XIV. Amor, amor, amor.

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XIV. AMOR, AMOR, AMOR.




BELLATRIX LESTRANGE REÍA DE ALEGRÍA
cuando los gritos de Neville Longbottom llegaron a sus oídos. Augustus Rookwood, quien sostenía al chico en el aire sonrió maliciosamente y lo lanzó al piso, en donde se retorció de dolor.

―¡Eso solo fue una probada de lo que hacemos!―Bellatrix exclamó en un tono de burla mientras levantaba su varita; los agonizantes gritos de Neville se detuvieron y él yació en sus pies, sollozando.―Potter, danos la profecía, ¿o te gustaría ver a tu amigo gritar hasta morir?

Harry mordió el interior de su mejilla.

Había logrado alejar a los Mortífagos de sus amigos; Hermione estaba inconsciente, Ron estaba en un estado de confusión mientras luchaba con el cerebro, Ginny tenía un tobillo roto; Luna había sido desarmada por múltiples hechizos. Y ahora estaba ahí, parado y acorralado por once Mortífagos, uno de los cuales tenía su varita sobre el cuello de Neville. No tenía elección. La profecía estaba en sus manos y Lucios Malfoy caminaba hacia él para tomarla. Pero antes de que pudiera hacerlo, dos puertas se abrieron y seis personas entraron corriendo a la habitación; Sirius, Aquila, Remus, Tonks, Kingsley y Alastor.

Malfoy se dio la vuelta y levantó su varita, pero Tonks ya le había lanzado un hechizo aturdidor. Harry no esperó a ver si le había dado, solo pensó en esconderse. Los miembros de la Orden ahora saltaban de un lugar a otro, lanzando hechizos hacia los Mortífagos. Harry podía ver sus expresiones volverse más amenazadores a medida que gritaban y saltaban y lanzaban los hechizos. Harry pudo ver una luz roja aproximarse hacia él, por lo que se lanzó al suelo. Vio a Neville tratando de agarrar su varita y trató de ayudarle, pero alguien lo agarró del cuello de su camisa y lo hizo levantarse.

―Dámela.―una voz gruñó en sus oídos.―Dame la profecía.

El hombre tenía un brazo alrededor del cuello de Harry y con su otra mano, apretaba la punta de la varita contra su pecho. Su corazón latía tan fuerte que hasta podía escuchar el palpitar en sus oídos, sus ojos miraban en todas direcciones, en busca de ayuda. Pero Sirius estaba en un duelo en contra de un Mortífago que estaba enmascarado a unos metros de distancia, Kingsley luchaba contra dos a la vez, Tonks, que estaba parada en una escalera lanzaba hechizos hacia Bellatrix...

philophobia ━ remus lupin. (2)✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora