Jamais Vu (Taehyung)

Capítulo 1 Prólogo

Estás vivo, tienes que vivir

Narrador Omnisciente

Era un lunes cualquiera, habitual como siempre, Taehyung, un chico de dieciséis años, acompañaba a su madre para comprar los víveres, llenaban el carro del mercado pero hoy no fue el caso por no estar lleno como acostumbraban.

Su madre le dijo durante un mes que las compras se limitarían a un porcentaje pequeño, pues el trabajo de papá no era tan bueno como antes, y había que dar una mano de algún modo. La mujer pagó a la cajera, una conocida de ella, las dos se veían seguido, la señora Kim era una mujer muy querida en Seúl.

Taehyung- Mamá, dame eso, está muy pesado.- Le pidió a su madre quién llevaba un carrito pequeño de esos que transportan a todos lados.

El auto se descompuso, por lo que caminar era la única opción, o pedir un auto, pero como se dijo antes, no hay demasiado dinero.

Mamá de TH- No te preocupes hijo, puedo con esto, no es nada a comparación de lo que comprábamos antes.- Riendo.

Taehyung- No me moveré de aquí hasta que me des ese carro.

La mujer viró los ojos con una juguetona sonrisa de madre, Tae se comporta igual que un niño, pensó.

Mamá de TH- Bien, pero si antes me dejas hacerte cosquillas.- Alzó las manos en su dirección.

Taehyung- ¿Qué? No mamá, estamos en la calle, aléjate.

Mamá de TH- Oh, ¿Temes qué una niña te vea? Ven aquí.

Taehyung- Mamá, me niego a hacer este tipo de escenas.- La señora se limitó a besar la mejilla de su hijo.

Mamá de TH- Vamos.- Miró para ambos lados y luego se detuvo tocando el bolsillo de su abrigo con preocupación.

Taehyung- ¿Qué sucede?

Mamá de TH- Olvidé mi billetera en el mercado.- Parados en la vereda- Ya vuelvo, ve cruzando la calle si quieres.

Taehyung- Ay, Dios, cada vez más vieja.

Mamá de TH- Mocoso, cruza.- Demandó, se giró sobre sus talones para volver al negocio.

El joven obedeció a su madre, y lentamente caminó cruzando la calle, riendo por dentro porque tenía una excusa para molestar a su madre por lo olvidadiza que es. Y en eso, un estruendo, un golpe, a sus espaldas, dio un salto por el mismo susto del impacto, al voltearse...

Taehyung- ¡¡Mamá!!- Corrió hacia la mujer que tendida estaba en el suelo- No, no, habla.- Tomó su cabeza y la recostó en sus piernas- ¡¡Ayuda!! ¡¡Llamen a una ambulancia!!- Gritaba, pronto la gente se acercaba al chico, algunos marcaron inmediatamente a las autoridades.

Un auto  atropelló a su madre, la tragedia puede cambiar tu vida en un mili-segundo, puedes reír y al otro llorar como si el mañana no existiera, como si fuera tu último sentimiento por usar. 

Y los días pasaron, un muchacho apresurado fue apresado y sentenciado por la muerte de la señora, hubo justicia, pero no la que un espíritu necesitaría. Esa familia de tres no volvió a ser la misma, no rió, solo lloró y lloró por un alma ausente.