Capítulo 38

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[Entonces, así fue como lo conocieron… él siempre fue un chico amable, le gustaba ayudar a los demás.] (Marisa).

[Gracias a eso hoy estamos aquí, mi hermana y yo juntos nuevamente.] (Kyle).

[Mi padre solía contarme sobre el joven príncipe, pero nunca llegue a conocerlo me hubiese gustado conocerlo en diferentes circunstancias.] (Rom).

El carruaje ya se encuentra en movimiento, llevamos como unos veinte minutos desde que nos alejamos del lugar en donde los atacaron.

El hijo de esta pareja, Rom, un hombre de 27 años, cabello negro y corto, un cuerpo trabajado para un caballero, viste una camisa negra con un abrigo marrón claro, un cinturón negro y unos pantalones de cuero marrón oscuros con botas del mismo color, en su cintura descansa una espada de acero.

[Es increíble que un chico de esa edad, lograra detener a una diosa de un poder inmenso, sin contar de todas las vidas que salvo.] (Aylin).

Esta chica se llama Aylin, ella es la esposa de Rom y tiene 25; de cabello castaño claro con ojos marrones oscuros, un bello rostro y un esbelto cuerpo.

Viste un pantalón corto dejando a la vista sus largas y hermosas piernas las cuales terminan con unas botas marrones claras. En la parte superior viste una camisa sin mangas de color blanco con rayas negras verticalmente colocadas.

En su cintura descansan dos guantes negros con gemas incrustadas, por lo que me dijeron, son artefactos mágicos que potencian el poder de los golpes.

Ella junto a Rom se encuentran sentados en el frente del carruaje turnándose para tirar de las riendas de los caballos.

Dentro del vagón del carruaje, Allen estaba acostado en medio de todo con Snow a su lado, este último se había rodeado en una cobija echa de su propia melena, la verdad eso es nuevo para mí, los dos aun se encuentran inconscientes, en cuanto a la bola de hojas se encuentra oculta entre las ramas y hojas que cubren su cuerpo.

Yo me encuentro recostado a uno de los laterales del carruaje con May junto a mi mientras duerme y me abraza, por lo que vi al fin tuvo la oportunidad de dormir tranquilamente.

[Para mí eso también es sorprendente, yo no sabía de qué lucho contra una diosa… menos de que era un Adalid.] (Kyle).

[Jaja, si debe ser sorprendente, pero es la verdad, yo aun le debo la vida y no sabes que tan feliz me encuentro al saber que está vivo… aunque lastimado he inconsciente, pero vivo y eso es lo importante.] (Franco).

[Si, nosotros creíamos que él había muerte ese día, ya que cuando los caballeros fueron a una expedición, no encontraron rastros, pero su familia nunca perdió la esperanza de que aún estaba vivo, y nosotros también… es verdaderamente una muy buena noticia.] (Marisa).

La señora sonreía mientras lagrimas caían de sus ojos, mientras su esposo trataba de calmarla. Ellos iban sentados del otro extremo a nosotros.

Por lo que me estuvieron contando por bastante tiempo, es que ellos antes servían al antiguo castillo de Cairo, sirviendo a la realeza, ellos vieron crecer a los tres príncipes en ese entonces y siempre fueron muy unidos con los reyes.

Incluso tienen el permiso para entrar en el castillo de Velthania sin problemas si tienen problemas que no puedan resolver.

También me contaron que actualmente ellos trabajan como mercaderes, principalmente debido a que el señor Franco, ya no puede luchar como antes, las unas misiones, se rompieron sus vías de escape de maná por lo que no puede usar magia y menos su Skill, además de varias heridas extras que según los sanadores y sacerdotes que buscaron les dijeron que esos casos ya no tenían cura.

The Ice Demon: Cazador De Dioses.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora