Capítulo 2 [Sherlock]

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I ain't equipment, I ain't automatic
You won't find me just staying static
Don't you give me any orders
For people like me
there is no order

Bet you thought you had it all worked out
Bet you thought you knew what I was about
Bet you thought you'd solved all your problems
But you are the problem

"Problems" (Sex Pistols)


Después de una discusión por teléfono con su hermano, luego de que este encontrara cierto tipo de hiervas en su habitación, Sherlock se sentía harto de tener que oír la odiosa voz de Mycroft cada vez que le advertía que su consumo de drogas era algo estúpido e impensable para una persona con su capacidad mental, para un Holmes.

Sí, definitivamente estaba cansado de tener que soportar esos reproches solo porque Mycroft era el único que lo ayudaba cuando realmente se metía en problemas. Tener al gobierno británico como hermano mayor resultaba ser bastante beneficioso para él en algunos momentos.

Sherlock era consciente de que su hermano tenía razón, por Dios, Mycrfot siempre tenía razón, pero Sherlock simplemente no tenía ánimos ni siquiera para considerar aquellos consejos, él sólo quería elevar su mente lo más que podía y divertirse de vez en cuando con algunos excesos. Planeaba dejar esa vida en algún momento, eso lo tenía claro, pero no ahora, todavía quería sentir la adrenalina de los conciertos, el alcohol y las drogas mientras era lo suficientemente joven para hacerlo.

Con todas esas características, él encajaba con los típicos "chicos rebeldes" de la universidad, pero en realidad (e irónicamente) no frecuentaba con ninguno de ellos. En realidad, apenas tenía dos amigos ahí, Mike Stamford que era su amigo de años y Molly Hooper, a quien había conocido mientras resolvía un caso con la policía. Aunque los consideraba solo lo suficientemente eficientes, prefería estar con ellos que con algún idiota vestido de negro que solo pensara en sexo y drogas.

Jim (a quien había conocido desde que empezó la universidad) e Irene, dueña del bar que frecuentaba, eran los únicos "amigos rebeldes" que tenía, ellos habían resultado curiosamente interesantes para él. Y si no fuera porque Jim había dejado la universidad para hacer su propio negocio de venta de drogas, e Irene gastaba todo el dinero que le enviaban sus padres para invertirlo en su bar (teniendo a Jim como una especie de jale llamativo con la venta de drogas), Sherlock los consideraría aptos para entrar en su círculo de amigos íntimos... aunque, para ser sinceros, ese círculo de amigos solo contaba con Mike.

Se había pasado todo el día en la universidad para brindar sus exámenes y no importaba que tuviera las más altas notas en toda la universidad, él era un alumno casi inexistente, por lo que sus faltas (aunque no afectaban en todas las materias, pues él solo asistía a las que sí se consideraban las asistencias como puntaje) habían provocado que perdiera su derecho a elegir su horario. Consecuencia de eso, le habían asignado los más pesados.

Sumando a eso, no había recibido ningún mensaje por parte del inspector Lestrade, su mente se aburría demasiado con solo una ocupación a la vez. Apenas la noche anterior había dado un rápido repaso a las materias que daría examen ese día y eso era más que suficiente para su memoria fotográfica. Demasiado fácil para él.

Era oficial, luego de la discusión con Mycroft, Sherlock podía declarar ese día como un completo desastre. Su reloj marcaba las diez en punto de la noche, una hora temprana para él y su vida nocturna, pero ir al bar esa noche no era buena idea. Podía amar perderse entre la música y las drogas, pero él tenía sus reglas y estas decían estrictamente que no. Si quería acabar pronto la carrera para poder moverse donde quisiera y como quisiera sin tener que cargar con la familia sobre él, tenía que separar sus noches de excesos de los estudios.

Heartbanging [Punklock]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora