Caminabamos por el parque, ambos; uno al lado del otro, riendo y hablando.
— ¿Te gustó la cena? —preguntó el pelinegro.
— Sí, estubo bastante deliciosa —sonreí —, fue lindo haber salido. Gracias.
— De nada... Suni —llamó —, quiero hablar de unas cosas contigo.
— Sí, claro. —me miró —. ¿Vamos al banco de allá?
Ambos nos dirigimos al banco del parque que se encontraba a unos varios pasos nuestros. Eran algo de las 22:00, hacía frío también.
Había salido a comer con JaeBum, la había pasada bien, me acordé de los viejos tiempos, cuando apenas comenzabamos a salir, hablabamos de cualquier cosa todo el tiempo, nos reíamos sin parar, ahora fue igual; no hablamos de nada serio, y no hubo momentos incómodos para nada.
Me hizo un ademán para que me siente, luego lo hizo él: lo miré sin expresión alguna, esperando a que hable; me estaba poniendo nerviosa, ya qué su expresión era totalmente neutra.
— Jae... —hablé —. ¿Estás bien? —insistí.
— Ah, sí —dijo sacudiendo su cabeza levemente —. Lo diré sin vueltas: ¿te sientes confundida con algo, o... con alguien? —preguntó, entonando más la última palabra.
Sinceramente no sé que responderle, no estoy segura de lo que siento y mentir no es la mejor opción, le seré sincera. Aunque eso signifique que él se enoje conmigo, o tan sólo se aleje.
— Jae... ¿q-qué dices?
— Es sólo decir 'sí' o 'no', Suni —respondió mirándome con una leve sonrisa.
— Bueno... sinceramente, no, no lo sé —suspiré cansina —. Siento cierta atracción por alguién, pero...
— ¿Pero?
— Pero... nada, olvídalo —reí leve cabizbaja —, pero realmente no sé lo que siento en éstos momentos.
— Y esa persona que te hace confundir, ¿quién és? —preguntó con cierto interés.
— Mark —respondí sin vueltas —, esa persona és... Mark.
Y ahí lo vi, sonreír rendido, cabizbajo. Su sonrisa fue leve, casi sin ánimos, levantó su vista y me miró por unos segundos, suspiró y esperé una respuesta, pero no llegó.
Lo había echado todo a perder.
— No sé que decir —habló finalmente —, pero tranquila, no te presionaré. Pero tampoco me rendire, y lo sabes —término de decir con una sonrisa.
— Lo sé —sonreí con los labios unidos —, créeme que lo sé. Gracias por entender, en serio —finalicé de hablar y besé levemente su mejilla.
— Está bien. ¿Vamos por un helado?
— Perfecta idea —dije para luego pararme, agarrarle el brazo y levantarlo del banco a la fuerza.
[...]
— Cariño, llegaste —dijo mi madre acercándose a mí —, ¿como te fue con JaeBum? ¿Uhm?
— Bien —respondí sin ánimos, dirigiéndome a las escaleras.
— No, no —chasqueó la lengua dos veces —. Ven aquí, algo pasó. ¿Que te hizo?
Se acercó a mí y me tomó del brazo con delicadeza, me llevó a rastras hasta la sala y yo sólo rodee los ojos.
— No me hizo nada, la pasé bien —respondí sentandome en el sofá —, a decir verdad la pasé bastante bien.
— ¿Entonces, cielo?
— Me siento confundida, y no sé que hacer.
Odiaba tanto ésto, sentirme así.
— Cuéntame —pidió con una sonrisa tan cálida y sincera —, soy todo oídos.
— Bien —suspiré —. Cuando volvió Mark, nuevamente me sentí bien, después de todo lo que había pasado por JaeBum. Comencé a pasar más tiempo con él, y sin darme cuenta, comenzó a llamar mi atención. Luego, apareció Jae, y mis sentimientos hacía él volvieron. No sé que hacer, no se que siento. No me entiendo —sonreí levemente, rendida.
— Linda —mi madre apoyó su mano en mi rodilla —, es normal que te pase ésto. Pero no te tortures, no es tu culpa, son cosas que se sienten. Ahora dime... ¿como te sientes con cada uno?
— Con Mark, me siento bien, tranquila, me da paz, y siento que nada malo puede pasar —respondí mirando un punto fijo en el suelo —. Y con Jae: me siento segura, me siento protegida, me hace sentir como cuando tenía diecisiete años; me encanta, pero también siento que me sigue doliendo.
— ¿Que tal si le das una oportunidad a Mark? —llamó toda mi atención —. Digo, te vi con él, y hace tanto no veía sonreír así, con tanta calidez. Además te quiere, yo no nací ayer —sonrió con gracia —, te mira de otra manera, lo sé.
— Tal vez... tal vez deba hacerlo —fruncí los labios —. Y, el me confesó sus sentimientos.
Mi madre abrió los ojos como dos platos.
— ¿Y que esperas?
— Sólo, debo estar segura de lo que quiero y siento.
— No te presiones, y piénsalo bien —se levantó de mi lado —. Adiós cariño, descansa —dijo acariciando mi mejilla y luego besó mi coronilla, después de éso la vi subir a su habitación.
Me dejé recargar sobre el respaldar y suspiré pesadamente. Me quedé ahí, pero al cabo de unos minutos me dispuse a levantarme para ir a mi cuarto.
Me adentré al baño, saqué el poco maquillaje que había en mi rostro; lave mi cara, cepillé mis dientes y salí.
Me puse mi pijama y agarré mis cosas de la Universidad: estudiaría. Queda una semana para los exámenes finales, y luego de eso, hermosas vacaciones. Tal vez el estudio me haría olvidar de todo un rato.
Me senté en el centro de mi cama, como indio, y dejé las cosas a un lado.
Hablar con mi madre me había echo bien, siempre daba unos cortos pero lindos consejos. Sin dudas es un amor, siempre pude contar con ella, es algo que agradezco.
Tal vez la idea de darle una oportunidad a Mark, no es mala. Sinceramente me gustaría intentar algo con él, pero no, no quiero lastimarlo, tienen unos sentimientos que merecen ser cuidados como oro. Además de qué hay algo que siempre vuelve y vuelve, mis sentimientos por JaeBum.
¿Por qué todo tiene que ser así? ¿Por qué tengo que sentir ésto?
Estoy en aprietos, y sí, ¿y si no funciona?
Echaría todo a perder, la amistad, todo, y lo que menos quiero perder es a Mark. No puedo, no pienso permitirlo.
Suspiré cansina, otra vez. Agarré mis libros, los apuntes, un lápiz y comencé a resumir y leer las páginas pedidas, las cuáles tenía que estudiar, tomaba apuntes, releia, e intentaba entender perfecto todo.
Luego de hora y media de estudio, guardé las cosas y me acosté. Espero que al levantarme, mis pensamientos estén más aclarados.
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Again you ; Lim Jaebeom
FanfictionCuando eres jóven y vives tu primer amor, pensarás que es para siempre, que nadie jamás podría separarlos. Eso pensaban ambos jóvenes enamorados, se amaban... pero aquello no alcanzó para los planes del destino. Jaebeom decidió irse sin más, para q...