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Gaara

¡Estuve buscándote por horas! — Kankuro pega un grito al cielo que se pudo escuchar en todo el patio. Él era de esa forma y no puedo negar que antes sentía una gran molestia cuando hacía eso, pero ahora no podía sentir rencor con ello.

Como sea, a pesar de todo lo ocurrido en el pasado, siempre supe en algún momento que la privacidad era lo más esencial y que lo sería luego. Como ahora mismo.

Giré rápidamente evitando el contacto visual por un instante con mi hermano mayor. La sensación agradable estaba en su más deseoso cúspide y ahora en la nada como la arena misma.

Una sensación agradable que no entendía muy bien por qué sucedía de esa forma.

— ¿Qué es lo que pasa? — pregunto cuando él se acerca — Si es por el Consejo de Ancianos, ya estaba por ir, solo que debía hacer algunas cosas antes dé — concluyo dejando que mi hermano pueda ver a Matsuri para evidenciar que no estaba solo.

Matsuri...

Quien estaba temerosa y ruborizada cuando Kankuro llega a verla, tomando sus manos y viendo sus pies como ella solía hacerlo.

— Oh... — deja oír su asombro — Bueno... Espero no haber interrumpido algo... Personal — me codea con su risa burlona.

Sentí un poco de nerviosismo y con voluntad pude mantenerme sereno.

— No, nada de eso, hemos estado entrenando ya que no dejamos de ser instructores a pesar de la cuestión en medio, es más... ¿Por qué tú no estás haciendo lo mismo? — trato de mantener la seriedad del caso y Kankuro rápidamente vuelve a su postura habitual.

— En realidad ya hice mi parte, les di un descanso a los muchachos para que repongan sus energías, además, prometí acompañarte en esto — sonríe inmediatamente.

— Sabes que no es necesario —

— Pero para nosotros sí lo es — insiste Kankuro — Somos una familia — sus susurro a pesar de ser tan grave por su voz, resulta tan suave y doloroso para mí.

No sé cómo pude convertirme antes en ese perverso individuo hasta llegar formar lazos de odio con mis propios hermanos. Me alegro mucho que eso acabara.

— Gracias... — contuve el llanto que estaba asomándose para finalmente acercarme a él — Entonces vamos — camino unos pasos al frente.

— ¿Y no le dirás nada a tu alumna? — oigo en un tono de burla y preocupación.

Volteo para ver a Matsuri, pero no me salía ninguna palabra de en medio. Mas bien... Deseaba poder demostrarlo de otra manera.

— Luego nos vemos... — le dedico una sonrisa la cual es correspondida por ella y nos marchamos a la Torre.

Por el camino, Kankuro me comentó acerca de los problemas que hubo en la fiesta. Más específicamente sobre los alumnos de Temari.

Yo estaba pensativo, no quise involucrarme en ello; puesto que tengo otras prioridades como mi familia, la aldea, mis sueños y... Quizás alguna que otra persona más que no logro destacar del todo.

— ¿Y qué tal te va con Matsuri? — Kankuro me saca de la ensoñación para notar su enorme sonrisa sin perder su distancia.

— ¿A qué te refieres exactamente? — replico con curiosidad.

— Bueno, es tu única alumna... ¿Tuviste dificultades con ella?, ¿Alguna novedad?, ¿Te agrada? —

Tuve muchas opiniones en las primeras preguntas, sin embargo la última me detiene de golpe.

Just Me & You | GaaMatsu Fanfic | #AlianzaAwards Donde viven las historias. Descúbrelo ahora