CAPÍTULO 4

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— CAPÍTULO 4: CONFIANZA—

Esos dos días se ha sentido mal, por más que ha intentado animar a la moscovita ella solo asiente y dice que está bien. Quería que le tuviera confianza, que una persona pierda a la persona más querida de su vida no es fácil.

— Mi familia nunca me quiso. — Habló desde que llegaron a casa después de un día de trabajo. Katie había dejado a Oísin comiendo en la cocina para acercarse a la moscovita en el sofá. La televisión se encontraba en el canal de Nickelodeon. — Mis tíos me llamaron y dijeron: "Tu madre está muerta", ni un lo siento... Ni una emoción. Mamá era la única que me soportaba de algún modo. —  

La irlandesa le saltaba el corazón escucharla de ese modo. A pesar de que lo que contaba. Se sentó a su lado queriéndole hacer compañía, no era necesario que estuviera sola en algún momento. Tenía miedo que Alexandra pasara lo mismo que ella pasó, aunque por lo que hablaba, el desprecio de su familia era mucho. Pasó su brazo por encima de los hombros, abrazándola cariñosamente.

— Así son ellos. Siempre han sido así. Cuando Mike me encontró y me dio esta oportunidad, todos se volvieron felices al enterarse de que me iría. —

— Hey, escúchame... Yo estoy contigo ahora. — Expresó la irlandesa con una sonrisa, como si de algo mágico se tratara, Oísin ladró moviendo la cola de manera inquieta en el momento en que se acercaba al sofá con ambas chicas. — Oísin también está contigo ahora. —

Los últimos dos días había estado centrada en la moscovita, quería hacerla sentir mejor. El grupo entero se motivó por la muerte de la madre de Alexandra, llegaba al set seria, sin mostrar algún sentimiento en especial. 

Se hacia la fuerte.

Aquella mañana llegaron en el auto muy temprano, las grabaciones comenzaban desde las seis aún cuando el sol no salía. A esa hora el frío era insoportable. Observó mucha nieve en el lugar, además del hielo en la acera. 

Melissa había estado al pendiente de ambas por si se les ofrecía algo.

Le parecía muy tierno de su parte, una cosa más que adoraba de ella. Desde aquel beso en el armario de limpieza, no se habían besado otra vez. Estaba interesada en ella, sí, pero temía por mucho lo que la gente diría de algún modo. El rating subió durante la emisión del primer capítulo, desde hace años venían pidiendo que la química entre Kara y Lena se diera, una pareja que era respetada y, ante todo, bien vista por la mayoría. Katie lo sabía, tantos años viviendo encerrada en "solo es actuación, nada que ver nuestro beso lésbico" ya se acostumbró a ello.

Usaba a Alexandra para poder alejarse de ella, tal vez, se consiga a una mujer que no tema de sus propias decisiones de vida amorosa.

— Hola. — La voz de la rubia resonó en su cabeza. Parada frente a ella con una caja de bombones en manos. — Son para ti. — Le extendió la caja al mismo tiempo que se acercaba mucho, demasiado. Los tomó sonriéndole amablemente ante el gesto, como una compañera cualquiera. — Sé que con esto de que quieres hacerte cargo de Alexandra no nos da tiempo para nosotras, por eso quería proponerte una cosa. —

— ¿Qué cosa? —

— Pues que, después del trabajo, salgamos las tres a divertirnos. Creo que estar encerrada en casa todo el día no le hará bien, Katie, necesita salir a despejarse con personas que le darán esa confianza que necesita. — Explicaba jugando con las manos. — A parte de que es igual a ti aventurándose con libros que se le crucen en el camino, ¿qué más le gusta? Me refiero a actividades al aire libre. —

— ¿Comer hamburguesas de hielo al aire libre es una actividad? — Se mofó para ella misma. — Melissa, se está congelando Canadá por si no lo has notado. Las olas heladas pasaran estos días, ¿Ves los noticieros? No es recomendable salir en horas de temperaturas bajas. — Aclaró comenzando a caminar hacía el área de vestuario, la rubia le seguía el paso.

UNA NUEVA SERIE [MELTIE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora