━━ ⦗ philophobia! ⦘
❝ y el amor
tampoco fue
temido. ❞
███████████ 𝙚𝙣 𝙙𝙤𝙣𝙙𝙚
remus lupin nunca se respetó así
mismo como ella lo hizo y aquila black
nunca se amó así misma com...
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XVIII. DIECISÉIS.
ELLA DA MIEDO CUANDO ESTÁ ENOJADA...
Eso era todo lo que Harry podía pensar mientras caminaba por los pasillos de la Casa de los Gritos; Hermione y Aquila estaban frente a ellos, esta última levitaba al profesor Snape, que aún estaba inconsciente, sin importarle que se golpeara la cabeza con el techo. Peter caminaba adelante de ellas, encadenado a Ron y Remus, Ron podía caminar gracias a las curaciones que Aquila había hecho sobre su pierna y su brazo izquierdo.
―Nunca la había visto tan enojada...―murmuró Sirius hacia Harry mirando fijamente a su hermana. Aquila aún tenía que hablar con él o Remus; la pelinegra seguía enviándoles miradas de molestia, lo que Sirius no sabía era por qué estaba molesta.―¿Sabes lo que esto significa?―volvió a hablar a Harry.―¿Entregar a Pettigrew?
―Eres libre.
―Si... pero yo también――, no sé si alguien te lo había dicho, pero... Aquila y yo somos tus padrinos.
―Si, lo sabía.
―Claro... bueno... uhm... tus padres nos nombraron tus Guardianes.―dijo Sirius con frialdad.―Si algo les pasaba... Lo entenderé, por supuesto, si quieres quedarte con tu tía y tu tío... Pero... bueno, piénsalo... Una vez que mi nombre esté limpio si quieres una diferente casa...
Los ojos de Harry se abrieron con sorpresa.―¿Q-qué, vivir contigo? ¿Dejar a los Dursleys?
Sirius parpadeó y sintió que su corazón se hundía.―Por supuesto, sabía que no querrías hacerlo.―dijo parpadeando rápidamente.―Entiendo, solo pensé que――
―¿Estás loco?―dijo Harry.―¡Por supuesto que quiero dejar a los Dursleys! ¿Tienes una casa? ¿Cuándo puedo mudarme?
Sirius lo miró fijamente.
―¿Lo quieres hacer? ¿lo dices en serio?
―Si, lo digo en serio.
Por primera vez en años, una genuina apareció en el rostro de Sirius y ya no parecía ser el demente hombre que habían encerrado hace doce años. Harry podía reconocer a Sirius como el hombre del álbum de fotos que Hagrid le había regalado, riendo en la boda de James y Lily mientras bailaba con su hermana.
