42. En las ramas

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Terminé de narrar la historia con una sonrisa bobalicona en mi rostro, recordaba con mucho aprecio ese momento, aunque creo que me ensimismé mucho al contarlo porque cuando levanté la mirada me percaté de la mirada impresionada de Chrissie­: cruzada de brazos con el vaso de cerveza vacío colgando en su mano. Tomó un momento para que saliera del ligero aturdimiento

—Oh vaya—acomodó su cabello detrás de su oreja—sí que tú y Roger tienen una amistad muy particular...prácticamente congeniaron al instante. Un clic a primera vista

—Podría decirse que sí—admití sonriendo—¡Pero debiste verlo en nuestra primera presentación como banda! Normalmente los bateristas quedan atrás y no son los más vistosos, pero él no fue así lo que él hizo fue...

Tuve que detenerme cuando noté la expresión incómoda de Chrissie. Mis mejillas empezaron a arder ¡¿fui muy obvio?!—¡Oh, lo siento mucho! Yo...creo que fue suficiente con esa larga historia de cómo me conocí con Roger. Lo lamento tanto, soy un desconsiderado. Mejor...mejor hablemos de ti querida—frote mi cuello mirándola apenado. Maldición ¿en qué momento me volví así?

Chrissie rio en voz baja negando con la cabeza—¡Oh no! No me molesta...en realidad creo que es lindo que tengas esos recuerdos con tu mejor amigo y hables tan bien de él—admitió sonriendo, pero su sonrisa lucía más como de compasión. Y no la culpo creo que me la pasé como media hora hablándole de Roger sin parar. Es ridículo que siga pensando en eso. Esta cita es con ella, no con Roger ni para hablar de Roger...

¿Cómo hubiera sido una cita con él...?

Negué con mi cabeza para tratar de disolver aquel pensamiento. Chrissie siguió hablándome de otros temas. La escuchaba y conversábamos de aquello, a la par que tomaba una cerveza tras otra ¡Era de las más deliciosas que había probado! La conversación iba tan fluida que seguí tomando un vaso tras otro sin darme cuenta...

—Entonces, si entendí ¡¿Quieres dejar tu carrera de astrofísica por ser músico?!

—¡Claro que sí! Bueno...¡si triunfamos! Así podría irme de lleno a eso y poder dormir más de tres horas al día ¿¡Puedes creerlo!? ¡Solo nos daban el estudio a las 2 o 3 de la mañana! ¡en la madrugada! ¡y apenas podía dormir! ¡Freddie iba de un lado a otro queriendo mejorar todo! ¡Ni siquiera sé si en verdad dormía después de eso! Todo quería que fuera p-e-r-f-e-c-t-o.

—¿¡Tenías que ir al estudio a las 3 de la mañana?! Probablemente se demoraban más de dos horas en todo eso ¡¿Tu no me dijiste que tenías horarios matutinos?

—Sí

—¿¡Y cuando dormías!?

—¡¿Dormir?! ¡JA! ¡Ni yo lo sé! Estas bonitas ojeras no son maquillaje ¡A veces ni podía seguir el ritmo de la clase y debía estudiar en mi piso! O por último Roger iba a salvarme e iba a su casa a dormir. En realidad, donde cayera muerto primero

—¡Yo apenas puedo funcionar correctamente con cinco horas de sueño!—exclamó tomando un buen sorbo de su cerveza, la música era alta y parábamos gritando mientras hablábamos...o quizás solo era el alcohol ¡Apenas puedo distinguir la cara de los demás!

Mierda creo que ya estoy algo borracho...

—¡¿Y ese amigo tuyo?! ¿¡Freddie!?

—La inigualable reina prodigiosa ¿Que ocurre con él? ¿Te criticó por cómo vestías? ¡Tranquila lo hace con todos!

—¡No eso no! En realidad, es muy agradable

—¡Claro! Cuando está de buen humor lo amas y él a ti ¡Cuando se enoja desconoce a todos!

Al desnudoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora