24. Inconsciencia

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Continuando con el capítulo anterior:

Freddie y John se quedaron viendo unos minutos más aquella escena hasta que el baile se tornó ligeramente más perverso.

—Está bien, mejor los detengo antes que acaben follándose en mi sala—mencionó Freddie poniendo una mano en el hombro de John y acercándose a sus amigos.

—Discúlpenme mis amores pero la hora del bailecito ya terminó, si van a querer follar deberán hacerlo en otro sitio—separó cuidadosamente a Roger de Brian. El último mostró cierta resistencia a dejarlo ir. Mientras que el rubio se dejó caer en los brazos de Freddie debido a lo ebrio que estaba.

—Pero...mi hermosa rubia—extendió sus brazos luchando torpemente a que no los separen.

—Brian, es Roger con vestido, es demasiado obvio, solo que estás tan ebrio que no sabes identificar a un hombre de una mujer—dijo John, con los brazos cruzados, manteniendo su distancia.

—Con Roger nunca se sabe, Deaky. Y tampoco le rompas la ilusión al rulos, que lo harás dudar de su sexualidad—respondió Freddie mientras hacía que Roger pasara un brazo por su hombro y lo abrazaba por la cintura para que no caiga—¡Brian te toca a ti retar! —dijo volviendo a sentar en el suelo con el pobre Roger perdido a su costado.

—Freddie creo que está muy alcoholizado para pensar coherentemente.

—¡Tonterías, es... mi turno! —respondió Brian levantándose torpemente sintiendo como todo se balanceaba a su alrededor, tragó saliva pesadamente mirando a la pareja. Dio vuelta a la botella, acabando por señalar a John.

Deacon sintió un pequeño escalofrío recorrer su espalda, temiendo a que le hagan hacer otra tontería.

—Te reto...¡a que ganes a Freddie en una competencia de borrachos!... debes acabar antes que él cuatro vasos medianos de la garrafa, si pierdes deberás ser su esclavo por el resto de la noche ¡he dicho! —dijo Brian con cierta dificultad debido a su estado.

—P-pero es casi lo mismo que su reto, solo que en vez de un vaso gigante son cuatro vasos medianos, técnicamente lo estas repitiendo y eso va en contra de la regla—replica John algo disconforme.

—No es lo mismo, tú lo dijiste, "CASI" lo mismo, pero no es lo mismo, la regla dice que no se pueden repetir los retos y por ende que no pueden ser los mismos, sin embargo nunca dice nada de ser similares. La definición de similar es: que se parece a otra persona o cosa. "Se parece" no es lo mismo que "igual". Así que mi reto es totalmente valido ¡hip!

—Vaya querido, para estar borracho argumentas muy bien—lo mira Freddie con cierta sorpresa y deja a Roger en el suelo—bueno Deaky, un reto es un reto. Prepárate para ser mi adorable esclavo durante el resto de la noche—sonrió con orgullo y se levantó para poner los respectivos vasos sobre la mesa.

John se puso al costado viendo atento como servía cada vaso y lo llenaba de aquel líquido que a estas alturas dudaba si en verdad era alcohol. Acabó de servir y se puso a su derecha.

Brian miró a ambos y levantó su mano para dar la señal—¡Empezamos en uno, dos y lo que siga después de eso! ¡A tomar!

Ambos agarraron el vaso con rapidez empezando el reto que los llevaría al siguiente nivel de una típica tomadera entre amigos...la inconsciencia total.

En aquellos momentos de la noche para nuestro querido cuarteto, la inconsciencia se volvió una realidad irrefutable y el sinsentido y la meca de la estupidez borracha tomó control del hogar del carismático vocalista.

Encendieron la radio, dejaron la botella de retos de lado, como increíble coincidencia empezó a sonar música fuerte y movida sirviendo como una inyección de adrenalina para estos ebrios personajes...

Al desnudoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora