Capítulo 31

1.1K 126 15
                                    

¡ANUNCIO!

Les aviso que el día 19 de Febrero ganamos en el concurso San Valentín Awards por PremiosPlanetas el segundo lugar en la categoría Amores Terroríficos, además de la mejor escena romántica y mejor personaje secundario (Dorian y Bishop).


Muchas gracias por su atención y si disfrutan de esta historia no se olviden de votar y de comentar.
_

____________________________________

Advertencia: Lenguaje Fuerte

—Listo, ya terminé —argumenta después de hacerme pasar por ese dolor tan desagradable, mi cabeza palpita de dolor. Yo por mi parte, lo único que hago sollozar y esperar hasta que se pase el dolor y la quemazón producida por esas cosas que me enterró—Nos tenemos que ir.

—Me duele—protesto más a la bestia no le importa e intenta ponerse en piel, para no caer, me arrastro hasta otro punto del suelo.

—Dolores peores vendrán, no seas cobarde y ponte en pie.

No lo hago, solo me quedo ahí tendida.

—¡Lárgate solo, déjame en paz!

Pienso que no debería estar molesta pero lo que me hizo no tiene perdón, se sabe que me quiere cuidar, pero desgarrarme las entrañas no es la forma; lo había podido hacer mientras yo estuviese inconsciente.

—¡Levántate, es una orden!

Odio que me grite y él lo sabe.

—Tú no eres nadie para ordenarme que hacer, te podrás parar en los cuernos ¡pero de aquí, de aquí no me muevo! —le grito con la poca fuerza que tengo.

Con la intención de empoderarme, lentamente me voy poniendo de pie, pero duele, duele como nunca mi espalda. En el intento suelto varios gritos, insultos, gemidos, pero maldita sea, eso ahora no me importa.

—Ahora eres uno más de mis demonios y yo soy tu líder, así que me obedeces...

—¿O qué?, qué me vas a hacer, ¿me tirarás en un pozo como la última vez?

—No juegues conmigo, no sabes lo que soy capaz de hacer. Y mejor no te sigo la corriente porqué sé que lo dices porque estás estresada.

—Eres un hijo de...

El sonido de unas alas cortando el aire hace que me calle. Lo primero que llama mi atención es el fuego que estás desprenden, mejor dicho, que todo aquel demonio desprende. Aquel ser se ve tan hermoso que hace que me olvido del dolor que estoy sintiendo.

Alas de fuego.

—Petra tuvo una visión sobre Lilith—habla aquél ser.

—Lo sé, viene para acá.

—Ordene—pide una voz femenina, observo el cielo y veo como cae esta demonio.

—Lleva a Milufer a su habitación y movilicen una legión si es posible para que esté bien protegida. Dejen a Petra liderando allá junto a Aveluz y Guardián, el resto se vienen para acá, le vamos a hacer frente

Todos hablan tan rápido y en otros idiomas, que no sé qué está pasando. En esas la demonia que descendió hace poco, me toma de un brazo y me lleva a rastras hasta la cabaña.

Su agarre es fuerte y quema.

—¡Ah! Ten cuidado, me duele.

Cuando ya estamos frente al espejo espeta—Ilusa, solo espera...—para luego lanzarme por el espejo.

MILUFER ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora