Diferentes [D#1]

Capítulo nueve: ¿Aceptas salir conmigo?

Lo cierto es que hoy llegué tarde apropósito, ahora Cassidy está molesta conmigo porque quería discutir algo sobre el trabajo de matemática, pero honestamente haré cualquier cosa para evitar tener otro encuentro con Roxanna y Abby. No es que sea muy miedosa, y lo soy, es solo que sé que si llego a molestarme, no voy a poder controlar mi ira y no estoy segura de lo que pueda pasar.

— Te veo en el almuerzo —me dice Cassidy antes de cruzar a la izquierda e irse a su clase de biología.

Asiento y sigo caminando derecho, hasta llegar al final del pasillo e ir a mi clase de literatura.

Doy un paso para entrar al salón, pero en ese preciso instante, Max aparece frente a mí, bloqueándome el paso.

— Déjame entrar, no estoy de buen humor hoy.

— ¿Y cuándo lo estás? —pregunta levantando una ceja, lo fulmino con la mirada y enseguida la baja— Bueno, te tengo una propuesta.

— No —digo firmemente.

— Ni siquiera me has dejado hablar.

— Mi respuesta va a seguir siendo no.

— ¿Ni por qué suene muy tentativa?

— No, solo quiero entrar.

— Ya te guarde un puesto frente a mí... Me gusta que te sientes frente a mí —sonríe de medio lado y yo pongo los ojos en blanco.

— Precisamente quiero otro puesto, uno muy lejos de ti.

Max se lame los labios, como si estuviera algo nervioso y se agacha un poco para estar a mi altura, me cruzo de brazos y lo miro fijamente.

— Si sacamos más de 7 en ese ensayo, ¿Aceptas salir conmigo?

— No —digo un poco más firme que antes—, no voy a ir a una cita contigo.

— No tiene que ser una cita.

— No pienso ir contigo ni a la esquina.

— Eres mala —sus cejas se unen un poco—, vamos, di que sí.

— Ah, ya sé lo que trata todo esto —chasqueo los dientes algo frustrada—, ¿Hiciste una apuesta con tus amiguitos? ¿Cuál es? ¿Qué me enamore de ti? ¿Qué me beses en público? ¿Qué salgamos en una cita? ¿Qué sea tu novia por yo no sé cuánto tiempo para que luego tu termines conmigo y me dejes con el corazón roto? No Max, nada de eso, me niego rotundamente a ser parte de tu estúpido juego —él frunce el entrecejo un poco molesto y se inclina un poco más hacia mí, agarrándose del marco de la puerta—, sea lo que sea que vayas a perder, puedes ir diciendo de una vez que lo harás, porque yo no voy a aceptar ir contigo a ningún lado, ¿Te queda claro? 

— Pero, si yo solo quería salir contigo Sky, —niega con la cabeza, algo derrotado— no entiendo porque tienes que ser tan dramática con todo.

De alguna manera, ese comentario me hace sentir mal, y para evitar la charla, aprovecho mi pequeño tamaño y me escabullo por ese espacio debajo de sus brazos y entro al salón, todos están demasiado distraídos en su conversación, dudo que alguien si quiera se haya dado cuenta que él estuvo hablando conmigo... 

Alá, ¿Por qué me haces eso? Es tan vergonzoso... Una señal de que él hablaba en serio no hubiera estado de má.

Con la cabeza gacha camino por el salón hasta llegar al último puesto, pegada a la pared, inmediatamente dejo mis cosas en el escritorio y me siento demasiado rápido, hundiéndome un poco, haciendo todo lo posible para que Max no me vea, puesto que acaba de entrar al salón con una cara de pocos amigos, llega hasta el puesto detrás de donde siempre suelo sentarme y se deja caer en la silla.