3

3.9K 168 27
                                    

―Chicos, ella es Natasha.

Frente a nosotros estaba una chica de tez blanca y cabello negro, con un cuerpo envidiable y de alta estatura. Sin duda la fantasía de muchos.

―Un gusto.

―El gusto es mío. ―se nos adelanta Marcus.

―Imagino que Carter les dijo que soy aliada infiltrada en los terrenos de Dimitri.―algunos asienten con la cabeza, yo me quedo en mi posición cautelosa―Si me ven con sus hombres y la cosa se pone fea no duden en dispararme. Yo se cuidarme sola. He tardado bastante en ganarme la confianza del tipo y no podemos perder todo el trabajo así porque así. Mas o menos así es el mecanismo.

Marcus sonríe. ―Yo te puedo prestar mi mecánico, nena.

Le doy un codazo.

―No seas idiota.

Marcus levanta sus manos en acto de rendición y susura un "Bien".

―En fin, Natasha esta aquí para ayudarnos.―dice Pos.

―¿Se olvidan de mi?―de nuevo esa voz.

El chico medio rubio con acento irlandés aparece en el estacionamiento. Hasta su forma de caminar es extraña. Se coloca a la par de todos y cuando sus ojos encuentran los míos me envia un guiño, ruedo los ojos y lo ignoro.

―Iré con Carter.―dice Natasha en tono coqueto.

―De ninguna manera―digo dando un paso alfrente.

Creo que ya es hora de dar cara en la conversación.

―¿Y eso porqué?―Natasha da un paso alfrente en actitud de molestia, creo que no le agrado.

Hay varios de mis hombres aquí por lo que debo darme mi puesto de jefa.

―Carter se viene conmigo y punto. Líderes de los terrenos van juntos, que yo sepa tu eres una simple chica de sus terrenos, ¿o me equivoco? ―miro a Carter con una ceja alzada―¿Natasha te quitó tu puesto?

Carter mira a Natasha y luego a mi, después vuelve a ella.―Yo sigo en mi puesto, por lo tanto te ordeno que vayas con Marcus y Pos.―Natasha lo mira mal y se da media vuelta para ponerse a la par de los dos chicos.

―Bien, creo que ya esta todo dicho.―acomodo un poco mi cabello―En media hora todos partimos.

Ellos asienten y se van.

―¿Carter?

Me mira de soslayo.

―¿Si?

―Pasa en media hora por mi casa. Necesito cambiarme, ¡ah! Y ponte algo elegante.

Me mira unos segundos antes de hablar. ―Intenta hacer un milagro, porque con esa cara...

―¡Cállate!

¿Porqué siempre tiene que insultarme? Cada ves que abre la boca me dan ganas de vomitar dentro de ella.

Se encoje de hombros.―Bien.

Me quedo en mi sitio viendo como Carter se sube a su coche y se marcha a toda velocidad.

***

Él traje que escojí es color blanco y aderido a la piel. El muy maldito lucha por treparse más alla de mis muslos y tengo que bajarlo constantemente. Alizo mi cabello y noto que a crecido un poco.

Bien.

Me coloco los tacones blancos y tambeleo un poco pero retomo la postura. Debo admitir que me veo...sexy. Pinto mis labios de un color crema claro y le doy solo unos toques a mis ojos.

En ProblemasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora