XIX

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Me ausenté unos días en la escuela pues el médico mando reposo debido a una costilla rota, sin embargo viva mis amigos diario colándose por mi ventana, incluido Frank.
Mi padre estaba furioso y recordándome cada diez minutos que estaba buscando algún internado italiano para mandarme. Sabía que mentía por un simple motivo: su sueldo apenas y alcanzaba para sobrevivir, por supuesto que no podía pagar un costoso internado europeo.
Mikey me llevaba la comida al cuarto pues mi madre no quería ni verme a la cara por más de un motivo. Estaba molesta pues le había dicho solo a ella que oficialmente pertenecía a la pandilla. Por supuesto no se lo tomó bien y se que me hubiera dado hasta con la escoba de no ser por la paliza que ya me habían dado. Le prometí no meterme en muchos problemas pero aún así seguía molesta.
Sin embargo Frank se había aparecido antes y después de la escuela diario y además por las noches me llevaba algún dulce.
Ese día era sábado, obviamente no pude ir a trabajar y Frank se encargo de avisarle al viejo Axe.
Yo estaba recostado en la cama comiendo gomitas y leyendo un libro que me habían pedido en la preparatoria. Eso me tenía aburrido, quería ver a mis amigos, incluso quería ir a la escuela lo cual era raro en mi, una persona que prefería quedarse a dormir todo el día.
Habían pasado un par de meses de mi llegada y tantas cosas habían cambiado.
Bueno, ya no odiaba la casa, tampoco la escuela. Me gustaba caminar o ir en bici al súper mercado, sabía que encontraría a mi mejor amiga en las cajas. Mis nuevos compañeros eran los mejores: no parecían ser interesados y sabían divertirse en más de un modo (aún que no todo fuera legal), y además había conocido a Frank.
A pesar de que ese enano se comportó como un idiota al principio, pude encontrar que en el fondo es una buena persona y que no solo se aprovecha por tener una 'cara bonita' sin embargo aún quería conocerlo más a fondo. Aún no conocía a su padre, tampoco estaba seguro de lo que él quería hacer después de la preparatoria. A veces me hacía creer que deseaba salir de Jersey y conquistar el mundo, otras veces me hacía creer todo lo contrario. Era un gran enigma.
Además de que juraba no ser gay, pero siempre buscaba oportunidad para besarme. Definitivamente era un tonto, pero era uno que me divertía. No estaba seguro de estar enamorado, pero Frank me parecía atractivo, realmente deseaba que fuera lo mismo con Frank: solo diversión. Al menos por ahora. Me daba miedo que me rompieran el corazón
Me levante con cuidado y camine a mi ventana. Ya iban a ser las tres de la tarde y no tenía nada que hacer, ni siquiera tenía televisor. Mi celular estaba sin carga y hacía calor. Salí De mi cuarto en pantunflas, mi madre estaba cociendo un jersey para uno de los futbolistas de la preparatoria. Ella ignoró mi presencia tras ella, así que seguí avanzando hasta la cocina por un vaso de agua.
Me necesitan hidratar, no sabía cuánto tiempo llevaba sin Salir de mi habitación.
Y cuando regrese mis amigas ya me esperaban sentadas en la cama. Había tratado de evitar estar a solas con Linds pues no dejaba de preguntarme por su hermano y eso era un poco incómodo. Y parecía esa no sería la excepción.

—¿Haz visto a Frank?-

Cerré la puerta y me senté entre ellas negando con la cabeza.

—No desde ayer.- respondí -¿Esta desaparecido o algo así?-

—A Linds le preocupa que al parecer su hermano tiene una obsesión contigo- Avril se rió. -Había mucho de ti, parece enamorado- Dijo buscando algo en su mochila y sacando una bolsa de gomitas.

—Y anoche no llegó a dormir... creía que podía estar aquí, el siempre me avisa si se va de parranda...-Linds me miró preocupada. -Y hace unos días tuvo un enfrentamiento con el tonto de Jon, el lider de los Dark sea... me da miedo ir a verlo.-

—¿Quieren que las acompañe?- les pregunte -Solo debo vestirme... estaré listo en cinco minutos-

—Es peligroso.- Afirmó Avril.

—Lo se, pero la golpiza que me dieron me dice que somos familia y debemos apoyarnos, así que iré.-

Ellas no protestaron así que me apure a cambiarme de pijama a ropa casual y a decirle a mi madre que "dormiría" y que no me despertaran. Así que salí con las chicas por la ventana y caminamos rápido al barrio de a lado. Lindsey Nos guiaba y su yo me llegue a quejar de que el lugar donde vivía lucia peligroso ahora no sabía que decir del lugar conde estábamos. Sentí que nos apuñalarian en cualquier momento; sin embargo las chicas lucían tranquilas así que trate de relajarme y unirme a las bromas que hacían.

Llegamos a una vieja nave de bodega, era enorme pero estaba descuidada, llena de grafitis y con un enorme saguan negro con carteles de advertencia en amarillo, Linds toco la puerta.
Unos momentos más tarde apareció frente a nosotros un hombre, el cual reconocí como Jon por aquel día en que su pandilla me interceptó. El relajo el seño al ver a Linds.

—¿Que haces aquí? Sabes que no puedes estar aquí, es peligroso.- Murmuro abriendo la puerta para dejarla pasar y nos miró a nosotros -Y ¿que hacen ellos aquí?-

—Son mis amigos Jon- Lin Se rio divertida. Había algo raro en esos dos, lanzándose miradas y era claro que Linds trataba de coquetear moviendo su cabello. -Solo venimos buscando a mi hermano, ¿lo han visto?-

—No- Jon bufo. -Desde la vez que quiso buscar pleito conmigo no lo he visto.- Me miró. -El debería saber. Después de todo es la zorra de tu hermano ¿no?-

—No lo soy- respondí mirándolo firme. No me iba a intimidar tan rápido. -Y no se donde está-

—Es raro. Tú y el se la pasan juntos ¿no? Creí que se amaban y se follaban en uno al otro- Dijo burlón.

—Es Mi hermano del que hablas, Jon.- Linds le dio un suave empujón que se vio amistoso y mis sospechas crecían más. ¡Lindsey me había mentido con lo de Jon!

—Tu hermano es puto y le gusta la...- Jon hubiera continuado si Lindsey no hubiera vuelto a empujarlo. -Está bien, me detengo... ¿Ya fueron a casa de la niña esa con la que sale?-

—¿Quien?- Avril Pregunto

—Mientras su novia no estaba- Me señaló, yo rodé los ojos. -Se volvió muy cercano de una rata de biblioteca. Los vi fajando en el estacionamiento del parque hace unos días.- Murmuro.

—Mierda. Frank es un estupido- Lindsey Se golpeó la frente.

Y yo me sentí mal. Y ni siquiera tenía derecho a hacerlo.

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¿Como les trata la cuarentena chiquitines? Yo me quiero matar más que nunca.

P O O R   B O Y //frerard// Donde viven las historias. Descúbrelo ahora