capitulo 9

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No se cuento tiempo llevo aquí parada viendo mi reflejo en el espejo del baño de mi oficina, nunca antes había sido tan consiente de mis cambios físicos como en este momento, se que he cambiado, es algo normal después de cinco años, pero el tener a Charly de vuelta en mi vida de alguna forma, me hizo notar mas todos los cambios que a sufrido mi cuerpo, ya sean para bien o para mal, es algo extraño.

-pero que tonta- le digo a mi reflejo reteniendo el impulso de retocarme el maquillaje y salir al pasillo a ver si el aun sigue aquí. Por dios, ya no tengo diecinueve años como para seguir queriendo llamar su atención y eso es algo que me hace enojar conmigo misma, la forma en la que estoy reaccionando a su presencia, es como si mi cuerpo se hubiese olvidado de lo que me hizo, como si ya no le importara y solo quisiera estar cerca de él. Desde que sé que está aquí no he podido sacármelo de la cabeza y eso me frustra bastante.

Me lavo las manos para no sentir que entre al baño solo para perder mi tiempo. Me quedo paralizada por un momento al verlo parado frente a mi escritorio mirando la única foto que tengo en la oficina, es una en que salgo con Ethan, fue tomada el día en el que nos hicimos socios, fue el quien la puso aquí. Me aclaro la garganta para llamar su atención.

-¿Qué haces aquí?

-siendo sincero, no lo sé- bien, no se que hacer con eso. Recorro la distancia que hay entre los dos y me siento detrás del escritorio, siempre me siento mas segura estando sentada aquí y en este momento eso es lo que más necesito, sentirme segura a pesar de que todo mi mundo se está desequilibrando.

-nunca me imagine que fueras hermano de Lucas- digo como si tal cosa.

-él y yo no tenemos la mejor relación de hermanos, por eso me sorprendió cuando me invito a venir.

-lo sé, algo me comento, sin embargo, el esta dispuesto a arreglar las cosas entre los dos, por eso te busco en primer lugar.

-lo sé y yo también estoy dispuesto a hacer que las cosas funcionen.

-me alegra escuchar eso, a él le hace mucha ilusión esto.

-no sabia que ustedes se conocían.

-Melissa y yo hemos sido mejores amigas desde que yo tenia nueve, nos distanciamos cuando ella se fue a estudiar a parís, hace un año, mas o menos, nos volvimos a encontrar y ella me presento a Lucas.

-y ahora organizas su boda, por lo que tengo entendido.

-sí, así es- en ese momento la puerta se abre de repente, Melissa se queda parada con el pomo de la puerta en su mano, mira entre Charly yo como si estuviera viendo un juego de pingpong, realmente estaba sorprendida de verlo aquí- ¿te vas a quedar ahí todo el día?

-eh no- dice entrando y cerrando lo puerta detrás de ella.

-yo ya me iba, hasta luego- las dos nos quedamos viendo a Charly salir de la oficina hasta que la puerta se cierra. Melissa me mira interrogante.

-me lo encontré en el pasillo, creo que es el abogado que esta llevando el divorcio de Laura- respondo su pregunta no formulada.

-¿querías hablar conmigo?- avanza hasta sentarse en uno de los sofás, yo me levanto y me siento frente a ella en uno de los sillones que hay en la oficina.

-y con Lucas, sí.

-él no debe tardar.

-ya estoy aquí- canturrea mientras entra y se sienta junto a su prometida.

-bien, quiero hablar con ustedes, mas bien, quiero pedirles un gran favor.

-dinos ¿Cuál seria ese gran favor?- Lucas se veía realmente curioso, yo no solo pedirles favores. Suspire ¿Cómo iba a pedirles esto sin tener que revelar toda la verdad?

-no quiero que Charly se entere de que tengo un hijo- silencio, esa fue la respuesta a mi petición, los dos se veían un poco aturdidos- ustedes saben que el padre de Andrew no sabe que el existe y que prefiero que eso siga de ese modo. Charly conoce al padre de mi hijo y si él se entera...

-lo mas probable es que se lo cuente- concluye Melissa.

-si- le doy la razón, aunque esa no es la verdad, bueno en parte lo es, más o menos.

-entiendo, pero ¿Cómo piensas ocultar a Andrew todo este tiempo? Él se quedará hasta después de la boda y aun faltan algunos meses para eso. -Lucas no se ve muy convencido.

-aún no lo sé, lo primordial, por el momento, es que nadie le diga que tengo un hijo. Y no será tan difícil ocultar ese hecho ya que me he encargado de mantener mi vida personal lo mas aleada de los medios de comunicación y de los cotilleos en las fiestas a las que suelo asistir, son muy pocas las personas que saben que Andrew es mi hijo.

-esta bien, te ayudaremos en lo que podamos. ¿sabes que no estoy de acuerdo con que el padre de Andrew no sepa sobre su existencia?

-lo se Meli, pero tengo mis razones- o eso es lo que me gusta pensar.

...

-no estoy de acuerdo con esto- dice Ethan paseándose por mi oficina.

-Ethan- dice Camille en un tono de advertencia.

-no- dice callando a Camille- te quiero Shary y sabes que te apoyo en lo que necesites, menos en esto. La vida te esta presentando la oportunidad de quitarte un gran peso de encima si le dices la verdad a Charly, te esta dando la oportunidad de darle un padre a Andrew, su verdadero padre. Se lo jodido que es que te oculten que vas a ser padre- Camille se encoje un poco al escuchar esas palabras- y no pienso participar en un engaño como ese.

Suspiro con cansancio, sabía que sería más difícil convencer a Ethan, después de todo Camille también le oculto su primer embarazo cuando las cosas estaban realmente mal entre ellos dos, solo fueron dos semanas, pero para Ethan fue como si lo ocultáramos durante meses. sabía que él se sentía culpable de cierta manera el no decirle a Charly la verdad. Recuerdo que después de que se enterara del embarazo de Cami el llego a mi casa diciendo que iría personalmente donde Charly a contarle toda la verdad, no sé cómo lo convencí de no hacerlo, pero no se si esta vez pueda volver a persuadirlo para que no diga nada.

-Ethan, cariño, sabes que esto no es algo que nos corresponda decir a nosotros y si Shary quiere seguir manteniendo esto en secreto debemos respetar su decisión.

Ethan gruñe, pero sabe que en parte ella tiene razón, esto solo me corresponde a mi rebelarlo, este es mi secreto, mi cruz personal, ellos no tienen derecho a decir mi verdad, como tampoco tienen el deber de cargar con mi cruz y eso me hace sentir un poco culpable y egoísta, tal vez lo sea después de todo.

-odio cuando tienes razón.

-lo cual es siempre- dice con una sonrisa picara en su rostro, eso hace que Ethan sonría.

-entonces ¿me ayudaran?

-esta bien, pero sigo sin estar de acuerdo y escúchame muy bien Shary, un día de estos todo este engaño se va a caer y tendrás que sufrir las consecuencias.

-bu que pesimista- digo para ocultar el temor que me invade al escuchar sus palabras.

-solo te estoy advirtiendo- dice antes de salir de la oficina. Camille me regala una sonrisa alentadora antes de irse detrás de su esposo dejándome sola con mis pensamientos tormentosos.

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