Love Match | Park Jinyoung

01.

Pasé ambas manos sobre mi falda escocesa, mientras esperaba que la maquina de café terminara su trabajo. A mi alrededor, el aroma del delicioso líquido oscuro se extendió por toda la habitación, transportándome a casa, donde mi madre prepraraba el desayuno para todos. Aquel recuerdo me trajo un poco de calma en medio de mi primer día de trabajo en JP Technology, la compañía que, de la misma forma inesperada en la que había surgido, se había posicionado entre las mejores de todo Corea.

Trabajar allí no había estado entre mis planes, de hecho, lo único que sabía de ellos era que habían sido los que lanzaron al mercado Love Match, una aplicación que, en base a las conversaciones que tenías con otras personas en ella, te prometía encontrar a la persona correcta mediante un algoritmo creado por su CEO.

¿Siquiera era posible? Pues mucha gente se lo había creído y, por lo bien que les estaba yendo, parecía funcionar.

Cuando imaginé mi vida en la mitad de mis veintes, pensé estar en otro lugar, en uno muy, muy lejos de una compañía de tecnología. Pero dados los recientes acontecimientos en mi vida, me había obligado a mí misma a salir de mi zona de comfort y probar algo completamente diferente.

Tal vez exageré con lo de diferente.

- El CEO es un poco pesado, así que debes prepararte para lidiar con él. - me había dicho la joven encargada de mi recorrido de bienvenida y, sin poder explicármelo, sus palabras se habían quedado resonando en mi cabeza.

No sabía cómo era el CEO, jamás le había visto en persona, pero ya me daba cierto miedo.

La maquina de café emitió un suave pitido, anunciando el final de su trabajo, y me apresuré a retirar la taza de mi nuevo jefe para poder añadirle un poco de azúcar. No estaba segura qué tanto de esta debía utilizar, pero fui por lo seguro: una sola cucharadita.

Mientras removía el café, un hombre de traje impecable entró a la cafetería con ambas manos en los bolsillos de su pantalón negro, del mismo color que su cabello, y al darse cuenta de mi presencia, asintió levemente a modo de saludo sin mayor expresión.

Tenía una de esas miradas que podrían doblegar a cualquiera y con cada paso que daba, parecía expirar superioridad y seguridad por todo el lugar.

- Buenos días. - saludé, mientras volteaba a las gavetas, en busca de una pequeña bandeja para llevar todo.

- ¿Eres la nueva secretaria?

- En persona. - dije, atreviéndome a sonreírle.

Pero el hombre no respondo mi gesto. Por el contrario, apretó sus rosados labios.

No parecía ser de los que mostraban muchas emociones, algo extraño para alguien que trabajaba en la compañía que creó Love Match.

- Soy Kang Eun Bi. - añadí, intentando suavizar el ambiente, intentando mostrar mi lado extrovertido y confiado, y no la Eun Bi que luchaba por mantenerse cuerda en su primer día de trabajo.

- ¿Es para el CEO? - preguntó, evitando presentarse, evitando darme su nombre.

Qué extraño, pensé, pero preferí no decirlo en voz alta.

El recién llegado tomó asiento del otro lado de la barra para poder ver de cerca lo que hacía. Le vi apoyar los codos para poder inclinarse ligeramente y luego, volver a su sitio como si nada pasara.

Debía ser supervisor de algún área. Seguramente de allí había obtenido la maña de revisar todo.

- Sí, me dijeron que todas las mañanas debo llevarle una taza de café. - el hombre asintió. - También me dijeron que debo ser cuidadosa con él porque es bastante especial. ¿Algún consejo para mí?