Me denfendí. Y quedé como si me hubiera pasado un tren de mil vagones por encima. En el momento no me di cuenta. La adrenalina me dejó bien arriba pero con el correr de las horas me fui desinflando como un globo viejo. Sí, está buenísimo empezar a defenderte pero es porque alguien te ataca, y no está bueno que nadie te ataque. Mi imagen saliendo eyectada, casi pateando la puerta del cubículo, a enfrentar a las tres yararás, se me repitió sin pausa toda la tarde y pasé de verme casi heroica a ridícula. ¿No había sido demadiado? Si no entraba Rosario, ¿qué hubiera pasado? Además, ¿qué iba a pasar a partir de ese momento? Si me la cruzaba sola, ¿qué podría pasar? Me fue dando miedo. Miedo de las otras. Pero miedo de mí. ¿Me hubieran pegado o hubiera llegado a pegar? Mi cabeza desatada. Al pasar las horas empecé a pensar que hubiera sido infinitamente mejor quedarme adentro del baño, esperar a que se fueran y comerme la bronca, que me estallara la bronca adentro. Nadie se hubiera enterado, bueno, Rosario, y hubiéramos planeado mil venganzas. Pero ya estaba harta de planear y no hacer nunca nada. Y no me había vengado. Me defendí. Una vez. En muchas veces.
Y se había enterado todo el colegio. Me di cuenta porque hace un rato me llegó un mensaje de León.
Veo que vas entendiendo el concepto de "hablar"
Y como no le respondí, aunque me dio risa, al rato me escribió otra vez:
¿Cuándo nos vemos?
No le contesté.
Porque más allá del tren con mil vagones, lo que me estalló en el centro del cuerpo fueron cada una de las palabras de Veneno, y mis posibles ramificaciones, desde que soy obesa hasta que no entiende qué me ven. Obesa no soy. Y tampoco le voy armar una guía ilustrada de mis virtudes. Pero además, ¿qué le pasa con los obesos? ¿Le dan asco? ¿No son personas? Me indigna. Me da tanta bronca. Porque ese pensamiento, el de ella, es el de muchos en el colegio. Es el de muchos en todos lados. Y si no cómo se explica lo de Simón. Si hay algo de lo que no quiero dudar es de que Simón gustaba de mí. Era obvio. Y que algo le dio rechazo. A veces pienso que es por ese pensamiento. ¿Cómo Simón va a estar con Rafaela? Es imposible. No importan un carajo los sentimientos. Pero esas que parecen clones, esas encajan. Y León. Lo de León confirma todo. Saquemos a León y a mí del dibujo. Un chico, una chica. Chico lleva a chica al mar. Chico va a la casa de chica a ver una serie. En el mundo real, chica ya besó a chica día uno. Pero en un mundo Rafaela, es imposible. En este mundo, León hace todo eso y quiere ser mi amigo. Porque es imposible pensar que León va a besarme. Va a terminar besando a la compañera de curso de Simón con la que lo vi hablando la otra vez. Esta película me la sé de memoria. La vi mil veces. Es más, posiblemente por eso no haya querido que fuéramos juntos a bailar. Todavía no tiene muchos amigos, la pasa bien conmigo, mejor estar solos en una casa a que nos vean juntos en el boliche. Y me es imposible pensar que alguien como él pueda gustar de alguien como yo. Parece que es ofensivo y, a la vez, es inofensivo estar conmigo. Y Simón ahora se acerca porque mal pibe no es, ya bastante con lo que él hizo como para que veamos la segunda parte, en la que aparece otro y hace exactamente lo mismo. Como si no ser como se espera también me hiciera visible. Ante los otros. Y ante mí. Y eso, eso, de todo, es lo peor. Y como esta película ya la viví no le contesté a León. Lo que menos necesito es que León también desaparezca. Como va a desaparecer Simón. Como va a desaparecer papá. Ahora vino por un mes y medio pero después se va, ¿quién me garantiza que no vaya a desaparecer otra vez? No sé cómo se hace para volver a confiar. Para que cuando se van no duela tanto. Para exponerse igual.
Ya lo decidí.
No voy a ver a papá.
soy muy pesada escribiendo acá pero al pasar este capítulo me llevó a cuando estaba leyendo esto y como me sentía en ese momento. Por eso siento la necesidad de decir: tengan en cuenta que todo lo que se expresa en este capítulo es un pensamiento ¿autodestructivo?, no sabría como definirlo, pero no es una verdad, es un pensamiento de un personaje que básicamente en este momento está del orto ahre. Espero que se entienda lo que quiero decir u.u y otra cosa para agregar:
también teniendo en cuenta en mi momento leyendo esto, quiero decir que si en algún momento les agarra el bajon o simplemente quieren charlar de cosas random o lo que sea pueden mandarme un mensajito que yo encantada de hablar, que no les de vergüenza ahre.Muchas gracias por todos los comentarios lindos 💛💛💛💛💛💛
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Intermitente Rafaela
Teen FictionRafaela no quiere que termine quinto año, no sabe qué va a estudiar y teme que se desvanezcan los vínculos con sus amigas. Y a pesar de las ausencias de su papá y de Simón, y de que todavía se siente invisible para los demás, se empieza a dibujar a...