La partida

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La semana que pasó después de el gran suceso ,como comencé a llamarlo, fue la más lenta y a la vez la
más rápida de toda mi vida. Después de todo lo que pase ,después de las carreras , la tensión, las peleas y los odios , el regreso a casa y los abrazos, la discusión y la revelación, lo que sucedió después no hubo forma de explicarlo. Fue como estar en un limbo de pensamiento y en una carrera de sentimientos.

Lo que sentía no correspondía con lo que pensaba. Veía a Dave y estaba en ceros , sin saber que decir ,que pensar o decidir. No tenía idea de que hacer , el dolor me cubría en su mayoría pero a la vez podía entender perfectamente a Dave. Por primera vez podía entenderlo.

Y eso me llenaba de emoción.

Si, sabía que estaba siendo bipolar , pero no tenía idea de como volver a ser yo mismo. Estaba perdido.

Dave había estado, si podía decirlo, en la misma sintonía, estaba metido al cien por ciento en su trabajo, haciendo pruebas , procesando la cura , haciendo cálculos con Andrei. Su mente estaba en lograr sanar a Peter , dejando a un lado todo lo relevante a mi persona.

Siempre ocupado y con la mirada perdida en más de una ocasión.

Por ello decidí hacerle más fácil el trabajo de no verme muy continuamente. Pero era solo cruzarnos una sola vez ,vernos una sola vez para que todos los sentimientos de aquella noche salieran a flote. Las heridas seguían sangrando. Las heridas del alma seguían frescas.

Y lo peor , era que toda mi familia parecía saberlo. Nadie había dicho una palabra. Pero sus miradas lo decían todo. Era lógico, los gritos de aquella discusión habían sido imposibles de no oír. Tal vez algunos detalles no fueron revelados. Pero lo sustancial quedó.

El gato había salido de la bolsa y todos sabían que mi pareja era Dave y que lo nuestro no iba a suceder nunca.

Cosa que también me llenaba de rabia ,aunque son mi familia y los amo con todo mi corazón, odiaba con igual fuerza que me mirarán con lastima. ¡No lo soportaba !

No soportaba a nadie , nisiquiera a mi mismo ,cuando me veía al espejo , sabía que veía a un hombre con los ojos llenos de lastima por si mismo. Y eso no lo toleraba . ¡No podía !

Pero...¿Cómo me quitaba el dolor ? ...el dolor por Dave, el dolor por querer quitarle su dolor y no poder.

Una semana entera había pasado y la gran prueba para Peter había sido aplicada esta mañana , exactamente a las seis en punto de la mañana. De eso había pasado más de doce horas y hasta el momento Peter no había enfermado, seguía hablando como cotorra y su olor efectivamente había mermado considerablemente.

Simón era en este momento nuestra prueba para detectar el olor y la mutación. El chico había confirmado el cambio en la producción de veneno en su sangre y todas las pruebas que Andrei estaba analizando cada dos horas no daban signos de otra mutación o de no estar funcionando. Por el contrario , parecía funcionar por lo que escuchaba de las palabras del ruso.

Habían creado una cura para una enfermedad que hasta el momento no había existido. Le estaban regalando vida a Peter y vida a Mike.

De ser así mi hermano podría morder a Peter  y completar su unión como una pareja consolidada y completa.

Y aunque sin ningún diente de por medio todos lo sabíamos ya. Eran simplemente formalismos que nuestra especie anhelaba. Que seguramente la naturaleza lupina de mi hermano añoraba.

Miré al fondo de la hacienda , el cielo se veía gris y el ruido de algunos truenos se hacían presentes en mis oídos. Junto con el viento fuerte que anunciaba una de las primeras tormentas para la temporada más dura que cada año se hacía presente en el oeste.

Relatos de la manada oeste.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora