Segunda parte de: ¿puedes verme?.
Si no has leido la primera parte te recomiendo que la busques en mi perfil, ya que podrías no entender.
"Existe un tu y una yo en este mundo" esas fueron las últimas palabras que Raito escucho de ______.
.....
"¿Cr...
Entramos al cuarto que se me había asignado y me había acostado. -disculpe- habló el segundo hijo -estoy enterado de su...condición y sus médicos me pidieron que llegando le realizara un chequeo- dijo. -que sea rápido- dije sin prestar atención.
Le di la espalda y me retiré la blusa.
Narrador normal.
Reiji miró su espalda un poco sorprendido.
Le retiró lentamente la venda ensangretada. Por primera vez no sentía nada al ver sangre, llevó el vendaje a su nariz y lo olió sin que la pelinegra lo viera.
No olía casi a nada. Y para un humano eso quiere decir que tiene una grave desnutrición.
Inspeccionó su espalda detalladamente, la chica tenía varias cicatrices, parecía que anteriormente eran cortes.
La chica se abrazó a si misma, provocando que el vampiro saliera de sus pensamientos. -está muy delgada- dijo sin pensar, a lo que la chica rió con sarcasmo. -¿ya terminó?- preguntó ______. -solo le pondré un vendaje limpio- dijo.
.......
Narra ______.
Reiji salió del cuarto dejándome sola.
Los rayos del sol comenzaron a salir, me recosté sobre la cama y me quedé mirando el techo y cerré los ojos, comenzaba a tener sueño.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
........
Escuché unos golpes suabes en la puerta.
Me puse de pie rápidamente. -¿está despierta ______-san?- escuché la voz de la rubia. -VOY- dije y me puse una camisa larga que me llegaba a la mitad de las piernas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Abrí la puerta y me encontré con la chica y varios de los chicos. El albino al ver lo que solo traía piesto, desvió la mirada un poco sonrojado. -¿qué pasa?- pregunté. -siento si te despertamos- se disculpó- Reiji-san te manda esto- me entregó una botellita de cristal con un contenido sospechoso. -¿qué es?- dije dudosa. -es un suero que te permitirá adaptarte inmediatamente al cambio de horario- sonrió.
Sentí una mirada fija y levanté la mirada, chocando con esa mirada esmeralda que siempre me sigue.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Bajé la vista unos segundos después. Miré la botellita. -¿cuántas calorías tiene esto?- pregunté.
La rubia me miró confundida. -¿calorías?, ¿cuentas las calorias?- preguntó.
