Las familias Jaeger y Ackerman han sido socios y amigos desde generaciones atrás y ese lazo se fortaleció más desde el nacimiento de Mikasa Ackerman y Eren Jaeger, quienes han sido mejores amigos desde que usaban pañales.
No era raro encontrar a uno de los dos durmiendo en casa del otro, compartiendo plato y cuchara, y hasta bañándose juntos (sólo durante su infancia). Se podría decir que eran hermanos gracias a la unión y confianza que se tenían el uno al otro.
Pero como el clásico cliché, Eren comenzó a desarrollar sentimientos más allá de la amistad por Mikasa, quien no se daba cuenta debido a que tenían 10 años y lo veía como un hermano, un impulsivo y conflictivo hermano menor.
Un día, ambos niños se encontraban en el patio de la mansión Ackerman jugando baloncesto; debido a su corta altura, para Eren le resultaba difícil ganarle a la pelinegra. Entonces se le ocurrió una alocada y extraña idea.
— ¡Tiempo fuera! — espetó para después ser golpeado por la pelota en la cabeza. — ¡Auch! ¡Miki! — se quejó con su mejor amiga, la cual tenía una cara de arrepentimiento y a la vez de burla.
— ¡Perdón, Tatakae! — empezó a reír, haciendo enojar al castaño. Pero Eren, por más que quisiera, no podía estar enojado con Mikasa, no con ella. — N… No qui… quise pegarte. — se calmó al ver a su mejor amigo acercarse. — ¿E… Eren? — preguntó con los nervios de punta ante la cercanía.
— ¿Hacemos una apuesta, Miki? — se atrevió a preguntar el ojiverde.
— ¿Apuesta? — retó la pelinegra. — ¿Qué clase de apuesta, princeso? — Eren frunció el entrecejo y Mikasa le sacó la lengua; ella sabía perfectamente lo mucho que odiaba ese apodo.
Eren se paró de puntas y extendió su brazo con la palma abierta, arriba de la cabeza de la ojigris. — Si crezco a esta altura, ¿serías mi novia?
Mikasa rió un poco. — Sí, claro, si es que creces.
Después de eso, los niños jugaron un poco más para después irse a cenar y dormir.
Dos años después, Eren y Mikasa se encontraban en la biblioteca de la mansión Jaeger, recopilando libros para un proyecto. El moreno no podía alcanzar uno de los libros de los estantes, estaba por pararse de puntas cuando la blonda tomó el libro. Si bien había crecido en estos dos años, la azabache le ganaba por tres centímetros y medio.
Al salir de sus pensamientos, el moreno decidió aumentar su apuesta. — ¡Yandere! — Mikasa rodó los ojos y miró al castaño. Odiaba ese apodo y él lo sabía. — ¿Recuerdas nuestra apuesta?
La chica se quedó pensativa. — ¿La de hace dos años? — el castaño asintió. — Hasta ahorita voy ganando, princeso. — sonrió con superioridad.
— ¿Qué te parece si la hacemos más interesante, Miki? — la azabache le hizo una seña para que continuara hablando. El castaño se acercó e hizo la misma acción que hace dos años atrás. — Si crezco a esta altura, ¿te casarías conmigo?
La preadolescente se sonrojó violentamente al ser tomada con la guardia baja y su corazón se aceleró, gracias a sus sentimientos hacia el chico frente a ella. Inhaló y exhaló profundamente para calmar los nervios. — Veamos si lo logras.
Al graduarse de la primaria, Eren fue mandado a estudiar a una de las prestigiosas escuelas de Liberio, en Marley, misma a la que asistió su hermano mayor Zeke; y si Eren lo decidía, podría volver para estudiar la Universidad en Paradise.
La despedida fue algo difícil para los chicos, odiaban la idea de estar alejados el uno del otro y no poderse ver hasta haber culminado sus estudios, o por lo menos el bachillerato.
Pero Eren no sería el único en ser enviado al extranjero; Mikasa fue mandada a estudiar a la ciudad natal de su madre en Hizuru.
A pesar de la distancia, mantuvieron la comunicación, la cual poco a poco fue disminuyendo con el paso del tiempo debido a sus ocupaciones escolares y actividades extracurriculares; llegando al punto de hablarse una vez cada dos meses.
En un abrir y cerrar de ojos, Mikasa ya se encontraba a unos meses de entrar a la Universidad; regresó antes a Shiganshina para terminar el bachillerato allí. Ese día, se encontraba saliendo de clases junto a Sasha, su mejor amiga.
— ¿Qué vas a hacer hoy? — preguntó la castaña.
— Tengo clases de ballet y boxeo. ¿Tú qué harás? — preguntó la pelinegra mientras guardaba su celular.
— Iré con Connie al cine y de ahí iremos a comer, me pregunto qué película veremos ya que no... — calló al ver que Mikasa no le prestaba ni la más mínima atención.— Oi, Mikasa, Mika-chan... ¡Michoza! — la blonda dió un respingo y dirigió su molesta mirada hacia su amiga por el apodo. — ¿Qué te pasa?
La ojigris hizo caso omiso y volvió a dirigir su mirada hacia el frente. Sasha, cansada de ser ignorada, dirigió su vista hacia donde miraba Mikasa para saber qué veía. Abrió sus ojos en grande y quedó atónita por ver a alguien familiar de espaldas.
— ¿E… Eren? — dijo automáticamente la pelinegra.
El castaño que se encontraba frente a ellas dándoles la espalda reaccionó y ladeó su cabeza un poco para mirar a las chicas.
— Te llamo luego, mamá. — y colgó, para voltearse completamente hacia ambas jóvenes. Eren le dirigió aquella sonrisa atrevida característica de él hacía su mejor amiga. — Hola, Miki.
— ¡Tatakae! — exclamó emocionada para ir corriendo a los brazos de su mejor amigo, quien la cargó y le dió vueltas al tenerla entre sus brazos.— Te extrañé, princeso. — dijo para después darle un beso en la mejilla.
— Yo también, Yandere. — le contestó dándole un tierno beso en la frente después de colocarla delicadamente en el suelo.
Mikasa escaneó de pies a cabeza a Eren, sonrojándose ante los notables cambios físicos de su mejor amigo.
Eren hizo lo mismo con Mikasa, también sonrojándose en el proceso ante favorecidas curvas, sonrió al darse cuenta de algo en específico.
— ¿Qué? — arqueó una ceja, confundida. Se confundió más al ver la mano del castaño sobre su cabeza y se sonrojó al darse cuenta del significado. — E… Eren...
— Y ahora... ¿Aceptas? — mencionó atrevidamente.
Editado: 11/11/21.
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De párrafo en párrafo • Editando, Pausada
Fanfiction𝐄𝐬𝐜𝐫𝐢𝐛𝐚𝐦𝐨𝐬 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐣𝐮𝐧𝐭𝐨𝐬, 𝐝𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐫𝐚𝐟𝐨 𝐞𝐧 𝐩𝐚𝐫𝐫𝐚𝐟𝐨. » No todos los One-shorts estarán basados de acuerdo al manga. » Habrá Universos Alternos. » Probable contenido +18. » Todos los One-shorts s...