El color del amor (LGBT) *Completa*

El secreto

El secreto

Julia se despidió de Abel discretamente y se dirigió a clase. En el pasillo se encontró a Lia y no pudo evitar contarle la noticia que había presenciado hacía apenas una hora. Estableció contacto visual con ella y comenzó a hablar.

-Abel y yo hemos pillado a Sergi y a André montándoselo.

-¿Cómo?

-Que sí que sí, que entramos en el aula de dibujo, miré hacia un extremo y los vi, ambos terminando de subir los boxers, supongo que nos escucharían y por eso les dio tiempo, que si no... Además tenía pinta de que ya habían pasado más cosas en esa clase en el recreo, antes de que llegáramos.

-¿Péro tú estás segura de que no malinterpretaste nada?

-Lia estaban en calzoncillos, no hay lugar a malinterpretación.

-Pero igual estaban empezando y al final como les interrumpisteis no hubo nada.

-Lia, estaban sudados, muy sudados...

-¿Y qué haces que no has ido a Jefatura?

-No voy a hacer eso.

-Pues si no lo haces tu lo hago yo, por muy amigo que sea Sergi, no puede hacer eso, tienen que castigarle de alguna manera.- Lia comenzó a caminar hacia Jefatura.

-¿Pero a ti que coño te pasa? Te recuerdo que no fue solo Sergi, André también estaba allí y es igual de culpable.-La cogió del brazo para retenerla.

-André no sabe la normativa del centro.

-André la sabe perfectamente, no creo que en Italia o en Francia dejen a los alumnos pirar clase para follar.

-Da igual, voy a avisar.-Continuó caminando.

-Y cuando te pregunten cómo lo sabes ¿Qué dirás, que el profesor de prácticas y tu mejor amiga se los encontraron cuando iban a hacer lo mismo? Estás perdiendo la puta cabeza por André.

-No lo entiendes.

-No, no lo entiendo, no entiendo cómo le harías una cosa así a Sergi por celos.- El tono de voz de la conversación se había elevado en gran medida desde el inicio.

-No iré a Jefatura, pero ten claro que no es ni por Sergi, ni por ti, es por el puto Abel de los cojones, porque si lo digo le jodo su futuro.-Mientras lo decía comenzó su rumbo hacia el baño.

-Lia, no se que coño te pasa últimamente, no se si es André o cualquier otra cosa, pero no sigas así, no sigas por ese camino.

-Iré por el camino que me dé la puta gana.-Gritó, sin mirar atrás, dejando a su amiga sola en el pasillo.

Lia tampoco sabía lo que le pasaba, simplemente tenía rabia por dentro, todo el tiempo. Suponía que todo era culpa de lo que sentía por André. La mataba por dentro ser su amiga y no poder ser nada más, por mucho que lo deseara. Era el hombre perfecto, guapo, atento, chulo y lo tenía todas las mañanas, abrazándola, hablándole, guiñandole el ojo. Lo odiaba y lo quería a la vez por hacerlo. Por eso fue al baño el baño, porque no quería que nadie la viera llorando, por eso André la vió simplemente lavándose la cara cuando se dirigía a clase y no se dio cuenta de que en realidad lloraba.

Trás la discusión Sergi no volvió al instituto, se marchó y fue caminando hasta su casa. Cuando llegó su madre le preguntó que porqué lloraba y le contó todo lo que había pasado. Para su madre Sergi salió del armario y perdió la virginidad en la misma conversación. En cuanto llegó a la parte por la que había discutido con André volvió a echarse a llorar. Su madre estaba tumbada en la cama y él sentado a la altura de sus rodillas.

-¿Tú le quieres?Aunque sea un "chulo" y un "prepotente de mierda", como tu dices ¿Tú le quieres?

-No se mamá.

-Pues es muy simple, si no le quisieras, no estarías llorando por esto.

Ese día dos personas lloraron por André Vidas, las dos le querían, ninguna quería aceptarlo.

-¿Y qué hago? No paro de joderla mamá, no paró de confundirle.

El problema que tenía Sergi era que tenía tanto miedo a no ser suficiente, a perder a André, que realmente tenía miedo a ser el mismo.

-Dile que le quieres.

-¿Y si no soy suficiente para el?

-En todo caso él no será suficiente para ti.- Sergi no respondió, se tumbó en la cama con su madre y durmió hasta que se despertó cuando su hermano le pidió ayuda para preparar unos macarrones. Ya quedaba poca comida en la nevera, y poco dinero para rellenarla.

André no terminó el cigarrillo, tras el comentario de Sergi se le habían quitado las ganas. Esperó pacientemente frente a la puerta del instituto hasta que comenzó la siguiente clase. Entró 10 minutos antes y vio a Abel bajando las escaleras con Julia. Cuando sonó la campana y ya se dirigía a clase la directora le llamó y a André se le paró el corazón. Respiró tranquilo cuando simplemente le pidió firmar un par de papeles de convalidación de expedientes académicos. Se retrasó simplemente un par de minutos y cuando retomaba su camino a clase se cruzó con Julia, sola en el pasillo y vio de reojo a Lia lavándose la cara en el lavabo.

Aunque intentaba aparentar lo contrario, no paraba de darle vueltas a su discusión con Sergi. No comprendía la reacción repentina de su compañero, el solo buscaba ser sincero. Quizás se había pasado, reflexionando comprendió que se podría haber callado la parte de "No ha sido el mejor polvo de mi vida". Pero por otra parte se había abierto a Sergi como a nadie con la parte de "pero sí el más bonito, y probablemente el más importante". No entendía por qué solo se había fijado en la primera parte de la frase. No sentía que tuviera que pedirle perdón, tampoco estaba orgulloso de lo que había dicho.

Comieron los macarrones que su hermano y el habían preparado. Su madre por fin había salido de la cama, la notaba cansada, triste, Sergi suponía que habían entrado en una especie de depresión después de haberse enfrentado a una situación tan dura como la que había vivido con su padre, pero poquito a poquito veía como con descanso y espacio iba mejorando, era muy fuerte. Estaban sentados los tres en el salón, viendo "Amar en tiempos revueltos" en su pequeña tele, costumbre que tenían de pequeños y habían perdido con el tiempo.

Sergi no sabía que hacer. No sabía si debía ser él el que pidiera perdón o por el contrario debía de hacerlo André. Su comentario le había sentado como una patada en el estómago. Intentó hacerlo todo perfecto, intentó hacer todo lo que André le pedía y sin embargo no le había gustado, mejor dicho "No había sido el mejor polvo de su vida". Sin embargo por otra parte, tras pensar en todo lo ocurrido también se sentía mal, la segunda parte de la frase que André había dicho, la de "pero sí el más bonito, y probablemente el más importante" (esa que casi no había escuchado de lo enfadado que estaba) sabía que había supuesto un gran esfuerzo para André. Era una de las personas más orgullosas que había conocido y suponía que un comentario así no lo decía con facilidad.

-Ya estás tardando.-Dijo su madre mirando hacia a su hijo mayor.

-¿Qué dices mamá?.

-Levanta el culo del sofá y dile a ese niño rico Italiano que le quieres.-Sergi se alegraba de que a pesar de todo su madre no hubiera perdido su sentido del humor. Ese comentario fue la señal para hacer lo que llevaba toda la tarde pensando. Se levantó enérgicamente y le dio un beso en la mejilla.

-Gracias.-Dijo y salió corriendo por la puerta.

-¿Qué le pasa a Sergi?-Preguntó su hermano pequeño cuando se marchó.

-Está enamorado.-Respondió su madre.