¿Cerezas? o ¿Naranjas?; omegaverse Aristemo.

¿Los veremos juntos?

Narra Aristóteles:

-¡Ari! ¡El desayuno está listo!.- Gritó Julieta haciendo que volviera ala realidad diciéndole adiós al mundo de los sueños, con pereza me enderece en la cama estirando mi cuerpo como un gato para después ir al baño a cepillarme los dientes y limpiar mi rostro, cuando acabe me dirigí al comedor a desayunar.

-Buenos días, provecho a todos.- Me senté frente a Julieta quien se encontraba cargando sobre su regazo a Blanquita para que Robert le diera de comer.

- Y ¿Dave!.- Pregunté tomando el tenedor para encajarlo en la fruta frente a mi.

- Se está cambiando, en una hora nos vamos Ari.- Asenti continuando con mi desayuno.

Hoy era el campamento de la escuela, más que un campamento era para las actividades deportivas de los equipos de la escuela.

Aún así decidieron que podía ir toda la institución para que también fuera una pequeña convivencia tanto familiar como escolar.

Por mi no había ningún tipo de descontento, al contrario, estaba feliz de poder compartir tiempo con mis primos y con mi lindo omega.

Una alegre sonrisa transformó mi rostro por recordar los labios perfectos de mi omega, esos labios que vivían humectados por bálsamo.

- Y ¿Esa sonrisa?.- Pregunto Robert haciendome ojitos.

-Ay, primo me tienen bien amarrado.- Mi primo se echo a reír contagiando a Julieta.

-Me encanta que seas feliz Ari.- Felicito Julieta limpiando el rostro de Blanquita quien se había ensuciado. 

-Gracias July, aunque; hay algo que me preocupa.-

-Ari, te he causado tantos problemas ; tu papá te corrió de tu casa, tu familia te mira mal, en la escuela tus amigos ya no te hablan. Soy un error en tu vida, sólo pierdes el tiempo al amarme.- La voz de Temo sollosando daba vueltas en mi cabeza.

-¿Por qué estas preocupado?.- Pregunto Robert interesado por mi respuesta.

-Temo piensa que es su culpa todo lo que está pasando.- Tome con el tenedor el último pedazo de fruta picada y lo lleve a mi boca.

-Deberias hacer algo especial que lo haga sentir mejor, un picnic por ejemplo; aprovecha el lugar al que vamos y haz algo que jamás olvide.- Aconsejó Robert mientras Julieta lo miraba enternecida, esos dos eran sumamente románticos.

-¡Es una excelente idea! ¡Muchas gracias!.- Tome mi plato para ir a dejarlo al fregadero y después corrí a mi cuarto para llamar a mi omega.

Marque su número y el timbre de espera sono dos veces para luego intercambiarse por la voz de mi novio y de fondo los gritos de Pancho y las calcomanías.

《¿Mi amor》Pregunto Temo ala bocina de su teléfono.

《¿Hablo con el niño más lindo? ¿El omega más adorable?》Escuche su risa delicada por la bocina lo que me alegro la mañana.

《Ay amor, ¿Qué pasa?》

《Te tengo una sorpresa》 Anuncie antes de que los gritos de las calcomanías nos dejarán sordos a los dos.

《¿Enserio? Pero que te parece si me platicas en persona, mi Papancho necesita ayuda para bañar a los mellizos》 Sonreí imaginando la escena mientras mi lindo novio colgaba el teléfono.