Narra Aristóteles:
Si me pidieran describir lo que siento mientras miro a Temo ser ingresado a urgencias, diría que siento miedo, mucho miedo.
No era la primera vez que le miraba inconciente encima de una camilla, no era la primera vez que veía su rostro teñido de rojo o el cuerpo repleto de moretones verdes y morados.
Era la segunda ocasión en que sentía esta asfixia, este dolor, esta repugnancia, este deseo insufrible de hacer pagar a quien sea que le haya hecho esto.
Lo único que cambió es que ahora se quien lo hizo, y no descansare hasta que pague las ultimas consecuencias.
No entendía lo caprichoso que era el destino, realmente no lo hacía, nos unía y nos dejaba amarnos, y luego viene y nos hace tropezar.
Es simplemente ridículo, rendirse sería mas eficaz.
Pero el dejar de luchar por miedo a caer es de personas cobardes, quienes no se atreven a ofrecer un poco mas solo por tener lo que desean, lo que anhelan.
Y yo jamás me rendire.
Asi tenga que pelear contra viento y marea a capa y espada si la circunstancia me lo pidiera, batallaria contra el mundo si así mi Temo lo quisiera.
Y si no es suficiente que baje Dios y lo vea.
Sencillamente el amor que sentía por mi pequeño Temo era mas fuerte que todo el daño que nos querían causar.
Juntos somos invencibles, capaces de derrotar a cualquiera que se interponga, nuestros corazones marchan en compas dispuestos a vencer contra la adversidad.
Y el corazón nunca se equivoca.
Pancho llegó al poco rato totalmente intranquilo, intente explicarle la situación, decirle que había sido un inutil para protegerle me hacía querer vomitar.
Sin embargo Pancho sonrió y me abrazo tranquilizando mis nervios.
-Se que lo hubieras hecho polvo, Temo aveces es terco. Tranquilo, él estará bien.- Sabía que Pancho estaba molesto, pero confiaba en sus palabras, sabia que esta vez el mal no ganaría.
Pero solo estaría tranquilo hasta que Temo estuviera entre mis brazos.
Al poco rato salió él doctor diciendo que solo había sido el dolor lo que había ocasionado la inconsciencia, por lo tanto no era nada que pudiera repercutir contra su salud, en contraste, los golpes habían inflamado sus costillas pues la sensibilidad que dejo la caida las había dejado propensas, Pancho pregunto que si era peligroso y el doctor solo dijo:
-Solo necesita reposar, se pondrá bien.- Si dijera que el aire no regreso a mi cuerpo, estaría mintiendo.
Él doctor nos dio unas cuantas indicaciones mas y nos dijo que podíamos pasar a verlo.
Ambos pasamos, cruzando las conocidas puertas blancas y ingresando a su cuarto.
Temo estaba acostado, mirando hacía la ventana, al crujir de la puerta volteo y sonrió.
-¿Saben? Podría acostumbrarme, después de todo aquí me llevan la comida a la cama.- Pancho y yo reímos.
-¡Chamaco este! ¡No me vuelvas a asustar así!.- Pancho lo abrazo y Temo río en sus brazos.
Todos salimos del hospital con un aire tranquilo, subimos al auto en silencio.
Cuando llegamos al edificio Pancho se quedo afuera platicando con mi mamá mientras nosotros sabíamos a descansar a su departamento.
Cuando estábamos a punto de dejarnos caer sobre la cama de Temo, él susurró.
-No quiero que le hagas nada.- Yo le miré airado por lo que me estaba pidiendo.
-¿Cómo no quieres que haga nada Cuauhtémoc?.- Él me miró, con sus ojitos tristes.
-Es solo que ya estoy cansado, de todo esto, es demasiado, si peleas, esto nunca tendrá fin.- Le miré.
Me hice a un lado en la cama y le indique con los ojos que se acostara junto a mi.
Él se recosto junto a mi y nos miramos el uno al otro.
-Cariño, yo también estoy cansado; pero pasar por alto las injusticias hace que las personas malas crean que pueden seguir haciéndolas.- Él tomo mi mano.
-Lo se, pero solo quiero que esto termine.- Entrelace nuestros dedos.
-Y va a terminar, y aunque continuara mil años, solo quiero que sepas algo.- Él alzó sus ojitos hacia mi.
-Tu siempre vas a ser mi corazón.- Él sonrió.
-Y el corazón nunca se equivoca.- Dijimos al mismo tiempo.
Temo se acerco y se recosto sobre mi pecho mientras yo acariciaba sus cabellos.
Si el mundo quería caerse sobre nosotros, nosotros estábamos dispuestos a soportarlo.
--------------------------------------------
Capítulo cortito y bonito. La verdad si me gustó.HOLAAAA DE NUEVO, si soy yo y no, no he muerto. Aquí ando.
Una enorme disculpa por haber tardado tanto pero ya, todo está avanzando.
Pronto sabremos en que va a terminar esta historia. Besitos.
Con amor, Litzy.
ESTÁS LEYENDO
¿Cerezas? o ¿Naranjas?; omegaverse Aristemo.
Fanfiction¿Por qué tu olor me es tan relajante? ¿Por qué tus ojos son tan profundos? ¿Por qué cerezas? ¿Por qué naranjas? ¿Por qué tu? ////////////////////// Los personajes son propiedad de Televisa, la trama es totalmente mia. Espero les guste. ¡Arriba A...