Ambos se miraron en silencio con sus rostros carentes de expresión, como si de alguna manera estuvieran jugando una partida de póquer. Sin embargo tras mantenerse así durante un largo intervalo, el primero en venirse abajo fue Des, quien suspiró de forma casi hasta melancólica antes de musitar:
-De verdad que lo siento. Sabía que si seguía viéndote tarde o temprano terminaría salpicándote algo de mi basura...
-No es culpa tuya. –repuso Leo con expresión seria, mientras tomaba una foto que el modelo había depositado encima de la mesa con asiento cheslong que habían ocupado en un discreto rincón dentro del café del Hotel Four Seasons George V.
En la fotografía había una imagen de mala calidad de dos personas en la calle. Des era perfectamente distinguible en ella, cosa no aplicable para la segunda figura al encontrarse casi por completo de espaldas en ella.
-La policía aún no te ha identificado. Pero yo si... Reconocería tu nuca en cualquier parte.
No obstante nada más decir esto, el propio Des pareció comprender que aquello había sonado un tanto raro, por lo que con rostro abochornado añadió rápidamente:
-Por la calle creo que es del día en que quedamos a tomar algo en aquella chocolatería antes de que tuviese que irme a Reino Unido.
Debido el grumo la foto parecía descargada de internet. Presumiblemente tomada con un móvil. Leo siguió mirándola con aspecto pensativo mientras el modelo continuaba con su explicación:
-Así que por el momento el único que tiene la orden de alejamiento soy yo. Algo ridículo, porque ni siquiera conozco a ese fan. Pero él asegura que "la persona de la foto" es la que le ha mandado al hospital por una supuesta orden mía. Vaya locura ¿no te parece?
Leo no contestó, depositando de nuevo la fotografía sobre la mesa. No había que ser un genio para descifrar la mueca pesarosa de su cara, propia de alguien consumido por la culpa. Des sin saber que más decir, suspiró para rodar después sus ojos hasta la infusión caliente que había pedido.
Visto desde fuera, era curioso como por otra parte, ninguno de los dos parecía afectado ni lo más mínimo por el chisme. Era como si el que medio mundo pensase ahora que estaban en una relación les resultase completamente indiferente. Leo por considerarlo ridículo por varios motivos. En cuanto a Des... bueno, en realidad él sí lanzaba pequeñas miradas de refilón a su acompañante. Pero al poco volvía a clavar sus ojos en su propia taza manteniéndose en una postura ligeramente encorvada.
-¿Y qué va a pasar ahora? –cuestionó Leo cabizbajo tras un rato de silencio.
-Me quedaré algunos días en este hotel –repuso Des resuelto pero con cierto aire abatido –Mi casa está rodeada de paparazzis y curiosos. Es como si ahora todo Paris supiese donde vivo.
-Lo siento. –repuso entonces Leo aún más mortificado.
-¡No te preocupes! ¡Ni que fuese mi primer juicio! –aportó el modelo tratando de parecer despreocupado. –He tenido imputaciones peores créeme. Y el abogado me lo pone la agencia así que...
-Aun así lo siento. –repitió el guía apretando sendos puños sobre sus rodillas. -Seguro que todo esto es culpa mía.
Aquello hizo que Des le lanzase una mirada dispar.
-¿Por qué dices eso?
El aludido dudó, y tras un rato se frotó incómodo la nuca antes de declarar:
-Puede que sea verdad que yo le mande al hospital. La verdad es que no lo sé.
El modelo siguió mirándole sin entender, por lo que aún más incómodo y puede que hasta con algo de miedo Leo continuó explicando:

ESTÁS LEYENDO
Apeiron [ AMOLAD ]
RomanceTras su última discusión Vida y Muerte realmente llegaron a pensar que tal vez nunca podrían volver a hablarse de nuevo. Pero las cosas nunca son tan simples y Vanidad tiene otros planes. Este fic continua la historia original desde el "presente"...