capitulo 12

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Decir que estaba agotada es poco, los pies me duelen por estar la mayor parte del tipo parada con estos tacones, las mejillas me duelen de tonto sonreír y siento la cara un poco pegajosa por el maquillaje y el sudor. Miro la hora en el celular, son mas de las dos de la mañana, suspiro cansada, apoyo la cabeza en el respaldo del asiento, el taxista echa un vistazo por el retrovisor por unos segundos antes de volver a fijarla en el camino.

-a la izquierda, por favor- digo decidiendo ir mejor a quedarme donde Melissa, estoy demasiado cansada como para esperar otros veinte minutos de camino a casa. Le doy la nueva dirección al conductor.

Marco el número de mi amiga esperando encontrarla despierta, aunque es casi seguro que lo este, los sábados ella acostumbra irse a dormir tarde o salir de fiesta con Lucas.

-hola ¿estas tan borracha que ni siquiera puedes pedir un taxi como la otra vez? -su voz suena animada a pesar de que no esta de fiesta, lo se porque no hay ruido de fondo.

-no, hoy estoy sobria. Solo llamaba para decirte que me quedare contigo esta noche, no se si aguante hasta llegar a mi casa.

-claro que si preciosa, no hay problema, solo que vas a tener que dormir en el sofá, las dos habitaciones de huéspedes están ocupadas.

-¿otra vez sacaste del cuarto a Lucas?- dije frunciendo el ceño- ¿Qué hizo esta vez?

-nada, no es Lucas quien ocupa el otro cuarto, es Charly, él y Katherine no duermen juntos- dijo susurrando lo último.

-ah- no sabia que más decir- llego en unos minutos, deja la puerta abierta.

-si señora. Nos vemos ahora, besos- dijo antes de colgar.

Cinco minutos después llego al edificio de apartamentos, le pago al taxista, saludo al portero antes de entrar. Tal y como se lo pedí Melissa dejo la puerta abierta, en cuanto pongo un pie en el apartamento un agradable olor a pizza llega hasta mí. Todos se encuentran sentados en la sala viendo una película con varias cajas de pizza sobre la mesita de café y algunos vasos de cerveza y gaseosa esparcidos por el lugar. Dormir en el sofá, si claro, pensé con ironía.

-ya llegaste- dice Melissa emocionada- ven siéntate- palmea el lugar vacío al lado de ella, Lucas hace un puchero y se cruza de brazos, es evidente que ese antes era su puesto.

-en realidad preferiría ir a dormir.

-no seas aguafiestas, acompáñanos un ratito- junta sus manos como si fuera a orar y pone mirada de perrito regañado.

-está bien- digo con resignación, ella sabe que no me puedo resistir cuando hace eso- pero antes quiero quitarme este vestido y lavarme la cara.

-¿necesitas ayuda con el vestido? -dice Lucas con una sonrisa y mirada picara.

-no, gracias cariño, ahora no necesito ayuda, tal vez en otra ocasión.

-wow ¿Dónde quedo la Shary que conocía?- dice Katherine mirándome un poco sorprendida y no la culpo teniendo en cuenta que la última vez que nos habíamos visto yo era una niña asustadiza que nunca hubiera sabido como responder a un comentario como ese.

Solo me limite a encogerme de hombros y me dirigí al cuarto de Meli por ropa cómoda, solo esperaba encontrar algo que me cubriera las piernas y no algo que aduras penas me cubría el trasero, no sé cómo Melissa es capaz de dormir con esos diminutos pijamas con el frió que hace en Londres. Al final no encontré nada que me cubriera la suficiente para protegerme del frió ¿Dónde rayos había metido todos sus pantalones de yoga y sudaderas deportivas?

-¿Dónde están todos tus pantalones deportivos?- dije entrando en la sala, todos dejaron de prestar atención a la película para mirarme, tanto Charly como Lucas me recorrieron con la mirada, eso me hizo sentir un poco expuesta, desde que vine a vivir a Londres deje de usar este tipo de pijamas tan reveladores.

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