Liv es una joven mutante capaz de manipular el agua a su antojo, además de poseer poderes curativos. Su madre, antes de morir, se topa con Erik Lehnsherr y su sequito; dejándolos a cargo de la pequeña Liv. Sin otra alternativa, Erik se convierte en...
Liv estaba tendida sobre el pasto, meditaba sobre los acontecimientos recientes mientras jugaba con un remolino de agua sobre ella. Estaba tan perdida en sus pensamientos que no vio a Jean acercarse.
— ¿Estás ocupada?
Liv evaporizó al instante el agua, permaneció acostada y con los ojos cerrados.
— Depende, si vienes a molestarme si, estoy ocupada.
— Vengo a tratar que seamos amigas.
Con asombro Liv se puso de pie, ambas jóvenes quedaron frente a frente. El problema no radicaba en una especie de odio o enemistad, simplemente el comienzo entre ellas no empezó de la mejor manera.
— Te escucho.
Jean suspiró, le costaba bastante trabajo reconocer las emociones que la llevaron a sentir aversión por Liv.
— La verdad es que tu llegada no fue en el mejor momento.
— Ni de la mejor manera, lo siento.
— Aunque estuve molesta, eso ya quedo atrás — Grey sonrió. — La realidad es que llegué a sentir un poco de envidia por tus poderes, por eso comenzaste a desagradarme. He lastimado a mucha gente a causa de mi mutación, y al ver lo que puedes hacer... Bueno, no espero que me entiendas, pero que al menos nos tratemos mejor.
Liv se quedó sin palabras, lo mejor que se le ocurrió fue un abrazo. Quería decirle a Jean que ya no importaba lo que pasó, y que su mutación no sólo servía para hacer daño.
— Comencemos de nuevo — Liv soltó a la pelirroja y ambas sonrieron.
— Sabes, a veces las mejores amistades empiezan así, detestándose al principio. Siendo honesta, en algún momento pensé en que había algo malo en ti, algo extraño.
Liv dedujo que eso "malo y extraño" podía ser Erik Lehnsherr, pero evadió el pensamiento. Estaba a punto de hacer un comentario divertido cuando Charles irrumpió en sus mentes.
"Lamento arruinar su reconciliación pero necesito hablar con Jean, es urgente"
Ella tuvo que irse, prometiendo que después hablarían e incluso harían una pijamada. Liv no se quedó sola por mucho tiempo, sintió una ráfaga de viento y al instante Peter estaba a su lado.
— ¿Todo en orden?
Ella asintió y aceptó el pastelillo de vainilla que él le ofreció. Estuvieron en silencio algunos minutos, ambos habían estado pensando últimamente que quizás no valdría la pena buscar a Magneto, Peter fue el primero en decirlo.
— Si lo piensas bien, él ha estado ausente toda mi vida. No creo que al decirle que soy su hijo algo vaya a cambiar. Pero estoy dispuesto a ayudarte para que resuelvas el misterio.
— Tal vez no quiera resolver el misterio.
Peter la miró confundido, ella explico que podría ser lo mejor dejar las cosas como estaban. Él no parecía estar de acuerdo pero la apoyaría de todas formas, se lo hizo saber y cambió de tema. Para Peter era más divertido burlarse de Liv y Alex que hablar sobre Erik.
*
Lo último que Liv esperaba era una fiesta, la recuperación de Charles y el aniversario de la escuela eran motivos suficientes. Durante la tarde, el Profesor se encargó de comunicar la realización de dicho evento dentro de dos dias, celebrarían en grande. Liv, al igual que todos, estaba más que emocionada
Alex aprovechó que la puerta de la habitación de Liv estaba abierta, se recargó en el marco de la misma y observó algunos segundos como ella ponía orden en su closet.
— ¿Bailarás conmigo un par de canciones?
— Las canciones que quieras — volteó para acercarse al rubio y sonreírle.
Alex estaba seguro que Liv comenzaba a corresponder a sus sentimientos, y le agradaba mucho la etapa de coqueteo entre ambos.
— ¿Segura?
— No soy yo la que debe preocuparse.
Las sonrisas de ambos compaginaban a la perfección, la cercanía era perfecta para que acto seguido se besaran. Pero de nueva cuenta, el nuevo padre adoptivo de Liv se hizo presente, haciendo que ellos se separaran.
— Alex, estaba buscándote, Hank y yo necesitamos hablar contigo sobre los fuegos artificiales.
Liv alzó una ceja y vio a Charles con desaprobación. No sabía si la pirotecnia era algo cierto o se trataba de una mala excusa creada por el nuevo rol de papá de Charles.
— Si, en un momento los alcanzo.
Xavier mostró una pequeña sonrisa inocente, y antes de irse le recomendó a Liv que se durmiera pronto y a Summers que lo esperaba de inmediato.
— ¿Sabes si le ocurre algo? Siento que se comporta extraño conmigo.
— Le he dicho que siento que fuera mi padre, y se lo está tomando enserio. — suspiró encogiéndose de hombros.
— Tomaré mis precauciones.
Antes de irse, Liv detuvo a Alex y besó delicadamente la comisura de sus labios.
— Tenemos un beso pendiente.
Liv lo dijo sin pensar, y no se arrepentía. Él sólo le guiñó un ojo y se fue con una sonrisa de tonto en el rostro. Ella se fue a dormircon la extraña sensación de un desenlace inevitable acercándose.
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