Relatos de la manada oeste.

¿Quiénes son los Jeferson?

Odiaba la maldita caja registradora.
Cada vez que tenía que devolver dinero me equivocaba.

¡Dios ! ¿En qué me hiciste bueno? , ¿Qué cosa puedo hacer bien sin meter las malditas patas al fondo ?

Solo quería coger mi maleta , tirar ese delantal amarillo feo y asqueroso sobre la cara de mi jefe y salir corriendo mientras lloriqueaba como un perrito al que acababan de pisarle su patita .

¡¿Qué pensaría Louis , Luca , mi familia ahora , después de que me habían llamado valiente?!

Suspiré.

Mi hora de salida estaba por ser marcada y los chicos que atenderían el segundo turno estaban por llegar , solo tenía que dar un par de sonrisas más y saldría de este infierno llamado " supermercado" .

Unos veinte minutos después estaba tomando mis cosas y haciendo mi sueño realidad.

¡Salir de aquí !

Justo en la zona de parqueo ví llegar la camioneta roja y algo cobriza por el óxido de mauro. " Su bebé" según él.

-¡Hey! Simón - llamó el hombre como si su presencia no fuera obvia , su llamativo auto , el ruido del motor y su olor ya era tan característicos para mí, que sabía que estaba camino aquí desde que salió de su casa.

Más o menos a unos treinta minutos de aquí.

El pueblo de Arcana, era lo más similar a un "centro " pues contaba con todos los servicios que se necesitaban para las haciendas alrededor, tiendas agropecuarias, alimenticias ,restaurantes , un hospital , el maldito supermercado y un pequeño centro veterinario.

Todo era pequeño pero funcional. Y gracias a la familia de mauro había logrado una vacante como cajero . Se los agradecía , pero enserio que sufría todos los días para llegar a mi "trabajo"

- hola mauro- saludé subiendo me al auto .

-¿Cómo fue tu día ?- preguntó.

- horrible, como siempre- respondí con una sonrisa. Mauro no demoró en soltar una carcajada.

- te apuesto a que no lo cambiarías por una vacante con la señorita ellis-

Temblé en mi asiento.

-prefiero mi jefe panzón- respondí

Mauro sonrió , esta vez un poco más pequeño.

- sé que no es lo mejor , pero fue lo más rápido , trataré de estar pendiente de alguna vacante...sabes bien que los empleos, sino son en las haciendas, son escasos por aquí - me informó mauro.

- si , lo sé, pero nunca en mi vida he estado en el campo , no tengo idea ni de como alimentar a una gallina , no creo que me quieran mucho en un lugar así sin experiencia- dije cabizbajo. Sentí la mano de mauro sobre mi hombro.

- ¡Vamos ! No te desanimes, te iremos enseñando en casa , hasta que aprendas lo básico y logres un empleo mejor remunerado -

- gracias mauro - respondí, y de verdad se lo agradecía , ellos ya eran muchos hermanos en su casa y no tenían ni espacio para un trabajador en su hacienda , ni mucho menos el dinero para pagar uno . Así que con el solo de hecho de aceptarme en su casa era más que suficiente.

- de nada y ¡vamos! - me dijo poniendo la primera marcha y arrancando - acompáñame donde el señor Antonio , necesito llevarle estos fertilizantes antes de que caiga el sol-

- si , no hay problema- respondí. Tomando mis auriculares y dejando la música en el volumen mínimo.

¡mínimo si no quería tener rotos los tímpanos!