ella.

Un mensaje logró sacarla de los pensamientos. Su teléfono dejó de vibrar al momento de poner los ojos en él. En la pantalla se mostraba el nombre de Oddie, Odette le mensajeaba tan temprano, no era coincidencia.

La veo en el set, señorita McGrath.

Casi se atraganta con el tocino al leer el mensaje, ¿acaso no renunció de la serie? ¿qué podría estar haciendo en el set? Vio la hora. Era un momento de apresurarse y llamar al chófer para que la llevara al set. Se llevó un gran trago de café a la boca, tomó su bolso y, al abrir la puerta se encontró justamente con su vecina para cuidar de Oisin.

Al llegar al campus se dispuso a caminar para el estudio de grabación a paso rápido. Era la ultima vez que se desvelaba leyendo, no más leyendo, pensando en Melissa y hacer el intento de no desconcentrarse del libreto. Cosa que sucedía a cada cinco minutos por el maldito guion explícito de besos, caricias, madres primerizas. Todo eso es sacado de un buen libro, y cuando se trataba de un buen libro su imaginación brotaba como las raíces de un árbol descontrolado. Y que cierta rubia apareciera en su mente no solo una, si no varias veces sin prenda, la dejaban entre aturdida y maravillada. Cosa que solo Oisin fue espectador involuntario.

Al entrar observó a Chyler con el atuendo de la DEO junto a David, la pelirroja se mantenía hablando con algunos compañeros del set. Volteó a verla cuando pasaba por ahí, la pelirroja le sonrió y levantó los dos pulgares demostrándole una aprobación. Katie se quedó confundida por tal "buenos días", solo pudo saludar con la mano devolviéndole una sonrisa para no parecer maleducada.

Como todos los días, en las series y películas que le tocaba trabajar, se dirigía a la sala de vestuario y maquillaje. Como Lena Luthor debía imponer la moda dentro de la serie, brillar en escena por ser una Luthor. Por supuesto, no faltaría una falda un dedo bajo las rodillas de un preciado color negro, una blusa de manga larga con dos botones rebeldes desabrochados sin llegar a mostrar mucho escote y unas botas largas que combinaba con la falda precisamente, su peinado un bollo elaborado con trenzas entrecruzadas y ajustadas.

— ¿Ha venido Melissa a maquillaje? – Preguntó a la estilista.

— No, aún no le toca entrar a escena. Contigo duramos un poco al elegir el tipo de vestuario, el cabello, el maquillaje... Creo que Mike le pidió que fuera a su oficina desde que llegó al estudio. –

Salió del área de maquillaje con preocupación, ¿Mike que necesitaba de Melissa? ¿Había algo mal que tenía que ver con la serie? No por nada llamaban a los actores a la oficina del director principal.

UNA NUEVA SERIE [MELTIE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora